Ensayo

Historia de América

Carlos Malamud

17 noviembre, 2005 01:00

Alianza. Madrid, 2005. 507 páginas, 24 EUROS

Iniciada la andadura del siglo XXI y a punto de comenzar las conmemoraciones de los bicentenarios de las independencias de las Repúblicas latinoamericanas parece apropiado realizar una reflexión general de la historia de América que permita entender mejor las dinámicas y los retos del presente.

Malamud subraya en la introducción que su obra tiene la misión de discutir el significado del descubrimiento y la conquista de América; analizar el impacto que la construcción de las sociedades coloniales tuvo sobre los pueblos que habitaban el continente americano; valorar el peso que las teorías pactistas castellanas del XVI y las ideas liberales de 1812 tuvieron en la conformación de las ideas políticas de las repúblicas latinoamericanas durante el XIX; y demostrar que el conjunto americano no acepta simplificaciones.

El libro comienza ofreciendo en 15 páginas una breve panorámica de las culturas existentes en el continente americano antes de 1492. Le siguen cuatro capítulos extensos en los que se narra el descubrimiento del Nuevo Mundo, la conquista, la colonización y la evangelización. A continuación, se explica cómo se fueron construyendo las sociedades coloniales, cómo se gestionaba el conjunto imperial, y cuáles fueron las dinámicas económicas que se dieron durante los siglos XVI y XVII. Posteriormente, se narran las experiencias colonizadoras en el continente americano de otras potencias europeas (portugueses en Brasil, ingleses en las Trece Colonias, franceses en Canadá...). El estudio de la época colonial se cierra con un capítulo sobre las dinámicas sociales, políticas y económicas de la época de las reformas borbónicas. A continuación, se explica cómo Estados Unidos, Haití, Hispanoamérica y Brasil llegaron a la independencia. En la tercera parte se narra la historia contemporánea. Se comienza con la explicación de las consecuencias políticas y económicas de la independencia, se presenta la evolución de los regímenes oligárquicos, y se termina con la exposición de cómo periclitó el sistema oligárquico. Finalmente, en un capítulo breve repasa cómo se pasó de la autarquía a la liberalización económica, y de los autoritarismos a la democracia.

Sin duda, el libro será utilizado por los estudiantes universitarios por tener la virtud de ser sintético. Los lectores especializados echarán en falta una discusión más profunda de la evolución del siglo XX y, sobre todo, la explicación de las dinámicas históricas de Estados Unidos y Canadá durante los siglos XIX y XX. Tal vez, si se hubiera presentado la obra como una Historia de América Latina en vez de como una Historia de América se habría eliminado este problema.