
JD Vance, en primer plano, y Marco Rubio detrás, durante una reunión en la Conferencia de Seguridad de Munich. Efe
Vance se reúne con la candidata de la ultraderecha alemana a ocho días de las elecciones tras zarandear a los líderes europeos
Critica que el resto de partidos germanos aíslen a AfD y respalda el mensaje antiinmigración de la formación de Weidel.
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El mensaje MAGA (Make America Great Again) resonó en Europa este viernes en boca de JD Vance. El vicepresidente de Donald Trump, aspirante a heredar el asiento presidencial dentro de cuatro años, llegó a la Conferencia de Seguridad de Munich a afearle a los líderes europeos una "libertad de expresión en retroceso" y a apoyar al ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD) a ocho días de que los germanos acudan a las urnas para elegir a su próximo canciller.
Su discurso durante la conferencia estuvo plagado de ataques a otros líderes europeos y mensajes coincidentes con los de la campaña de la extrema derecha alemana. "Ningún votante en este continente fue a la urna para abrir las compuertas a millones de inmigrantes no registrados", indicó.
Vance afirmó que "en toda Europa la libertad de expresión está en retroceso", en alusión a la prohibición de determinados mensajes de la extrema derecha que se consideran delitos de odio, y agregó: "La amenaza que más me preocupa para Europa es la amenaza interior que representa la retirada de Europa de los valores que comparte con nosotros".
"Durante años, nos han dicho que todo lo que financiamos y apoyamos es en nombre de nuestros valores democráticos compartidos; todo, desde nuestra política sobre Ucrania hasta la censura digital, se presenta como una defensa de la democracia", subrayó Vance. "Pero cuando vemos que los tribunales europeos cancelan elecciones y que altos funcionarios amenazan con cancelar otras, deberíamos preguntarnos si nos estamos exigiendo un estándar adecuadamente alto", añadió.
El 'número 2' estadounidense resumió toda su postura al respecto apuntando que "la democracia se basa en el principio sagrado de que la voz del pueblo importa. No hay lugar para los cortafuegos". Vance empleó esta última palabra en alusión a lo que en España se llama más comúnmente 'cordon sanitario', es decir, en este caso al aislamiento al que se somete a AfD en el panorama político alemán.
Los mensajes del vicepresidente de EEUU coinciden así con el programa de la ultraderecha europea y concretamente la alemana, que ha aplaudido varios extractos del discurso del mandatario en sus redes sociales.
Después de su conferencia y de reunirse con Volodimir Zelenski para hablar sobre la guerra de Ucrania, Vance se reunió en un hotel durante unos 30 minutos con Alice Weidel, la candidata a la cancillería y líder de Alternativa para Alemania. Poco ha trascendido de la reunión, más allá de que han compartido impresiones sobre el conflicto en suelo ucraniano, la política interna de Alemania y la libertad de expresión.
No es el primer miembro de la nueva cúpula estadounidense que simpatiza con la ultraderecha alemana. Ya Elon Musk ha reiterado sus simpatías hacia AfD, llegando a debatir en una emisión retransmitida en vivo en X con la propia Weidel. El hombre más rico del mundo defendió además, durante un acto de campaña de AfD a finales de enero, que era un partido que defendía "los valores alemanes" y evita que se pierdan "en una especie de multiculturalismo que lo diluya todo".
Vance también se reunió, en calidad de vicepresidente, con la delegación germana en la Conferencia de Seguridad. Ahí estuvo acompañado por el secretario de Estado, Marco Rubio, para departir con la ministra de Exteriores alemana, Annalena Baerbock, y el presidente teutón, Frank-Walter Steinmeier.
El norteamericano también se encontró con el candidato a la cancillería por la CDU, Friedrich Merz, y con el jefe actual de la Cancillería y mano derecha de Olaf Scholz, Wolfgang Schmidt.
La reacción europea
Ni la Unión Europea ni Alemania se ha quedado de brazos cruzados ante los ataques más o menos velados de la Administración Trump.
El ministro de Defensa de Alemania, Boris Postorius, calificó de inaceptables las críticas de Vance a los poderes políticos alemanes y europeos: "Esta democracia acaba de ser puesta en tela de juicio por el vicepresidente estadounidense, no solo la democracia alemana sino la de Europa en su conjunto". "Si lo entiendo correctamente, compara la condición de Europa con lo que prevalece en algunos regímenes autoritarios... esto no es aceptable", agregó.
Previamente, un portavoz del Gobierno alemán subrayó: "No creo que sea correcto que los extranjeros, incluidos los de países extranjeros amigos, interfieran tan intensamente en una campaña electoral en medio de un período electoral".
Por su parte, la radio Deutschlandfunk ha adelantado un extracto de la entrevista que emitirá el domingo con el canciller Olaf Scholz, donde ha criticado las declaraciones de Vance como altamente inusuales. Además, ha apuntado que Alemania tiene un cortafuegos contra los partidos de extrema derecha por una buena razón, citando el pasado de Alemania bajo el nacionalsocialismo.