Al PP le salen las cuentas con socios de Sánchez para llevar el 'caso Koldo' a una comisión de investigación
ERC y de Podemos no podrían "negarse" a apoyar la depuración de responsabilidades políticas en "un asqueroso caso de corrupción". Otros aliados parlamentarios del Gobierno meditan un cambio de posición.
23 febrero, 2024 02:46Alberto Núñez Feijóo pedía este jueves que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, dé explicaciones sobre la presunta "trama de mordidas" liderada por Koldo García, asesor del exministro José Luis Ábalos. Mientras el líder del PP acusaba al socialista de "embarrar" por haber tratado de tapar la operación Delorme acusando de "corrupción" a Isabel Díaz Ayuso, la dirección del PP valoraba la mejor estrategia para armar una comisión de investigación parlamentaria. De momento, ya le salen las cuentas.
Este periódico se ha puesto en contacto con todos los grupos de la Cámara y está en condiciones de asegurar que el PP podría contar con una mayoría de diputados partidaria de "investigar un caso asqueroso de corrupción", como lo definía una fuente de Esquerra Republicana de Catalunya.
A los 137 votos a favor que aportarían los populares, se sumarían los 33 de Vox y el de UPN. Pero tanto fuentes de ERC (7) como de Podemos (4) confirman a este periódico que no podrían "negarse" a apoyar la constitución de esta comisión de investigación.
La combinación de fuerzas sería absolutamente inesperada: la derecha extrema españolista votando junto a la izquierda separatista catalana; los conservadores del PP unidos a la izquierda radical podemita... pero la suma ya sería mayoritaria, de 182 escaños.
Aún habría que saber qué harían formaciones como el PNV o Bildu, que no dieron respuesta a este periódico. Si bien la portavoz abertzale, Mertxe Aizpurua, aseguró a las puertas del Palacio de Las Cortes que "habría que esclarecerlo todo, a fondo".
Por su parte, Junts se encuentra en una posición delicada.
Quedan ya sólo 13 días del plazo ampliado para que sus negociadores alcancen un acuerdo con el PSOE para las enmiendas de la ley de amnistía. Y el partido de Carles Puigdemont no quiere "remover las aguas". De hecho, el miércoles aseguraban que no dirían "nada" sobre el caso Koldo, recién estallado, pero este jueves ya admitían que la formación había decidido volver a meditar su posición.
Se da por supuesto (dado que sus portavoces oficiales tampoco quisieron dar respuesta a este periódico) que Sumar no apoyaría la comisión de investigación, dado su acuerdo de coalición con el PSOE. Aunque la formación de Yolanda Díaz presume de tener "tolerancia cero" con la corrupción, un enfrentamiento como ése con el socio mayoritario podría ser letal para sus aspiraciones de legislatura.
Y aún quedaría saber qué haría la otra formación que apoyó la investidura fallida de Feijóo, Coalición Canaria (CC). Fuentes de la dirección de esta formación confirman que decidirá cuando el Gobierno insular de Fernando Clavijo "termine de recabar la información" de cuántos contratos y cuántos millones adjudicó su predecesor, el socialista Ángel Víctor Torres, a Soluciones de Gestión SL, la empresa fantasma de la presunta trama corrupta.
De momento, son más de 12 millones de euros, sólo en cuatro contratos de los años 2020 y 2021. Pero cabe recordar que ese Ejecutivo autonómico liderado por el presidente de CC está formado en coalición con el PP. Y que el "quebranto de dinero público canario" por comisiones ilegales, explican, debe ser esclarecido "con todas las consecuencias".
Dejarlo solo
Los populares saben que la corrupción fue lo que los sacó del Gobierno, con una moción de censura impulsada por el PSOE y defendida... por José Luis Ábalos. Y que, desde entonces, Sánchez siempre presumió de que sus Consejos de Ministros habrían acertado más o menos, pero siempre han sido "limpios". Por eso, la operación Delorme puede ser tan devastadora para los socialistas.
"Ataca las mismas bases de lo que siempre hemos sido", admitía a este diario un dirigente de la primera época sanchista. "Tenemos que limpiar lo que haya, pero por el camino nos puede llevar por delante".
Eso es precisamente lo que buscaría el PP, rodear a un Sánchez debilitado por la amnistía, la derrota estrepitosa en Galicia, la indolencia tras los asesinatos de los guardias civiles de Barbate y el fracaso práctico de su viaje oficial a Marruecos, de la mayor cantidad de aliados políticos enfrentados a él por un caso inaceptable de corrupción.
El PP prevé que podría, incluso, dejar solo en el Congreso al Gobierno de coalición, y conseguir que todos los socios parlamentarios apoyaran esta iniciativa para depurar las responsabilidades políticas de este primer gran caso de políticos metiendo la mano en la caja del dinero público en los ejecutivos de Pedro Sánchez.
A falta de que el PP lo comunique oficialmente, lo cierto es que fuentes del partido confirman que Génova está valorando la mejor manera de dar el paso.
Senado o Congreso
De inicio, los populares saben que en el Senado podrían convocar una comisión de investigación sobre el caso Koldo sin mayores restricciones de contenido, objetivos, tiempos de trabajo o ámbito de actuación. La mayoría absoluta del PP en la Cámara Alta le da manos libres para actuar en este aspecto, pero es evidente, explican las fuentes, que sería en el Congreso donde mayor impacto tendría.
No en vano, tanto el exministro Ábalos como su sucesor en la Secretaría de Organización del PSOE, Santos Cerdán -que fue quien "colocó a su amigo Koldo como chófer del hombre fuerte de Sánchez"-, son diputados en la Cámara Baja. Además, tanto la atención mediática es mayor como mucho más conocidos serían los posibles integrantes de la comisión, para los interrogatorios.
Pero por eso mismo, es más difícil convencer a los grupos parlamentarios aliados del Gobierno a apoyar una iniciativa de la formación mayoritaria de la oposición.
Según fuentes parlamentarias de formaciones minoritarias de izquierdas, la posibilidad de que se adhirieran a una iniciativa de este calado propuesta por el PP dependería de una negociación previa, y de los objetivos "verdaderamente de depuración de responsabilidad política" que persiguiera el partido de Feijóo. Y no de desgaste "puro y duro" al Gobierno.