Álvaro Martínez Chana: un ingeniero de Cuenca, el único que no apoyó a Sánchez en la Ejecutiva
El presidente de la Diputación de Cuenca fue el único entre 49 miembros de la dirección del PSOE que se negó a refrendar el pacto del PSC con ERC.
3 agosto, 2024 02:36El pasado martes, horas después de que se conociera el acuerdo entre los socialistas catalanes y Esquerra Republicana para investir a Salvador Illa, el PSOE convocó a su Ejecutiva Federal para bendecir el documento. Desde el partido dijeron que sus integrantes lo habían "respaldado plenamente". Pero no hubo unanimidad, faltó uno.
Se trata del presidente de la Diputación de Cuenca, Álvaro Martínez Chana, quien optó por abstenerse. El único disidente es un dirigente poco conocido que, sin embargo, representa en la Ejecutiva la línea marcada por el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page.
Fuentes del partido señalan que Álvaro Martínez y Emiliano García-Page mantienen una "magnífica relación" y confirman que la abstención responde al malestar expresado en público por el presidente castellanomanchego.
La Comisión Ejecutiva Federal, el órgano encargado de aprobar la línea política de la formación, cuenta con 49 miembros y Álvaro Martínez es el único representante de Castilla-La Mancha.
En esa reunión estaba Pedro Sánchez, en calidad de secretario general del PSOE. También toda la plana mayor del partido, incluida la vicesecretaria general, María Jesús Montero. Precisamente ella se opuso hace apenas dos semanas a un concierto económico en Cataluña, que ahora defiende ante el resto de dirigentes socialistas, entre los que existe mucho malestar.
Ninguno de los presentes en la reunión se atrevió a contradecir al líder, salvo Álvaro Martínez, un hombre que hasta hace un año era alcalde de su pueblo, Almonacid del Marquesado (Cuenca), de poco más de 400 habitantes, y al que en su propio partido muchos ni conocen.
"Es de un pueblo pequeño y sabe de redistribución. Se abstuvo porque no está de acuerdo con el fondo de la cuestión, fue una decisión personal", afirman fuentes socialistas. Aunque a nadie se le escapa que su jefe, Emiliano García-Page, es uno de los líderes de la rebelión a bordo.
Martínez Chana, de 45 años, es ingeniero técnico agrícola en la especialidad de explotaciones agropecuarias y también ha trabajado como agente financiero en la cooperativa de crédito Eurocaja Rural. En la Ejecutiva Federal del PSOE ocupa un puesto de vocal y tampoco se le recuerda ninguna nota discordante.
Ni a nivel nacional, autonómico o provincial. Todas sus declaraciones en este tiempo se han centrado en asuntos locales y nunca se ha posicionado abiertamente en otras cuestiones polémicas en las que ha entrado Emiliano García-Page, como la amnistía.
Álvaro Martinez representa a una generación joven del PSOE en Castilla-La Mancha y, como otros dirigentes de la organización, se mantiene fiel a su líder.
La influencia de Page
Acostumbrado a elevar el tono ante decisiones del Gobierno que afectan a la política territorial, el presidente castellanomanchego fue un paso más allá un día después de esa Ejecutiva. Desde la sede de la Presidencia de su comunidad pronunció su "hasta aquí" habíamos llegado y expresó que su partido "no puede apoyar el pacto con ERC en el Congreso".
Desde distintas federaciones, incluida la castellanomanchega, se intenta presionar a Pedro Sánchez para que convoque de nuevo a sus barones y estudiar ese documento que establece una suerte de concierto económico para Cataluña. Pero antes de eso, que será la próxima batalla, García-Page quiso dejar su impronta en la Ejecutiva Federal, pese al respaldo del resto de dirigentes.
Lo hizo por persona interpuesta. Con un hombre que se caracteriza por la discreción y al que no se le conoce ninguna salida de tono. Entre 2007 y 2023 fue alcalde de Almonacid del Marquesado y desde 2019 es presidente de la Diputación de Cuenca.
En los últimos años, desde Ferraz han tratado de desactivar la crítica interna de Page imponiendo nombres en las listas, como el de Milagros Tolón, diputada en el Congreso y delegada del Gobierno en Castilla-La Mancha.
El presidente de la Diputación de Cuenca se mantiene fuera de estos juegos, en los que ahora se ha visto involucrado debido a la crisis interna que se ha abierto en el PSOE, en la que le toca posicionarse del lado de su jefe, adalid de los rebeldes.
Hasta ahora el nombre de Álvaro Martínez nunca había trascendido más allá de la política provincial. Llegó a alcalde de Almonacid del Marquesado con 28 años, fue secretario general de las Juventudes Socialistas de Cuenca entre 2007 y 2010 y antes de presidente de la Diputación ocupó el cargo de vicesecretario general del partido en esta provincia entre 2012 y 2018.
Le gustan los deportes, como demuestran las múltiples felicitaciones a deportistas conquenses en sus redes sociales, y en febrero pasado cedió su cargo temporalmente a su colega Nuria Illana al disfrutar del permiso obligatorio por paternidad.
Desde este momento será el hombre que no quiso doblegarse ante Pedro Sánchez cuando éste pedía cerrar filas ante el pacto con ERC, que contempla una profunda revisión de todo el sistema de financiación autonómica. A juzgar por las declaraciones desde otras comunidades, es probable que dentro de poco haya más nombres que sumar a la lista de díscolos.