El primer moroso de España saca a subasta pública más activos inmobiliarios en Castilla-La Mancha

Reyal Urbis, una de las principales empresas inmobiliarias de España antes de que explotase la pandemia, es actualmente el mayor moroso del país con una deuda a Hacienda en 2024 de 279,81 millones de euros, frente a los 293,95 de un año antes, un 14% menos. Una disminución que se practica con la venta de inmuebles propiedad de la sociedad presidida por Rafael Santamaria, en fase de liquidación desde septiembre de 2017.

Ventas como la que acaba de anunciar el portal especializado Escrapalia, que convoca subasta pública de nuevos activos inmobiliarios procedentes de Reyal Urbis, en este caso cuatro suelos urbanos con un valor conjunto de un millón de euros.

Se trata, en total, de 14.125 metros cuadrados, valorados en el plan de liquidación en casi 1 millón de euros (983.305 euros), y que salen a subasta con un descuento superior al 65%. Los cuatro lotes de suelo urbano están ubicados en Valladolid, Yebes (Guadalajara), Valverde de la Virgen (León) y Aljaraque (Huelva).

En el caso del terreno de la localidad alcarreña, se corresponde con un solar de 9.234 metros cuadrados situado en el sector 1 de Yebes para uso residencial, con un valor de tasación de 3,1 millones de euros y un precio de salida en la puja de 790.000 euros.

Reyal Urbis , un grupo bien conocido en Castilla-La Mancha por ser el promotor en Guadalajara de la polémica urbanización Valdeluz, entre otras promociones en la región, surgió en 2007 tras la fusión de dos grandes empresas: Inmobiliaria Urbis y Construcciones Reyal.

A 31 de diciembre de 2012, Reyal Urbis contaba con un banco de suelo total de 7,8 millones de metros cuadrados de edificabilidad sobre rasante, lo que la convertía en una de las principales empresas europeas en la actividad de promoción residencial, con una cartera en renta de más de 459 millones de euros.

Una trayectoria empresarial que se truncó en febrero de 2013 cuando fue declarada en concurso, tras dos años de negociaciones infructuosas con los acreedores para encontrar una solución.