Ensayo

Isaac Albéniz. Retrato de un romántico

Walter Aaron Clark

10 abril, 2002 02:00

Traducción de Paul Silles. Turner. Madrid, 2002. 423 páginas, 24 euros

Resulta llamativo que este libro sea adjetivado en portada como "la primera gran biografía de Albéniz". Y no porque estemos ante un calificativo exagerado, ya que su calidad es perceptible desde las primeras páginas, sino porque resulta triste que anteriormente no se le haya dedicado un trabajo de igual merecimiento a uno de nuestros primeros músicos. Que haya habido que esperar a que un americano, de la Universidad de Kansas, pueda resumir con la distancia necesaria la labor del creador de Iberia, dice mucho de nuestro pasado musicográfico, común por cierto a otras ilustres personalidades como Victoria o Granados. Habría que requerir qué razones puede haber detrás de que en los últimos años se hayan escritos excelentes monografías dedicadas a otros músicos y, sin embargo, Albéniz se haya quedado huérfano. Pero eso es otra historia.

El libro de Walter Aarón Clark es un magnífico trabajo de investigación y síntesis. Había bastantes cosas en la vida de Albéniz desconocidas u ocultas y era necesario rebuscar en archivos, documentos, en aquellos lugares que frecuentó para saber qué había de verdad y qué de falsedad. Puede que a un lector del XXI le resulte extraño que el mitificado encuentro con Liszt nunca tuviera lugar, ni que se dieran otras pequeñas mentiras que el músico vasco-catalán fue dejando caer en su vida. Pero desde la perspectiva romántica era muy habitual que las carreras se enmascararan, lo que se ve corregido y aumentado en una mente dada a la fantasía como era la suya.

El tratamiento de los diferentes aspectos de su vida, tanto creativa como personal, es serio y sistemático. Nos aporta información muy valiosa sobre figuras destacadas en su transcurrir como el banquero Money Coutts, responsable de los libretos de las óperas inglesas que tanto revuelo causan en la actualidad, la pianista Blanche Selva, el conde de Morphy, compositores como Gabriel Fauré o Chausson y un largo etcétera que enmarcan una de las vidas más intensas, que no extensas, de nuestro pasado musical y que explican el desarrollo de su catálogo, mucho más amplio e interesante de lo que muchos seguidores podían pensar.

Quizá se podría poner alguna pega al tratamiento de las etapas de Albéniz en España, quizá uno de sus capítulos menos completos, aunque siempre se puede disculpar por las limitaciones espacio temporales de un estudioso americano. También los análisis de las obras interesan más al lector con profundos conocimientos musicales que al aficionado medio. Este importante esfuerzo editorial cuenta con una presentación acorde con el trabajo que puede ayudar a consolidar ese gran esfuerzo que conjuntamente se está dando en la batalla por el patrimonio español.