Poesía

Vivimos en el ciclo de las erofanías

Yolanda Castaño

28 febrero, 2001 01:00

Edición bilingöe. Huerga & Fierro, Madrid, 2000. 59 pp., 1200 pesetas

Siempre son bienvenidas estas ediciones bilingöes que nos permiten conocer y disfrutar la poesía escrita en otras lenguas, y máxime siendo el gallego un idioma que literariamente disfruta de una nueva época dorada. Entre las voces más nuevas de la lírica galaica merece especial mención Yolanda Castaño, que por Vivimos el ciclo de las erofanías, publicado en lengua gallega en 1998 y que mereció el premio de la Crítica española. Nacida en Santiago en 1977, se dio a conocer con el libro Elevar as pálpebras, con el que obtuvo el premio Fermín Bouza Brey en 1994. Atrevimiento, visión imaginística y una muy notable mezcla de tradición y actualidad se conjuga en este libro impactante, transitado de un erotismo indagador, de memoria de la sensualidad nacida en una naturaleza perfectamente asimilada por la poeta.

Dirigida a un tú omnipresente, la voz narrativa del yo femenino se alambica en su interrogación. De esta manera nos encontramos con una nueva visión del conocimiento erótico en su formulación lírica: a través de la experiencia amorosa se llega a una refundación del propio ser emocional y social, a la definición del "otro" que refleja una ordenación nueva del mundo y su forma de estar en él.

Es éste un libro que trata del crecimiento a través del erotismo, como un sacramento que inicia en el cuerpo y en las emociones del yo: "A ver si cabemos los dos en el espacio que ocupaba mi autolatría,/confiando en que confíes en mis ojos pintados de violeta/ y te requiero por tu dogma nuestro y porque sabes comerme bien;/la unión y el desafío que tanto me tardaban./ Quién me diese cualquier adverbio de tiempo junto a ti. Penetrar tus latidos, abrigar tu oculto. /entablando un diálogo con tus caricias una a una. /Este será el tiempo de fortificarte" (página 17). Indagación corporal y textual: la tarea de la poesía es otra suerte de arte de amatoria.