
Novak Djokovic se retira del Open de Australia 2025
El plan fallido de Novak Djokovic en su regreso: unas dudas que alimentan la presión y aceleran la recta final
La temprana eliminación del serbio en Doha después de su lesión en Australia vuelven a generar incertidumbre sobre el rumbo de su carrera.
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La temporada de Novak Djokovic está llamada a marcar un punto de inflexión en su carrera. Con las dudas disparadas después de completar el año pasado en blanco por primera vez en mucho tiempo, este 2025 se presenta como un momento clave que puede decir si está preparado para seguir rindiendo al máximo nivel o si, por el contrario, debe empezar a pensar en dar un paso al lado.
Por el momento, la incógnita no se despeja y el camino no termina de ser claro hacia su 'resurrección'. Después de las molestias musculares que le llevaron a abandonar en el Open de Australia, 'Nole' se tomaba el ATP de Doha como un escenario perfecto para empezar a recobrar la confianza y el estado de forma, pero ni una ni otra.
El serbio cayó a las primeras de cambio de manera inesperada ante Matteo Berrettini. Dos sets y ninguna opción para el exnúmero 1, que se marchó de vuelta a casa antes de tiempo.
Ni siquiera en dobles tuvo suerte. En esta modalidad que implica menos desgaste y sirve en ocasiones para favorecer el rodaje, Djokovic fue apeado junto a Fernando Verdasco, que jugó el último partido de su carrera, a las primeras de cambio en este mismo torneo de Doha.
Demasiados estímulos negativos para 'Nole' en el momento en el que trataba de volver a coger vuelo. Unas circunstancias que frenan en seco el golpe de efecto que buscaba para este curso con el nombramiento de Andy Murray como su nuevo entrenador.
De nuevo las lesiones
La temporada arrancó para Djokovic en Brisbane. Y no con muy buenas noticias, porque allí no pudo superar los cuartos de final, donde cayó de manera inesperada ante un rival fuera del top100 del ranking.
El estadounidense Reilly Opelka se cruzó en su camino y le derrotó por la vía rápida en tan sólo dos sets. Un tropiezo que, no obstante, tampoco significó nada alarmante al tratarse tan sólo del inicio del curso, todavía con muchas cosas por mejorar y con la máquina por engrasar.
Aquello fue un test para el Open de Australia. El lugar del circuito donde más ha ganado 'Nole', donde se siente más a gusto, se convirtió en una primera prueba de fuego importante para conocer su nueva situación.
Iba por el buen camino, lanzado a disputarle a Sinner el triunfo en el primer Grand Slam de la temporada, pero entonces el eterno problema de las lesiones volvió a cruzarse en su destino.

Novak Djokovic, durante el Open de Australia 2025
Primero experimentó unas pequeñas -y polémicas- molestias en el partido de cuartos de final ante Carlos Alcaraz. Se sobrepuso, llegó a semifinales y ante Zverev tuvo que abandonar después de perder el tiebreak del primer set. Se marchó de la cancha incluso abucheado, porque el público no terminaba de entender la situación.
Djokovic, unos días más tarde, incluso llegó a publicar en sus redes sociales una imagen de la resonancia a la que fue sometido para dejar claro que su lesión era real y que no se había marchado de Australia por capricho.
El fantasma
Casi un mes ha tenido que estar fuera de las canchas el tenista serbio para recuperarse de esa lesión muscular en su pierna izquierda. Un mes de trabajo en la sombra, de preparación mental y de sacrificio físico para volver al mejor nivel.
Decidió regresar en Doha, ese torneo en el que no iba a ser la única estrella, pero no le asustó el reto. No contaba, eso sí, con que fuera a ser Berrettini el que se cruzara en su camino para dejarle fuera tan pronto.
Su temprana eliminación abre de nuevo la puerta a todos los fantasmas. Djokovic terminó la temporada en blanco, y ahora se ve de nuevo lejos de volver a pelear por un título cuando comienza a consumirse el primer tramo del curso.
Sería muy duro para él aceptar otro año sin conquistar ningún título. La designación de Andy Murray como su entrenador para este 2025 pretendía cambiar las cosas y dar un giro radical a su carrera. Un año clave en el que todo puede torcerse aún más y evidenciar que la edad no perdona a nadie por muy 'superclase' que sea.