Alberto Núñez Feijóo, presidente del Partido Popular, este miércoles en la sede del PP Europeo en Bruselas.

Alberto Núñez Feijóo, presidente del Partido Popular, este miércoles en la sede del PP Europeo en Bruselas. Efe

Política PARTIDO POPULAR

El PP Europeo prevé sacar de Valencia la sede de su congreso y llevarla a Madrid tras negarse Armengol a cambiar el pleno

Fuentes del PPE insisten en que es más sencillo cambiar de ciudad, dentro de un mismo país, que de fechas, moviendo la agenda de 14 o 15 primeros ministros y la presidenta del Ejecutivo comunitario.

Más información: Armengol se niega a cambiar el Pleno en los días del congreso del PPE en Valencia: Feijóo y sus diputados no podrán votar.

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El Partido Popular Europeo (PPE) ya trabaja para cambiar la sede de su congreso de la última semana de abril, que estaba previsto que se celebrara en Valencia. La ciudad que se baraja para albergar el cónclave es, con toda probabilidad, Madrid. Así lo ha podido confirmar este diario en fuentes del PPE, tras la cumbre mantenida este jueves por sus líderes en Bruselas.

La razón de este cambio, según las citadas fuentes, es la negativa de la presidenta del Congreso de los Diputados a mover de fecha el pleno que se celebra esa semana. El PP lo solicitó, en la reunión de la Junta de Portavoces del 4 de febrero, tal como informó en exclusiva este periódico, pero Francina Armengol se negó.

Las fechas del evento de los populares europeos son ya inamovibles, martes 29 y miércoles 30 de abril.

De modo que el anfitrión, Alberto Núñez Feijóo, tendría que elegir entre cumplir con Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión, y los 14 primeros ministros a los que debe recibir (15, probablemente, si el alemán Friedrich Merz ya ha sido investido canciller) y "cumplir con sus obligaciones" como diputado y líder de la oposición.

Este mismo jueves, Feijóo ha participado en la reunión de líderes del PPE en Bruselas, previa al Consejo Europeo extraordinario convocado para decidir sobre la nueva Europa de la Defensa y el apoyo a Ucrania, tras las decisiones tomadas por los Estados Unidos de Donald Trump.

Antes de iniciarse la cumbre, el líder del PP se ha citado con Manfred Weber, presidente de los populares europeos, "y están analizando qué hacer".

Aunque la decisión aún no es definitiva, las fuentes insisten en que será más sencillo cambiar de ciudad, dentro de un mismo país, que de fechas, moviendo la agenda de 14 o 15 primeros ministros y la presidenta del Ejecutivo comunitario.

"Tenemos un problema muy grave", explican las citadas fuentes, "porque la noche del martes hay una cena para casi 2.000 personas y Feijóo no podría ir a eso y, a la vez, estar en Madrid a una hora razonable para ir a la sesión de control". 

Además, hay una clave aún más interesante. Esta semana, PSOE y Junts han presentado la proposición de ley para delegar las competencias de inmigración a Cataluña. Y los populares se temen que el PSOE "jugara con el calendario" para hacer coincidir la votación de su toma en consideración.

Esa votación será clave, porque Podemos ya ha anunciado que Pedro Sánchez no puede contar con sus votos "para una ley racista" y son numerosas las voces en Sumar que también rechazan la iniciativa. Y si la Junta de Portavoces, que controla el PSOE de la mano de Armengol la coloca ese día, "puede que la ausencia de diputados del PP que son compromisarios del congreso del PPE permita que la norma salga adelante".

La versión de Armengol

Por su parte, fuentes de la Presidencia del Congreso alegan que los portavoces tenían el calendario de plenos "desde el 16 de enero" para poder confirmar su acuerdo con el mismo. "Si ahí nos lo hubiera explicado el PP, a lo mejor les podríamos haber dado alguna solución". Según este portavoz de Armengol, el portavoz popular, Miguel Tellado, "no dijo nada hasta darse cuenta en la propia Junta de Portavoces que lo estaba tramitando el 4 de febrero".

En esto coinciden las dos versiones, la del PP y la del PSOE. Según el entorno de Armengol, en esa reunión de portavoces, el resto de grupos le dijo a Tellado "que no se apoyaba una petición de romper la regla no escrita que se ha respetado durante décadas de que los plenos sean las semanas siguientes a la primera de cada mes". Entre ellos, Vox.

De hecho, el calendario de plenos había salido aprobado por unanimidad en la Mesa, según esta versión, hasta que Tellado pidió, después, la palabra para proponer el cambio. "Lo intentaron cambiar en el último minuto, los portavoces se pronunciaron sin la presidenta presente aún, y por esa razón se mantiene el calendario, lógicamente". El asunto, luego, volvió a la Mesa, donde tampoco se cambió la decisión.

La ciudad de la dana

Lo cierto es que, desde la trágica riada del pasado 29 de octubre, causada por la dana que azotó al sureste de España y acabó con la vida de 227 personas en Valencia, el PPE empezó a sopesar la conveniencia de mantener la sede del congreso.

En un principio, los populares españoles insistieron en no cambiar nada. La idea era "homenajear a las víctimas", como hace todavía hoy la página web del congreso del PPE, y tratar de favorecer a la provincia con la inyección económica que para su economía sería alojar el evento y a más de 2.000 personas durante 48 horas.

Weber se comprometió a ello, del mismo modo que se implicó personalmente en la estrategia del partido de Feijóo para forzar a Teresa Ribera a dar explicaciones en el Congreso y el Senado por su responsabilidad en la tragedia, antes de apoyar su presencia en la nueva Comisión Europea. Pero el ambiente político alrededor de Carlos Mazón se ha enrarecido, aún más, desde entonces.

Feijóo ha sido preguntado en rueda de prensa este mismo jueves por ello, pero no ha hecho referencia alguna a un posible temor a que el congreso del PPE pudiese ser acosado por manifestaciones exigiendo la dimisión de Mazón

"Tenemos que tomar una decisión", ha dicho el líder popular, refiriéndose sólo al no de Armengol. "Estamos analizando el asunto y tomaremos una decisión de forma inmediata". 

De hecho, las fuentes citadas del PPE aclaran que el problema no es la dana, ni un eventual boicoteo de las izquierdas, sino "los medios de derechas", que "matarían" al PP de Feijóo si el PSOE cuela la cesión de la inmigración en esas fechas "y se le permite esa victoria a Sánchez por estar aplaudiendo en Valencia, mientras ellos sacan adelante sus leyes más conflictivas".