Teatro

La libertad según Paulo Castro

Escena Contemporánea dedica un ciclo al artista luso

2 febrero, 2006 01:00

Passolini inspira Nighting-gale in the Catholic Church

Escena Contemporánea de Madrid dedica su ciclo Perfil a un artista multidisciplinar que combina el teatro, la danza, la performance y el cine, el luso Paulo Castro.

El multidisciplinar artista portugués con residencia en Berlín estrena en Madrid dos obras de teatro y una performance, tres propuestas que muestran parte de la obra de un creador comprometido con lo que hace y con la sociedad y el arte de su tiempo como se encarga de dejar claro desde el primer momento. "El teatro por el teatro o la danza por la danza no me interesan mucho", asegura desde Alemania tras regresar de Australia. A Castro le importa el artista capaz de preguntarse por "la ética más que por la estética", planteamiento que le hace detestar "la idea de espectáculo". Incluso va más lejos y afirma que cuando "un trabajo es demasiado espectacular deja de ser arte", algo raro en unos tiempos donde prima la vistosidad. El rechazo de tales fuegos de artificio le lleva a valorar por encima de todo "la sinceridad" en los proyectos a los que se enrola. Estos deben ser "interventivos, nunca pasivos", además de cercanos a su manera de ver las cosas para que los escoja un artista que se define como "un passoliniano puro".

El otro flanco de su obra es la manera de plasmar esas ideas sobre los escenarios o el celuloide. Castro se siente cómodo tanto en el teatro, como en la danza y el cine, lenguajes que ha usado en sus proyectos y que combina porque "actualmente todas las artes están mezcladas"; a la vez que considera la especialización como uno de los problemas del arte actual. Algo parecido le ocurre con las diferentes intervenciones que desempeña en sus trabajos. "Me siento bien en todos los papeles", reconoce quien es autor, director, actor y bailarín segúnla ocasión. En Madrid se le verá en todos estos papeles, con tres obras que recorren sus últimas propuestas sobre la religión, la observación de los individuos y el papel de la policía en la sociedad actual, entre las que figura una pieza teatral basada en un texto de Pier Paolo Passolini (Nighting-gale in the Catholic Church). Las otras son Wake up-Hate, sobre un escrito de Jean Fabre, y B-File, performance que dedica "a los humillados de este mundo".

A todos los humillados
La pieza presenta un interrogatorio policial a unas personas que llegan a un aeropuerto. La intervención de los gendarmes aumenta de tono hasta llegar a la violencia y manifestándose de forma diferente según el origen de los pasajeros. Con la obra, que tendrá lugar en el Teatro Pradillo los días 8 y 9 de febrero, Castro plantea el papel de una "policía que cada vez tiene más poder en un mundo lleno de violencia". La obra basada en el texto de Passolini, también en la Pradillo (6 y 7 de febrero), reflexiona sobre la religión. Castro considera que "el fanatismo religioso siempre ha sido un gran problema", pero también cree que es un cuerpo de ideas que además de "causar muertes puede servir para ofrecer una respuesta a la muerte". Wake up-Hate" (El Canto de la Cabra; días 4 y 5) es, por el contrario, "un auténtico manifiesto contra la soledad" y que toma como punto de partida un texto de Fabre en el que un hombre regresa de la muerte para filmar todo con sus propios ojos.