La líder de Alternativa para Alemania (AfD), Alice Weidel, este miércoles junto al primer ministro húngaro, Viktor Orbán, en Budapest.

La líder de Alternativa para Alemania (AfD), Alice Weidel, este miércoles junto al primer ministro húngaro, Viktor Orbán, en Budapest. Reuters

Europa

Orbán entra de lleno en las elecciones de Alemania: define a la ultraderechista Weidel y a la AfD como "el futuro" del país

El ultraderechista húngaro quiere influir en las elecciones del 23 de febrero en las que Alternativa para Alemania quedaría segunda, según los sondeos.  

Más información: Cómo Alice Weidel, la líder lesbiana de la AfD con dos hijos adoptados, ha logrado que la Alemania comunista vote a la ultraderecha

S. D.
Agencias
Publicada

El primer ministro húngaro, Viktor Orbán, ha afirmado este miércoles que la formación ultraderechista germana Alternativa para Alemania (AfD) y su candidata, Alice Weidel, son "el futuro de Alemania", mientras que la líder de este partido de ultraderecha elogió a Hungría como modelo a seguir en plena campaña para las elecciones del 23 de febrero.

"AfD es el futuro de Alemania", ha señalado el ultranacionalista Orbán ante la prensa tras su primer encuentro con Alice Weidel, candidata del partido alemán para las elecciones a la cancillería y a quien recibió en la sede gubernamental entre críticas no sólo de su partido, también del colectivo LGTBIQ+ al que ella pertenece. 

El primer ministro subrayó que decidió invitar a Weidel ya que AfD es uno de los partidos más importantes de Alemania y agregó que "después de las elecciones cambiará todo" ya que esa formación "escucha lo que quiere la gente" y así se convertirá en el futuro del país germánico.

AfD, segunda en las encuestas

Weidel, por su parte, dijo que fue un honor encontrarse con Orbán, a quien considera un "símbolo de sensatez y soberanía" y un ejemplo a seguir en muchos aspectos.

"Seguiremos el camino de Hungría, nuestro gran modelo a seguir", ha declarado Weidel, en caso de que AfD participe en el Gobierno después de las elecciones. Las encuestas otorgan a AfD el segundo puesto en intención de voto, sólo por detrás de la formación democristiana CDU.

La candidata, que rechazó ser de extrema derecha, afirmó que coincide con Orbán en que la Unión Europea debe reformarse "por dentro", para lo que se necesitan "naciones fuertes".

En este sentido Weidel, que realizó su visita a Budapest en plena campaña electoral, afirmó que quiere una Alemania "fuerte", lo que se conseguirá reduciendo la burocracia y los impuestos. "Quiero libertad, un país soberano y libertario que mantiene buenas relaciones con el Este y Occidente", recalcó la política.

Ambos políticos coincidieron al criticar la burocracia comunitaria, las políticas migratorias de la UE, así como el Pacto Verde que ambos interpretaron como un obstáculo ante el funcionamiento de la economía.

En relación con el tema de la inmigración, Weiden reiteró que el sistema de libre circulación de Schengen ya "no funciona como antes" y por ello "debería haberse suspendido hace mucho tiempo".

Inmigración 

Weidel agregó que si su partido gana las elecciones Alemania saldría del sistema migratorio europeo.

En lo que se refiere a los aranceles que el presidente estadounidense Donald Trump planea aplicar a la UE, principalmente en el sector del motor, tanto Orbán como Weiden afirmaron que Europa necesitaría una "fuerte dirección", algo de que actualmente carece, capaz de defender sus intereses.

La prensa local, como el portal independiente Hvg, aseguraron que con esta visita Orbán rompe el aislamiento de AfD a un nivel internacional.

La Federación Lesbiana Labrisz envió antes del encuentro una carta a Weidel en la que recuerdan a la política, que está casada con una mujer, que el Gobierno de Orbán limita los derechos de la comunidad LGTBIQ+ en el país centroeuropeo.

"Orbán y sus camaradas homófobas seguramente le perdonarán que usted sea lesbiana", asegura la carta, que recuerda que en Hungría "las lesbianas no pueden adoptar", en clara alusión a que Weidel y su pareja han adoptado dos menores.

Antes de la rueda de prensa, el político opositor independiente Ákos Hadházy protestó contra la visita delante de la sede de Orbán con carteles asegurando que "los populistas son fascistas en las democracias" y expresando su "vergüenza" por la aceptación de Weidel en Budapest por parte del primer ministro.