Poesía

Hilos

Chantal Maillard

17 mayo, 2007 02:00

Tusquets. Barcelona, 2007. 200 páginas. 12 euros

En la fajita roja que abraza Hilos de Chantal Maillard se lee: "Chantal Maillard. El nuevo libro de la autora de Matar a Platón (Premio Nacional de Poesía 2004)". Al parecer, Tusquets considera que: a) el nombre de la autora vende libros; b) Matar a Platón vende libros; c) el Premio Nacional de Poesía vende libros. Lo cual obliga a contemplar el panorama poético español desde -citando a Almudena Guzmán- una perspectiva de furias.

Maillard constituye un fenómeno paranormal. Popular entre el público, respetada por la crítica, premiada por las instituciones. Y amanerada: "¿Corté el hilo / o simplemente lo solté? / ¡Se sueltan tantas cosas! / Y ¡hace tanto tiempo! El aire / se entumeció. ¿O fue la mano?" (p. 77). Y simple, de simpleza: "Cual asomado a otro. / Articulado. / Extrañado. / Extrañado. / Extrañado. / Extrañado. / Hastiado" (p. 153). Y vacua: "Trazar un cero en la nada. / Indefinidamente. / Trazar la nada en un círculo. / Apresada en el círculo trazando / nada. Ocuparse en el / círculo. Ocuparse. / En nada. En la nada /-¿la nada?- una oquedad..." ("El círculo"). Y, cuando asoma una tímida originalidad en ese "Cual" que da título a la segunda parte de Hilos, la autora lo explota inmisericordemente, hasta el agotamiento del recurso, hasta la exasperación del lector. Esto -y no el latín- es lengua muerta.

Puesto que su nombre, su obra y su medallero venden libros, concedamos que Maillard escribe poesía. Pero permítasenos, al menos, calificarla de poesía frívola. Porque no hay peor superficialidad que la profundidad fingida.