Oliveira, tras romper Vox el pacto de Gobierno: “Era algo que veía venir, tenían poca visibilidad”

“Tranquilidad”. Ese es el mensaje que el alcalde de Tordesillas, Miguel Ángel Oliveira, quiere mandar a los vecinos del municipio vallisoletano después de conocerse que su socio de gobierno hasta hoy, Vox, ha decidido romper el pacto que mantenían desde las elecciones de 2019 por “incumpliendo de los acuerdos” de gobierno y el “veto al que la formación se ha visto expuesto”. Aunque ahora tendrá que gobernar en minoría con sus seis concejales, aventura que no “supondrá ningún contratiempo”.

El edil ha respondido a la llamada de EL ESPAÑOL Noticias de Castilla y León: “Me imagino que es un tema de estrategia política porque aquí el peso político lo llevamos nosotros. Tenían poca imagen y visibilidad. No estamos preocupados porque el proyecto del PP es el que está permitiendo que Tordesillas se esté trasformando y esto demuestra que el tren del progreso no lo llevaban ellos, se han bajado sin aportar nada”.

En virtud del pacto alcanzado con el PP, VOX entraba hace tres años en el Gobierno Municipal con dos concejales, José Luis Rojo García, con el cargo de teniente de alcalde y María Zulema San José Sánchez, quien ocuparía la concejalía de Asuntos Sociales. A partir de hoy dejan de serlo.

"Busqué la protección máxima"

Oliveira ha adelantado que “algo se veía venir” en los últimos meses y por eso todas las competencias municipales se hicieran a través de alcaldía a excepción de los presupuestos. “Por eso di instrucciones para que todas las decisiones se tomaran desde alcaldía o en su defecto desde el equipo de Gobierno, solo se pasan a Pleno las inclusivas”. “Busqué la protección máxima en caso de que pasara, y yo sabía que tarde o temprano iba a pasar”.

El alcalde asegura que no ha habido “ningún problema” pero entiende que la presión del partido les haya podido al tener poco protagonismo, ahora les invita a seguir trabajando desde la oposición “donde tendrán todo su apoyo y respeto”.

Es cierto que el principal trámite que queda es aprobar el presupuesto de cara a 2023 que se hará en diciembre. “Si no hay consenso intentaré buscar otro tipo de apoyo, pero la estabilidad está asegurada porque se pueden prolongar las cuentas. Somos un partido que sabemos gobernar, no tengo ningún miedo, la estabilidad está asegurada porque hay un equipo estable”, ha zanjado.