La borrasca Laurence golpea Castilla y León: lluvias intensas, deshielos y fuertes vientos

La presencia de la borrasca Laurence y tres más posteriormente se desarrollarán de forma sucesiva en el oeste peninsular, generando situaciones meteorológicas adversas en Castilla y León. Una situación que podría prolongarse durante toda la semana, según alerta la Consejería de Medioambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio de la Junta de Castilla y León.

Estos sistemas impulsarán una masa de aire templado y húmedo proveniente del sur, lo que hará que las temperaturas aumenten y que la cota de nieve se eleve, en ocasiones superando los 2.000 metros. Esta situación favorecerá el deshielo de la nieve caída en días anteriores, generando además precipitaciones generalizadas.

En las zonas de montaña, estas lluvias serán más frecuentes, mientras que en el Sistema Central se espera que, durante el paso de los frentes, se acumulen más de 40 litros por metro cuadrado en tan solo 12 horas. Es probable que durante el fin de semana se produzca un descenso de la cota de nieve, lo que podría permitir que la nieve se acumule nuevamente en determinadas áreas montañosas.

El viento, que soplará con componente sur, presentará intervalos de intensidad fuerte y rachas localmente muy intensas, alcanzando a partir del miércoles velocidades superiores a 80 km/h en zonas expuestas y de montaña. Este episodio, caracterizado por la combinación de precipitaciones generalizadas, fuertes vientos y deshielos, puede provocar un aumento del caudal de los ríos. Por ello, la alerta meteorológica se mantendrá activada hasta que desaparezcan estas condiciones adversas.

Ante este panorama, la Agencia de Protección Civil y Emergencias desaconseja la práctica de actividades al aire libre, ya que el riesgo de sufrir accidentes o de quedar aislado o desorientado en zonas de difícil acceso podría complicar aún más las labores de rescate.

En el caso de los desplazamientos por carretera, se recomienda a los conductores permanecer atentos a la formación de balsas de agua en la calzada, evitar cruzar arroyos o cauces que puedan ver un incremento repentino en su nivel y abstenerse de circular por pasos subterráneos cuando comience a acumularse agua.

Asimismo, durante episodios de rachas fuertes es aconsejable sujetar con firmeza el volante, especialmente al adelantar vehículos pesados o al entrar y salir de túneles, y consultar las predicciones meteorológicas y el estado de las carreteras antes de iniciar cualquier desplazamiento.

Fuera de la carretera, ante la presencia de fuertes rachas de viento, es recomendable asegurar o retirar de balcones y ventanas aquellos objetos susceptibles de caer a la vía pública, como macetas, toldos, sillas o mesas, y evitar transitar cerca de edificios en ruinas, andamios o vallas publicitarias.

Además, en caso de tener que informar sobre una emergencia, es necesario especificar con claridad el lugar exacto donde se encuentra la persona que precisa ayuda, las características del terreno, las dificultades de acceso, las condiciones meteorológicas existentes en el lugar y el estado del accidentado.