Sergio Ramos marca el camino a La Decimocuarta: el hambre del capitán
- El Real Madrid inicia su camino en la Champions este miércoles. El tricampeón aspira a lograr su cuarto título seguido que coincide con el tiempo del capitán con el brazalete.
- La petición NBA de Sergio Ramos al ganar en Kiev: anillo para el campeón
Noticias relacionadas
- Las diez claves de la Champions League que debes conocer antes de su comienzo
- El discurso de Zidane al descanso de la final de Champions que cambió todo
- La petición NBA de Sergio Ramos al ganar en Kiev: anillo para el campeón
- Así explicó Marcelo el gol de Ramos en Lisboa en la previa a la final de Kiev
- La habitación de Ramos en Kiev antes de ganar la Champions, al descubierto
- La charla del vestuario del Real Madrid antes de la final de la Champions
- Las claves del Real Madrid en la Champions League
El Real Madrid iniciará su camino en la Champions este miércoles con el objetivo de defender La Decimotercera. Lo hará 117 días después de la consecución de la 'Orejona' en la final de Kiev, la tercera consecutiva, en el Santiago Bernabéu y frente a la Roma. Todos contra el campeón y con la mirada puesta en la cita del Wanda Metropolitano que albergará la final.
Un reto mayúsculo para el Real Madrid. Fue el primero en conseguir dos Champions seguidas. Un hito histórico que superaría el curso pasado al conseguir la tercera consecutiva. Al club blanco se le acaban los retos, pero ha mostrado una increíble capacidad de autosuperación que automáticamente le coloca en la pelea por La Decimocuarta.
El inconformismo del Real Madrid
Cada año que pasa parece más difícil que el Real Madrid pueda continuar con su racha victoriosa que se extiende ya por tres años, pero el vestuario tiene un hambre insaciable y no se conforma con lo logrado hasta ahora. Un grupo inconformista con sus propios triunfos y gran culpa de ello lo tiene su capitán, Sergio Ramos. El camero es la personificación de esta mentalidad y el guía espiritual de un equipo hecho a medida para la consecución de grandes títulos.
Desde que Ramos sucediera a Casillas en la capitanía del Real Madrid, el club no conoce otra cosa que no sea ganar la Champions temporada tras temporada. Ya se ha convertido en el capitán en levantar más 'Orejonas' de toda la historia, elevándose como una de las mayores leyendas de la historia del Madrid. Pero quiere más. Triunfar en Milán, Cardiff y Kiev no es suficiente para él y quiere su cuarta como capitán (la quinta con la de Lisboa). La mejor imagen para escenificar esto fue su discurso en la fiesta de La Decimotercera en el Santiago Bernabéu, en la que ya avisó que van a por La Decimocuarta.
Parece una broma, pero así es el capitán y es la fuerza que transmite a sus compañeros. Da igual lo que se consiga, que siempre van a por más. Se vio en cada una de las finales conseguidas en los últimos años y es que al vestuario le 'pone' seguir haciendo historia. Es su gran motivación para año tras año estar al pie del cañón. Todo barco necesita su capitán y este cuenta con uno de los más fuertes del continente, listo para guiar a su tripulación en cada batalla por toda Europa.
Ramos, más capitán sin Cristiano Ronaldo
Pero algo ha cambiado este año y es que Sergio Ramos ha pedido a su segundo de a bordo, Cristiano Ronaldo. Era habitual ver tanto al camero como al portugués comandar las arengas en cada final europea, pero eso ya no volverá a suceder después de que el '7' pusiera fin este verano a su etapa de blanco. Pero Ramos se basta él solo y ha asumido con naturalidad que ahora tiene todavía más responsabilidades si cabe. No le pesa el brazalete y menos aún ser la voz cantante del grupo.
Lopetegui entiende muy bien el papel de Ramos. Lo conoce ya de la Selección, donde también es esa figura dominante en el vestuario. Es la mano derecha del técnico vasco y este le ha dado vía libre para echarse más galones a sus espaldas. La salida de Cristiano dejó un hueco en ciertas responsabilidad que ahora recoge el capitán: comanda los ataques del equipo, lanza los penaltis e incluso se atreve con las faltas directas. Todo un ejercicio de personalidad que le queda como un guante.
Esta temporada Ramos se enfrenta a la dura misión de demostrar que las salidas de Zidane y Cristiano no ha supuesto el final de la segunda era dorada del Madrid. El bloque se mantiene y, además de Ramos, Modric, Bale, Benzema y una larga lista de nombres están listos para volver a cerrar bocas otro año más. Es lo que les gusta y cuentan con el factor del miedo que infunden a todos sus rivales en Europa. La leyenda está más viva que nunca.