Noboa lleva a Ecuador al aislamiento en América Latina: nueve países rompen lazos diplomáticos

Nueve gobiernos en América Latina -Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Cuba, Honduras, Uruguay y Venezuela- condenaron la irrupción a la sede diplomática de México en Quito para detener al exvicepresidente ecuatoriano Jorge Glas.

En Ecuador, el movimiento Revolución Ciudadana (RC, correísmo), liderado por el expresidente Rafael Correa, solicitó la dimisión del presidente Daniel Noboa. "Ha demostrado claramente que no tiene la capacidad de gobernar" Ecuador y que ha provocado una crisis diplomática sin precedentes, por lo que "le exigimos que presente su renuncia al cargo", afirmó Luisa González, la máxima líder nacional de la RC en una rueda de prensa en Quito.

La presidenta pro tempore de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), la hondureña Xiomara Castro, convocó el sábado a la Troika del organismo regional. "Ante la evidente violación de la Convención Americana sobre Asilo y de la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas por parte del Gobierno de Ecuador, al tomar por la fuerza la Embajada de México en Quito, convoco con carácter de urgencia a la Troika de la Celac para este lunes 8 de abril", indicó la también presidenta de Honduras, en un mensaje en la red social X.

La Policía de Ecuador irrumpió el viernes en la sede de la embajada de México en Quito y detuvo a Glas, vicepresidente del país durante el mandato de Rafael Correa (2007-2017), el mismo día en que el Gobierno mexicano le concedió el asilo político. Glas, quien ingresó en la embajada en diciembre pasado y poco después pidió asilo, está procesado por presunta malversación de fondos en el denominado caso 'Reconstrucción' de la provincia de Manabí, tras el terremoto de 2016.

Glas, sobre quien pesaba una orden de detención y de ingreso en prisión preventiva, fue llevado en avión desde la Unidad de Flagrancia de Quito, hasta la prisión La Roca, que se encuentra en el complejo carcelario de la ciudad de Guayaquil, situada en la zona costera del país, y que está reservada para los delincuentes más peligrosos.

Fuerzas de seguridad realizan operativo de traslado del exvicepresidente de Ecuador Jorge Glas desde la Unidad de Flagrancia, en Quito. Reuters

Alianza de las izquierdas

El asalto en la Embajada mexicana ha llevado al Gobierno de Andrés Manuel López Obrador (AMLO) a romper relaciones diplomáticas con Ecuador como respuesta a "una violación flagrante al derecho internacional y a la soberanía".

El jefe de la Cancillería y Asuntos Políticos de la Embajada, Roberto Canseco, en declaraciones a periodistas denunció que los agentes ecuatorianos irrumpieron y agredieron al personal de guardia de la sede diplomática. "Esto es totalmente inaceptable, esto no puede ser, es la barbarie", señaló Canseco y aseguró que los agentes lo golpearon cuando los encaró para tratar de impedir que violaran el espacio de la Embajada de México en Quito.

Nicaragua ha sido el país vecino más contundente. Al igual que AMLO, Managua rompió sus relaciones diplomáticas con Quito. "Ante la insólita y repudiable acción realizada, nuestra contundente, enfática e irrevocable repulsa, que convertimos en nuestra decisión soberana de romper toda relación diplomática con el Gobierno ecuatoriano", informó el Ejecutivo que preside Daniel Ortega en una declaración.

Integrantes de un cuerpo élite de la Policía ecuatoriana irrumpen en la Embajada de México para detener al exvicepresidente Jorge Glas. EFE

El Gobierno de Perú también lanzó un comunicado en el que rechazó "toda transgresión a las normas de la Convención de Viena" y llamó al diálogo entre los gobiernos de Ecuador y México. El gobierno de Brasil calificó la medida ecuatoriana como una "clara violación" de las normas internacionales que prohíben tal ataque a una embajada extranjera, debiendo ser "objeto de un fuerte repudio".

El presidente colombiano, Gustavo Petro, por su parte, sostuvo en un post en X que América Latina "debe mantener vivos los preceptos del derecho internacional en medio de la barbarie que avanza en el mundo".

Desde España, el portavoz de Sumar en el Congreso, Íñigo Errejón, afirmó que el "asalto" a la embajada de México en Ecuador es una "violación inadmisible del derecho internacional" y reclamó que el Gobierno "debe dar una respuesta firme y contundente".

Para Errejón, la actuación del Gobierno ecuatoriano de Daniel Noboa sienta un "precedente peligrosísimo" y supone conculcar el derecho internacional.

Guerra interna

Luisa González, máxima líder nacional de la RC, defendió que Noboa "no está capacitado para dirigir este país" y "nos está poniendo en riesgo a todos los ciudadanos", especialmente a los migrantes ecuatorianos que se encuentran en territorio mexicano intentando pasar a Estados Unidos, y que requieren de la asistencia consular debida, añadió González.

"Ecuador no se merece" una situación como la actual, con un "problema diplomático" tan grande, añadió la presidenta de la RC tras insistir en su pedido a Noboa: "Presente su renuncia, el Ecuador no es su hacienda bananera".

La excandidata presidencial, que perdió en la segunda vuelta de las elecciones ante Noboa, mencionó la oleada de condenas internacionales al allanamiento de la policía ecuatoriana en la sede diplomática mexicana en Quito, así como las muestras de solidaridad de la comunidad internacional con México.

González dijo que también ha escuchado expresiones de solidaridad del exterior "con el pueblo ecuatoriano, que es víctima de un gobierno improvisado".

La asambleísta de RC Viviana Veloz anunció que su grupo parlamentario, el más numeroso en la Asamblea Nacional, solicitará que se inicie un trámite de juicio político de censura contra varios ministros del Gobierno de Noboa.