Ensayo

Mola, el general en su laberinto

Carlos Blanco Escolá

13 febrero, 2002 01:00

La esfera de los libros. Madrid, 2002. 358 páginas, 20’50 euros

Pocos temas sobre la Guerra Civil van quedando en el tintero. La figura de Mola estaba entre ellos, así que publicar un trabajo sobre la sinuosa personalidad del general y su papel en la conspiración es un acierto de Carlos Blanco, coronel de caballería e historiador, y de la editorial. Otra cosa es que el autor cargue las tintas sobre el personaje. Existen verdades incuestionables sobre Mola: militar decepcionado con la Monarquía y la República, derivó hacia el totalitarismo, su figura resultó fundamental para la incorporación del sector africanista a la insurrección y no aceptó de buen grado la concentración de poderes en Franco. A partir de ahí, Blanco Escolá traza un retrato de "malo de la película". ¿Era un ególatra, un endeble intelectual resentido y mezquino? Los libros que escribió, su reputación como Director de la conspiración y las palabras de Franco que siempre le tildó de rojillo, indican que pudo haber algo más. Mola sufrió una profunda transformación cuando estuvo preso durante la República. Luego le sublevó la reforma militar de Azaña. Su pensamiento evolucionó a una forma de totalitarismo socializante a la manera del primer fascismo de Mussolini.

Más que una biografía estamos ante una diatriba contra el malísimo generalote que no cesó de conspirar contra la izquierda encabezada por el santo Azaña. Sin embargo, el maniqueísmo no resta interés al libro. Muy bien escrita, la obra da un completo repaso a los acontecimientos que condujeron al enfrentamiento civil sin ocultar los aspectos más destacados de un hombre víctima de su vehemencia. El militar "incompetente, hipócrita" aparece atormentado pocos días antes del golpe, "pensando en el horrendo estrago que se produciría en España si fracasaba la conjura". Cuando Mola visitó a Franco en Burgos para pedirle la Jefatura del Gobierno ¿era sólo por ambición? Cada lector sacará sus conclusiones.