
Una copa de vino en Oporto
El ‘orange wine’ alentejano y otros vinos portugueses que merece la pena descubrir
No todo Portugal es oporto; nuestro país vecino cuenta con verdaderas joyas enológicas de norte a sur de su geografía. Las descubrimos.
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Portugal, con su rica tradición vinícola, ofrece una amplia gama de vinos que reflejan la diversidad de sus regiones y variedades de uva. Existen 14 regiones vinícolas importantes en el país vecino, cada una con sus propias características, sin embargo, algunas de ellas todavía son casi desconocidas fuera de sus fronteras.
Entre las zonas más destacadas se encuentra el Douro, cuna del famoso vino de Oporto, buque insignia de la región. Embajador de los vinos portugueses, el porto nace en tierras pobres y empinadas laderas bañadas por el río Duero. Pero además de esta categoría de vinos generosos, la región es cada vez más reconocida por sus excelentes vinos tintos y blancos.
La región del Dão, en el corazón del país, es conocida por sus tintos elegantes y complejos, elaborados principalmente con la variedad touriga nacional. Mientras que en el Alentejo encontramos una joya enológica única: los vinos de talha, elaborados en grandes tinajas de barro. Esta tradición milenaria, que se remonta a la época romana, representa un método de vinificación que ha perdurado a través de los siglos. Son, por así decirlos, los “orange wines” portugueses. Vinos que enriquecen el patrimonio vitivinícola portugués, y ofrecen a los amantes del vino una experiencia única que combina la sabiduría ancestral con el paladar contemporáneo.

Región de Douro
En la húmeda región denominada como Vinho Verde predominan la exuberante vegetación, de ahí su nombre. En este entorno, se produce un vino típicamente ácido, ligero y moderadamente alcohólico conocido como “vino verde”. Por su parte, Trás-os-Montes destaca por sus tintos afrutados y ligeramente astringentes, y sus blancos suaves y de aroma floral, elaborados a partir de trincadeira, bastardo, marufo, síria, entre otras variedades.
Y del interior de Portugal, a sus archipiélagos. Marcados por su terruño volcánico y clima atlántico, los vinos de Azores y Madeira son joyas únicas del mundo vinícola. En Azores, las vides crecen protegidas por muros de basalto, produciendo vinos salinos y yodados con variedades como arinto, verdelho y terrantez. Estos vinos, antes olvidados, ahora son altamente cotizados por su carácter distintivo. En Madeira, por su parte, los vinos fortificados son legendarios por su longevidad y complejidad. Se clasifican según su dulzor, ofreciendo una gama de aromas que incluyen frutos secos, vainilla y miel. Ambas regiones producen vinos de gran frescura y acidez, reflejando la singularidad de sus islas volcánicas y métodos de producción tradicionales.
Los vinos portugueses son un reflejo de la rica tradición y diversidad vitivinícola del país. Desde Oporto hasta Dão, pasando por Alentejo o Trás-os-Montes y cruzando el mar hasta el “Hawái europeo”, cada región ofrece una experiencia única. Un abanico vinícola fascinante por el que merece la pena dejarse seducir.
Quinta da Pigarça Canena Talha Tinto (Alentejo)

Elaborado en grandes tinajas de barro siguiendo una técnica milenaria de fermentación natural que captura la esencia del terruño y preserva la tradición vinícola artesana, Canena Talha Tinto, de Quinta da Pigarça, es un vino único que representa la esencia de los vinos de talha en toda su plenitud. Silvestre, especiado y ligero, armónico y equilibrado, con los sutiles matices de la tinaja y el estilo inconfundible de los “orange wines” actuales. Un legado romano que se encuentra más vivo que nunca. Precio: 24,95 euros
Quinta de S. Salvador da Torre Loureiro (Vinho Verde)

La Quinta de S. Salvador da Torre está situada en la margen derecha del río Lima, a 10 km del océano Atlántico. Esta ubicación privilegiada y los suelos estratificados de granito y esquisto configuran la personalidad de sus vinos. Este blanco se elabora a partir de la variedad de uva loureiro que, en el ecosistema de este valle, encuentra las condiciones perfectas para expresarse en su forma más elegante. Al final de la fermentación, el vino envejece en depósitos de acero inoxidable durante 6 meses. En boca tiene una textura consistente, con notas salinas y buena acidez, que le confieren una frescura vibrante. Precio: 9,50 euros
Quinta de Ventozelo Porto Colheita Tawny 2014 (Oporto)

Quinta de Ventozelo Porto Colheita 2014 es un vino excepcional que celebra una década de excelencia vinícola. Este Oporto Tawny cautiva con su profundo color teja y su bouquet complejo, donde se entrelazan aromas de pasas, higos secos y dátiles, realzados por sutiles notas de menta y eucalipto. En boca, impresiona por su estructura bien definida y su frescura sorprendente, culminando en un final aterciopelado y persistente que deja una huella indeleble en el paladar. Un vino que encarna la tradición y la maestría de la región del Duero, perfecto para los amantes de los Oportos de calidad. Precio: 29,95 euros
Verdelho 10 años de Blandy’s (Madeira)

Para disfrutar de un vino tradicional de Madeira, hay varias opciones destacadas que reflejan la rica herencia vinícola de esta isla portuguesa. Desde opciones secas como el Sercial hasta el dulce Malvasía, encontramos dos tipos intermedios, Verdelho y Bual (Boal). Un poco más dulce que el Sercial, el Verdelho es un clásico de Madeira. Su perfil equilibrado lo hace perfecto para acompañar comidas, y es apreciado por su sabor delicado y color dorado. Equilibrado y poderoso, Verdelho 10 años de Blandy’s representa bien el estilo clásico de esta exótica isla portuguesa. Precio: 43 euros
Açores Wine Company Erupçao Volcánica (Azores)

El impredecible António Maçanita elabora este particular vino tinto a partir de una mezcla de uvas portuguesas plantadas frente al mar en la Isla de Pico, Azores. Malvarisco, bastardo, rufete, saborinho, aragonés, agronómica, castelao y touriga nacional, entre otras variedades autóctonas, que crecen sobre roca volcánica tan cerca del océano que es necesario levantar muros de piedra (o currais) para proteger las plantas de la brisa marina. Un viñedo digno de ver y un vino fresco, frutal y ahumado, absolutamente imprescindible, al más puro estilo del elaborador más rebelde de Portugal. Pura maresía en la copa. Precio: 30 euros
Niepoort Quinta da Lomba Rótulo Tinto (Dão)

La touriga nacional es la uva portuguesa por excelencia, comparable a la tempranillo en España y la nebbiolo en Italia. Es una variedad tinta que, aunque también se utiliza para elaborar vinos de Oporto, es originaria de la región de Dão. Quinta da Lomba Rótulo Tinto, de Niepoort, muestra la vivacidad y acidez en boca típica de esta variedad, mezclada con jaen y alfrocheiro. Los sabores de frutas frescas y especias quedan envueltos por un refrescante perfil mineral, y su volumen da paso a un final perfumado, largo y muy equilibrado. Precio: 8,94 euros
Dalva Metamorphose Blanco (Douro)

Metamorfose, o metamorfosis, significa cambio, transformación en el proceso de elaboración, un fenómeno que requiere tiempo y paciencia. Lo vemos en las mariposas, en los humanos y también en el vino. Dalva Metamorfose es un ejemplo práctico de ello. Un blanco elaborado con variedades tradicionales de Douro, procedentes de un viñedo centenario situado en Sabrosa, y una crianza de ocho meses en barricas usadas de roble húngaro de 300 litros que le proporciona intensidad y largura. Precio: 35 euros