Garbiñe Muguruza busca un giro radical a su carrera: Conchita Martínez deja de ser su entrenadora

Cambio de rumbo brusco en la vida deportiva de Garbiñe Muguruza. La tenista española llegó a un acuerdo con Conchita Martínez para que esta deje de ser su entrenadora, tal y como confirmó la preparadora en un comunicado emitido a través de sus redes sociales. Se trata de una decisión tomada de forma conjunta, y con ella Muguruza confía en poder cambiar la mala dinámica en la que está metida desde hace tiempo.

"Garbiñe y yo hemos decidido de mutuo acuerdo terminar nuestra relación laboral", comenzó escribiendo Conchita Martínez, la ya exentrenadora de Muguruza. Conchita se unió a la hispanovenezolana a finales del año 2019 y, desde entonces, la carrera tenística de la campeona de Wimbledon ha experimentado constantes altibajos. Bajo su preparación, Garbiñe ha llegado a ganar tres títulos WTA e incluso llegó a la final del Abierto de Australia en 2020, a los pocos meses de iniciar este vínculo.

"Han sido unos años fantásticos, cargados de grandes emociones y de maravillosas vivencias, tanto dentro como fuera de la pista. Ha sido un placer trabajar contigo, Garbiñe. Te deseo lo mejor", finalizó en su comunicado Conchita Martínez.

Sus éxitos con Conchita

Conchita Martínez y Garbiñe Muguruza comenzaron su relación profesional a finales del año 2019. La mítica extenista española se unía así a su cuerpo técnico para tratar de aportar la experiencia de una campeona a otra campeona, pero lo cierto es que la irregularidad es lo que ha marcado esta etapa de la carrera deportiva de la hispanovenezolana.

Este periodo se ha saldado con un total de tres títulos WTA desde ese tramo final de 2019. Muguruza ha levantado los brazos en los torneos de Dubái, Chicago y también en las WTA Finals, y también ha llegado a las finales del Abierto de Australia, Melbourne y Doha. Seguramente esa final del Abierto de Australia fue el momento cumbre, ya que Garbiñe se quedó a las puertas de ganar su tercer Grand Slam.

Esta temporada estaba siendo realmente nefasta para los intereses de Muguruza. Había competido en cuatro torneos, Adelaida, Adelaide 2, Abierto de Australia y el WTA de Lyon, pero en ninguno de ellos consiguió pasar ni siquiera de la primera ronda. Todo derrotas, algo que le llevó a tomarse un tiempo fuera de las canchas. Por el momento no se atisba una vuelta de Garbiñe a las pistas, como poco, hasta el próximo verano. 

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La hispanovenezolana sigue cayendo en el ranking con celeridad y ya es la número 131 del mundo en el ranking WTA, muy lejos de aquel número 1 que llegó a ocupar en 2017. Las páginas doradas de su carrera las escribió en 2016 y 2017, cuando ganó Roland Garros y Wimbledon.