Tronío es una palabra con un bagaje que va más allá de su significado. Relacionada, como ha sido, con una artista de perfil tan potente y simbólico como Lola Flores su riqueza es aún mayor. Lola el espectáculo que la coreógrafa y bailarina Yolanda Gaviño y su Ballet Español, le dedica a La Faraona, así lo refleja al definir a su protagonista con la frase de "arte, pasión y tronío".

El ballet parte de una idea original de Edmundo A. Van Loshe. La obra, que se estrena mañana en el Teatro Nuevo Apolo de Madrid, repasa la biografía de La Lola de España en dos actos que pretenden resaltar los momentos más significativos de su vida y trayectoria, desde la perspectiva de un homenaje que huye de los tópicos mediáticos. Las ocho escenas del ballet acompañan a la protagonista desde su nacimiento hasta su desaparición, pasando por la plenitud de su carrera y vida familiar. Todo un reto, tratándose de una artista con connotaciones míticas, cuyo arte y papel dentro de la historia de una época muy concreta ha sido analizado por tantos. Lola cuenta con una banda sonora que incluye música de Brahms, S. Lope Sango, de la propia coreógrafa y flamenco popular, más la voz grabada de Blanca Villa, que tocan cuatro músicos.

Los intérpretes comparten escenario con igual número de bailarines, incluida Gaviño. La artista comenzó su carrera muy joven con el Ballet Nacional de España. De esta formación pasó en 1980 a la de Antonio Gades para, seis años después, crear su propia compañía, con la que ha realizado varios espectáculos, entre ellos Carmen, El Amor Brujo y Bodas de Sangre. Ha colaborado como bailarina y con su grupo en numerosos programas de televisión y espectáculos dedicados a la copla, acompañando las giras de Isabel Pantoja en varias ocasiones.