El CP Villarrobledo encara prudencia, pero también con ambición, la eliminatoria definitiva por el ascenso a Segunda División B. El cuadro rojillo sabe que tiene potencial para ascender, pero antes deberá superar a un rival muy complicado. Se trata del Almería B, uno de los filiales más competitivos de la categoría y que visitará el Virgen de la Caridad a partir de las 12:00 horas. 

Un duelo en el que la premisa del Villarrobledo es tratar de ganar. Pero, sobre todo, no encajar. Parece un axioma en estas fases de ascenso, pero lo cierto es que mantener la portería a cero puede allanarle mucho el camino al conjunto rojillo, que tendrá que jugar la vuelta en el estadio de los Juegos del Mediterráneo. 

Los de Manolo Martínez han demostrado su capacidad realizadora y tienen opciones de llevarse el primer asalto en su feudo, pero no se confían en absoluto ante un filial al que el técnico considera como "atípico". No en vano, avisa de que además del talento propio de los equipos de categorías inferiores, reúne también ciertas cualidades de conjuntos con más poso, como "el juego aéreo" que se les ha permitido llegar a la última eliminatoria por el ascenso. 

Varias ausencias

La noticia negativa está en las bajas que tendrá el conjunto albaceteño para este encuentro. No en vano, son varios los jugadores que se perderán el choque. Tal es el caso de futbolistas como José Carlos Gil, Baquero, Borja Collado o Salva Gómez. Asimismo, se perderán el encuentro también el entrenador, Manolo Martínez, así como su segundo, ambos por sanción federativa.