Teatro

Royal Shakespeare Company

Barcelona y Almagro reciben "Los cuentos de Canterbury"

15 junio, 2006 02:00

La Royal Shakespeare Company en una escena de Los cuentos de Canterbury

Amor cortés, cuentos morales, sermones, humor... Nada que tenga que ver con la naturaleza humana es ajeno a Los cuentos de Canterbury, una producción de la Royal Shakespeare Company, basada en el texto de Geoffrey Chaucer, que se presenta en el Teatro Nacional de Cataluña a partir del 21 de junio. El montaje podrá verse también en el Festival de Almagro el día 28.

La representación en el TNC de The Tales of Canterbury, en una brillantísima producción de la RSC, constituye un evento teatral excepcional en Barcelona, al final de la temporada teatral y en espera del Festival Grec. Son seis horas de Chaucer sobre el escenario de una obra que no se hace larga, según afirman los críticos teatrales de algunas ciudades por las que ha estado de gira tras su estreno en Stratford-on-Avon, la sede de la RSC, el pasado noviembre. Es un auténtico acontecimiento teatral disfrutar de la enorme profesionalidad de esta compañía clásica de larga tradic ión, fundada en 1879.

Trajes de época
La puesta en escena de la Royal Shakespeare Company da al espectáculo una gran creatividad artística, con vistosos pero sencillos trajes de época, con música de cuerda, percusión y viento. La Royal Shakespeare Company basa su existencia en la representación de todo el repertorio teatral de Shakespeare pero no es ajena a autores como Chaucer quien además es inspiración directa de Shakespeare , como es el caso de Los dos caballeros de Verona. Y como Shakespeare, Chaucer en su obra es capaz de hablarnos de todo un mundo en uno solo de sus cuentos. Los Cuentos de Canterbury -con una lista de doscientos personajes en el texto- son una colección de historias de Geoffrey Chaucer, figura cortesana y política clave en la literatura inglesa que escribió a finales del siglo XIV en inglés medieval.

Algunas son originales, otras pertenecen a esas historias que cuentan un grupo de peregrinos en su camino de Southwark a Canterbury para visitar el altar de la catedral y sólo dos son en prosa.Tiene una estructura literaria que podría compararse al Libro del Buen Amor, del Arcipreste de Hita, o al Decameron de Boccaccio. Desde el amor cortés al sermón, algunas están llenas de humor, otras son serias pero todas pretenden describir los rasgos y los defectos de la naturaleza humana, y especialmente críticas con las malas prácticas religiosas. Son frecuentes las alusiones al ocultismo y a la astrología.

En principio, se trataba de veintinueve peregrinos a quienes el hostalero pide que cada uno cuente dos fábulas en su camino a Canterbury y dos más durante su retorno. Pero sólo veintitrés peregrinos cuentan fragmentos de fábulas. Apenas cinco o seis pueden resultarnos conocidas pero el espectáculo desarrolla la historia de otras quince incluyendo algunos elementos de las restantes. Y si alguna de ellas, como la del Monje, pudiera resultar aburrida, el director del espectáculo utilizará el entreacto para interrumpir la posible monotonía.

Una obra global
En casos como el del Cocinero, se le hará callar abiertamente; en otras ocasiones la compañía convertirá en ópera alguna de las pequeñas historias de esta gran obra medieval globalizadora y universal. Sólo quince de los cuentos se representan en su totalidad pero todos los demás están apuntados o insinuados en el espectáculo. El enlace entre ellos es el propio Chaucer, que interpreta Mark Hadfield. El inicio es el peregrino.

Como dice el director del espectáculo, Gregory Doran, que ha puesto en escena la obra con la colaboración de Rebecca Gatward y Jonathan Munby, "sería imposible hacer todo el libro de Chaucer puesto que hay cuentos muy largos, como el del Caballero, que requiere una hora y tres cuartos para ser leído en voz alta. Un estilo, el de la lectura pública, que en la época era una de las formas escénicas que gozaban de gran favor popular". La adaptación teatral de Mike Poulton, en la línea de las producciones de la RSC, ha hecho accesible el texto al público de hoy. Son veinte actores y cuatro músicos los que veremos en eBarcelona y en Almagro. La ocasión de ver el último gran espectáculo de la RSC en España es sin duda un enorme aliciente para todo el público aficionado al buen teatro.