El bocadillo de pulpo de A Pobra do Caramiñal que conquista las redes sociales
El Bar Nuevo abrió sus puertas por primera vez en 1965 y desde entonces se ha convertido en un lugar de peregrinación para los amantes del pulpo
3 julio, 2022 06:00Cada pueblo tiene su propio sello de identidad gastronómico. En Noia es el berberecho, en Santiago de Compostela la tarta de Santiago, y en la villa marinera de A Pobra do Caramiñal es el bocadillo de pulpo del Bar Nuevo.
Es difícil explicar a cualquier persona que no sea del municipio por qué esta comida es tan popular, cuando no es ni el primer ni el último establecimiento en tener la idea de meter el pulpo á feira entre dos panes. Para entenderlo tenemos que irnos a 1965, cuando abrió por primera vez el bar.
Comida de bateeiros y juerguistas
"Siempre fue un negocio familiar, al principio eran mi padre en la barra y mi madre en la cocina", explica José Miñones el actual dueño del negocio. El bocadillo de pulpo por entonces, recuerda, lo pedían sobre todo los bateeiros antes de salir al mar. "Es un bocadillo que te aguantaba muy bien, tenía mucho aceite, era contundente. Lo necesitabas cuando cogías el barco porque a la hora de recogerlo podías comerlo perfectamente".
Y es que el Bar Nuevo sigue donde siempre, en la carretera principal que atreviesa A Pobra, en el centro del pueblo, a apenas unos minutos andando del puerto. Tampoco la receta del bocadillo ha cambiado mucho, según explica el dueño. "La forma de trabajar el pulpo es la misma de siempre. Sí que intentamos comprar el producto de por aquí cuando hay, y ese requiere más cariño a la hora de la cocción, pero es lo que lo hace impresionante".
Sin embargo, los bateeiros no eran el único público que recibía con agrado el plato estrella del local. Si ahora vas de fiesta y a las seis de la mañana lo que te pide el cuerpo es un kebab que absorba el alcohol de la noche, en los años 70 y 80, el mayor preventor de resacas era el bocadillo de pulpo. "Mis padres abrían a las seis de la mañana precisamente para eso. Cuando la panadería de aquí al lado aún existía, los chavales volvían de beber toda la noche, cogían el pan y lo traían para meter el pulpo", recuerda Miñones.
El bocadillo quedó como un producto puramente local, algo que llevabas cuando subías a las piscinas del Río Pedras o para comer cuando empezaban las orquestas en la plaza. Después del traspaso de padre a hijo fue cuando realmente comenzó a conocerse fuera del pueblo.
Un bocadillo que traspasa fronteras
José Miñones no empezó a trabajar formalmente en el bar hasta 1995 y, como es habitual con los cambios de mando, fue modelando el local a su gusto, eso sí manteniendo la ética familiar. En la carta empezó a hacer algunos cambios, para los de siempre. Entró ahí la idea de ponerle queso al bocadillo de pulpo, que fue un éxito. "Me lo acabaron pidiendo todo el tiempo, pero yo no quería hacerlo. Acabé colgando un cartel: Bocadillo de pulpo con queso sólo los martes", comenta riéndose. Los martes son el único día que cierran para descansar.
El cliente acabó ganando y el bocadillo de pulpo con queso de San Simón de Costa, y después con un añadido de cebolla caramelizada, entró en menú. Por entonces los amigos ya habían comenzado a sonar la voz entre los turistas e incluso subiendo algún que otro vídeo a redes sociales. "De repente venía gente de fuera, de Pontevedra o de por ahí, pidiendo el bocadillo de pulpo y yo decía ‘¿pero qué está pasando aquí?'".
Bocadillo de pulpo con queso de Arzua…
— Keko Iglesias (@KekoIglesias) June 11, 2020
Me acaban de pasar esta foto y ya tengo localizado el sitio donde los preparan… pic.twitter.com/7A5BjILHPy
Hoy en día el éxito de este producto continúa. Más de 162 opiniones en Trip Advisor con una fuerte mayoría calificandolo de excelente. El Bar Nuevo ha sido reconocido e incluso incluido en guías de viaje como la de los Soletes de la Guía Repsol. Pero el día el día de la familia del Bar Nuevo sigue siendo el de siempre: trabajo, cariño y mucho pulpo.