La sociedad de los otros
William Nicholson
1 diciembre, 2005 01:00Protagonizada por un joven recién licenciado, cuyo nombre no se revela, pasivo, absolutamente nihilista, cuya visión negativa del mundo le lleva a vegetar encerrado en su cuarto, la novela arranca como una "novela de viaje" o de crecimiento (bildungsroman) para convertirse después en una narración de espías, trufada de filosofía. El resultado es un relato interesante donde se nos cuenta la metamorfosis de ese innominado joven inglés, que escapa haciendo autostop con el dinero que le ha dado su padre para unas vacaciones que le aparten de la apatía.
A la manera socrática, su iniciación comienza con el intrigante camionero, aficionado a la filosofía, que le conduce a un país centroeuropeo que vive bajo la opresión. A partir de aquí nuestro protagonista sabrá de un imaginario filósofo Leon Vicino, cuyo libro es perseguido, y que sirve de hilo conductor al misterio de lo que va sucediendo. El camión será asaltado por la policía, conocerá grupos terroristas, pero también una sociedad civil que busca el crecimiento personal ante esas adversidades. Nicholson sabe recrear atmósferas kafkianas, usar de forma inteligente un humor negro refinado, para ofrecernos los miedos y dificultades del ser humano. Utopía de la búsqueda, el viaje es una metáfora del camino hacia el conocimiento de uno mismo.