Pedrajas de San Esteban, primera del abono
Brilló el jerezano Miguel Andrade con la dura y correosa novillada de Prieto de la Cal
26 agosto, 2024 09:23Primera novillada del Piñón de Oro en Pedrajas. Menos de media entrada en tarde de temperatura agradable. Al finalizar el paseíllo sonó el Himno Nacional
Los novilleros Jesús de la Calzada y Miguel Andrades dieron lidia y muerte al encierro que pasta en la finca onubense La Ruiza con hombría y dignidad. Actuó de sobresaliente Javier Montalvo. Se lidiaron cuatro novillos jaboneros muy bien presentados, serios, muy serios, hondos, con cara y de imponente presencia. Correosos, broncos y desclasados a excepción del corrido en último lugar.
Jesús de la Calzada
Abrió la tarde un novillo de imponente presencia, Aguardentero de nombre, un novillo serio, cuajado, bronco y brutote en sus embestidas que en ningún momento le permitió estar a gusto a De la Calzada. El novillo más complicado y con más peligro de la tarde. Lo recibió con el capote muy firme el de San Martín del Castañar.
Acudió con alegría al caballo que montaba Juan Antonio Agudo, Titi, quien le recetó dos puyazos en su sitio. Brindó De La Calzada al público, más por agradar que por la confianza en el de “veragua”.
Con la muleta se puso desde el principio muy de verdad citándole en los medios de lejos recibiendo dos tarascadas al vencerse por el pitón derecho dejándole mermado físicamente el resto de la tarde.
Siguió en la cara del novillo con la misma verdad no importándole la mala condición del novillo recibiendo una fuerte voltereta. No merecía el de Prieto de la Cal tanta entrega del novillero. A las malas ideas del novillo se sumaba la falta de fuerza por lo que el trasteo era más de medio muletazo que de presentársela adelante y tirar de él. Mató de estocada delantera. Pitos en el arrastre para el novillo e incomprensible silencio para el torero.
Al segundo de su lote, Castañero de nombre, lo recibió con el capote sacándoselo a los medios por verónicas rematadas con una media. Recibió un puyazo largo en el caballo. En la faena de muleta el jabonero tampoco acabó de entregarse, muy agarrado al suelo con buen embroque pero sin la fuerza suficiente para seguir el trazo de la muleta. Lo intentó el salmantino por ambos pitones poniéndose muy de verdad y acortando los terrenos en el tramo final del trasteo. Se atascó con los aceros recibiendo una ovación.
Miguel Andrades
El primero de su lote, Lucero de nombre, fue un novillo complicado y bronco, muy en la línea del resto, de capa jabonero, más chico que el anterior pero con trapío. Lo recibió Andrades con el capote rodilla en tierra con cierto gusto y desparpajo. Destacó en la lidia Juan Carlos Rey no permitiéndole que le llegara a tocar el capote lo que hizo que el novillo corrigiera la embestida tan informal que había mostrado de salida.
Cuajó un buen tercio de banderillas el novillero jerezano levantando al público de sus asientos. Brindó al empresario Enrique Luján.
Con la franela anduvo aseado por ambos pitones sacando series de cuatro y cinco muletazos rematados con un pase de pecho. Por el pitón izquierdo le costaba más al novillo pues no acababa de pasar por lo que basó su faena en el otro pitón. Mató de estocada casi entera y perpendicular y golpe de verduguillo. Oreja.
En el segundo de su lote, Rompedor, jabonero también, estuvo a punto de hacer honor a su nombre con el torero de Jerez de la Frontera al cogerle de forma dramática por el pecho al entrar a matar quedando suspendido en el pitón derecho, trayéndonos a la memoria la cornada que le pegó aquel toro de Palha a Israel Lancho en Las Ventas.
Antes lo recibió Andradres con dos largas cambiadas de rodillas, y ya de pie, por verónicas rematadas con una media. Brilló de nuevo el jerezano en el tercio de banderillas demostrando ser conocedor de los terrenos y de las querencias.
Ya con la muleta, con el novillo más manejable del encierro, le corrió la mano el de Jerez tirando del animal hasta llevárselo atrás, metiendo el novillo la cara a la hora del embroque con fijeza desplazándose más por el pitón derecho que por el izquierdo. Sufrió en el trasteo una voltereta que precedió a la fea cogida al entrar a matar. Dobló el novillo tras recibir una estocada. Incomprensiblemente se le premió con una sola oreja. Feo gesto el que tuvo el matador al tirar la oreja al suelo. Salió a hombros y pasó a la enfermería.
En resumen, tarde dura y difícil para los novilleros con un encierro muy duro, bronco y esaborío de Prieto de la Cal.
Les ofrecemos una amplia galería de fotos del gráfico medinense Fermín Rodríguez.