El periplo de Gustavo Ayón (Zapotán, Nayarit, México, 1985) en el Real Madrid no ha sido uno lleno de rosas precisamente. Dicen que los comienzos nunca son fáciles, y él lo cumplió en sus primeros meses vestido de blanco. También que nos asola una duda permanente, y Ayón volvió a cumplir la premisa el pasado verano. Pudo haber abandonado la capital española entonces, pero no lo hizo. Su semblante alegre cuando recibe a EL ESPAÑOL en Valdebebas desvela el porqué: es feliz como madridista. Consigo mismo y con sus compañeros.
Esa estabilidad, tanto en su familia de las canchas como en la de fuera, es la que mueve al pívot mexicano ante los desafíos mayúsculos. En este caso, superar al Fenerbahçe turco, anfitrión y 'coco' absoluto de la Final Four de Estambul, en la segunda semifinal de la Euroliga (este viernes a las 20:30, con el CSKA de Moscú-Olympiacos a las 17:30; ambos por #0 en Movistar+). Ayón, una vez más, quiere ser protagonista. Ansía ser 'Titán'. Como en 2015. Para optar a levantar la Décima del baloncesto merengue.
Afrontan una Final Four idéntica a la última que disputaron. ¿Qué ha cambiado en el Real Madrid en estos dos años?
Creo que no ha cambiado nada. El equipo sigue con la misma mentalidad de ir paso a paso, cumpliendo los objetivos que se han planteado. Ahora tenemos una Final Four similar a la que tuvimos aquí en Madrid, con la diferencia de que se juega en Estambul, y yo creo que es lo único distinto. El Fenerbahçe, el CSKA y el Olympiacos son grandísimos equipos, que también estuvieron aquí. Sinceramente, creo que va a ser una Final Four muy bonita y con mucho nivel de baloncesto.
¿Y cómo ha cambiado usted?
Yo he mejorado un poco físicamente, me encuentro mejor. En otros aspectos, ya estoy adaptado al 100% al equipo, a mis compañeros y al entrenador. Hay bastante diferencia entre lo que yo era ese año y lo que soy ahora. Tengo mucha más responsabilidad dentro del equipo, y la verdad es que eso me gusta.
¿Diría que a partir de esa Final Four en la que ganaron la Euroliga usted empezó a sentirse importante en el club?
No, desde el día que llegué me transmitieron esa sensación de sentirme importante. Siempre lo han hecho de la misma manera. El sentirme importante o no depende de mí, mi trabajo, lo que trate de darle al equipo. A fin de cuentas, esas sensaciones que pueda tener te las hacen sentir desde el día que llegas. Está en ti si lo quieres asumir o no.
Imagino que habrá ganas de revancha contra el Fenerbahçe por la eliminación del año pasado.
También ellos las tendrán por la semifinal que les ganamos en Madrid. Lejos de pensar en ese tipo de circunstancias puntuales, hay que pensar que va a ser un partido muy duro, difícil, tanto para ellos como para nosotros. Es a un partido. El equipo que esté más centrado y cometa menos errores, el que haga mejor el trabajo, es el que va a ganar. Porque calidad tenemos nosotros y ellos. Hay que pensar sólo en hacer las cosas bien.
Tengo mucha más responsabilidad que en 2015, y eso me gusta
Parece que todo el mundo les da el favoritismo a los de Obradovic por ser los anfitriones y llegar como lo han hecho a la fase final. ¿Cree que eso juega a favor del Madrid?
[Resopla] Realmente, yo no he pensado en quién es favorito o no lo es. Yo, personalmente, tengo que pensar en el partido, no en quién es favorito o tiene más posibilidades de ganar. El deporte es así. En estos momentos, hay que tener la mente tranquila y centrada en el trabajo. Eso es lo importante: dejar de especular, de pensar en ese tipo de situaciones, que realmente no te llevan a nada.
Después de esas dos victorias consecutivas en Estambul contra el Darussafaka, ¿el infierno turco les asusta menos?
[Risas] Es que no es que te asuste un infierno turco o un pabellón lleno. Lo más importante es que va a haber un ambiente muy bonito. Es una Final Four. ¿A quién no le gusta jugar este tipo de partidos? Estos son los partidos que realmente me gustan a mí como jugador. Todo lo que pasa fuera de la pista es lo que menos te debe importar. Los turcos son así, tienen esa intensidad y pasión por el baloncesto. Igual que lo vivimos en la Final Four de Madrid. Parecía que ellos eran locales.
¿También hay que olvidarse del arbitraje?
No creo que el arbitraje vaya a influir en absolutamente nada. Los árbitros tienen que hacer bien su trabajo. Es una Final Four, todo el mundo la está viendo, es un partido que se quiere que sea un espectáculo para darle una mayor fluidez al baloncesto. Eso es lo que tiene que importar. No creo que ellos (los árbitros) tengan ningún interés en que gane uno u otro.
¿Hay alguna cualidad o algún jugador de este Fenerbahçe que le gustaría traerse al Madrid?
Son grandes jugadores, pero no cambiaría a ninguno de mis compañeros por ninguno de ellos. Los compañeros que tengo son los que me gustaría tener en cualquier equipo. Confío plenamente en cada uno de ellos.
Los dos partidos que han jugado este año contra el equipo turco se han resuelto a última hora. ¿Uno de los pequeños detalles que pueden marcar la diferencia para el Madrid es haber ganado poderío físico por dentro?
También tenemos grandes jugadores fuera de la zona y creo que hay que pensar en el equipo, no en lo que nos da alguna ventaja o desventaja. Ellos también tienen dos grandes jugadores dentro de la zona (Udoh y Vesely) y hay que pensar en que todos hagamos bien el trabajo. Solamente así vamos a poder aspirar a ganar.
Según usted, el Real Madrid será campeón de Europa si…
Hay que ganar. Primero la semifinal y luego la final. Sólo así puedes ser campeón.
No cambiaría a ninguno de mis compañeros por nadie del Fenerbahçe. Confío plenamente en cada uno de ellos
Algunos dicen que en este equipo hay Llulldependencia. ¿Está de acuerdo o no?
Tenemos un grandísimo jugador como lo es Sergi. A lo mejor la tendencia es depender de él siempre que hace grandes partidos. Por supuesto, él es un excelente jugador, pero hay grandes jugadores que le arropan y que en los momentos difíciles también salen a dar la cara, como lo hace él.
Uno de ellos es Luka Doncic, al que quizá se le está exigiendo demasiado. Por mucho que ya sea una realidad. ¡Usted empezó a jugar a su edad!
Lo que hace Luka no es normal. Lleva de muy buena manera las circunstancias en las que se encuentra. Es un jugador que está respondiendo muy bien en el equipo. Él puede dar eso y lo está haciendo por la facilidad que tiene para hacerlo. Pero le vuelvo a decir: aquí no tenemos que pensar en un solo jugador. Si queremos ganar, tenemos que pensar en el equipo. La gente que dice que dependemos de un jugador o de otro… Realmente dependemos de cada uno de nuestros compañeros.
¿El carácter de Andrés Nocioni va a ser insustituible?
[Risas] El Chapu es un grandísimo jugador y una persona que le pone mucho carácter al juego. Es de esos jugadores insustituibles. Se van ellos y no hay otro que pueda dar lo que ese jugador. Se puede sustituir la posición, pero no a un jugador como tal.
Llull es excelente, pero hay grandes jugadores que le arropan y que en los momentos difíciles también salen a dar la cara
Este año le estamos viendo pasar más ratos con su familia. ¿Esa estabilidad es fundamental para usted?
Sí, para mí es muy importante estar bien emocionalmente con la familia, mi pareja, mi hijo… Viene bien para tener la mente fresca en momentos apurados y apretados, como los que tuvimos en el playoff contra el Darussafaka.
De hecho, he visto que ahora tiene un rancho. ¿Vuelta a los orígenes, no?
Es un rancho de mi padre. Estamos trabajando ahora con eso. Más que nada, cumpliendo sueños de niño.
Ya que habla de cumplir sus aspiraciones, ¿se le pasa por la cabeza otra cosa que no sea agotar los dos años de contrato que le quedan en Madrid?
No, tengo en la cabeza finalizar mi contrato con el Madrid. Ni irme ni buscar otro sitio.
Como aspirante a político y como mexicano, imagino que no le hará mucha gracia que Donald Trump sea presidente de Estados Unidos.
Esas circunstancias de político ya las veremos más adelante. Ahora soy jugador de baloncesto y eso está estacionado. Es más un tema de transmitir todo lo que he vivido en mi carrera a todos esos jóvenes que quieren hacer cosas importantes o tener el deporte como un estilo de vida.
Quiere dirigir el deporte de su país. En el caso de que lo logre, ¿podría convertirlo en una potencia mundial?
Eso tiene mucho trabajo. Dependerá de muchas personas y de unas circunstancias en las que logres un buen equipo de trabajo. No porque seas Pedro Jiménez vas a llegar y lograr que las situaciones cambien. Tienes que trabajar, lleva su proceso y, sobre todo, que se quede una manera de trabajar dentro de un país que tiene un potencial muy grande.
Tengo en la cabeza finalizar mi contrato con el Madrid. Ni irme ni buscar otro sitio
¿Cómo va su proceso para nacionalizarse español?
No lo sé. Eso yo no lo he visto ni tocado. No sé quién va a poder hacer eso. Personalmente, aquí me han fichado como extracomunitario. Y así terminaré mi contrato hasta el día de hoy. Ya veremos más adelante qué puede pasar.
¿Le gustaría obtener esa doble nacionalidad?
Ahora mismo, no lo he pensado. Ya llegará el momento en el que pueda pensar en eso o, si se da la oportunidad, realizarlo.
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