Image: Haciendo tablas

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El Cultural

Haciendo tablas

El Circuito Asturiano se reserva al teatro autóctono

23 octubre, 2009 02:00

Si los teatros históricos de Gijón, Oviedo y Avilés garantizan la representación del mejor teatro nacional, el Teatro de la Laboral apuesta por las vanguardias.

Dos acontecimientos importantes en el terreno escénico se han sucedido en los últimos años en Asturias. Por un lado, la apertura en 2007 de La Laboral, el teatro promovido por el Principado e integrado dentro de la Ciudad de la Cultura, de 1.400 localidades, equipado con la tecnología más sofisticada y con un presupuesto que ronda el millón de euros al año. Por otro lado, la creación del Circuito Asturiano de Teatro Profesional, que pretende impulsar una programación estable en 33 salas y espacios de titularidad municipal, con espectáculos de compañías asturianas.

Sin embargo, la puesta en marcha y el desarrollo del Circuito y de Laboral Escena no ha estado exenta de críticas de artistas y grupos de la región, como revela una encuesta publicada en la revista de teatro asturiana La Ratonera. Del Circuito, estos han criticado la gestión y la escasez presupuestaria para que los teatros puedan programar de forma continuada. Según informa la Consejería de Cultura, ayuntamientos y Gobierno regional destinaron el pasado año 550.000 euros a las contrataciones del Circuito, mientras el total de lo que el Principado destinó a subvencionar el teatro fueron trece millones de euros.

Respecto a La Laboral, las críticas apuntan a la desvinculación que tiene con las compañías y profesionales autóctonos. Mateo Feijoo (responsable de la programación) se ha centrado en ofrecer teatro contemporáneo, de vanguardia, con la presencia de compañías extranjeras y nacionales, lo que ha contribuido a situarlo en el circuito internacional y a ser complementario al otro gran teatro de Gijón, el Jovellanos.

Como se ha revelado en otras autonomías, la descentralización ha animado el teatro local, que ahora exige su "cuota" de presencia. En estos momentos hay un buen número de compañías asturianas, pero pocas alcanzan los escenarios de Madrid y Barcelona, con la excepción de La Carnicería de Rodrigo García, quien desde hace más de un lustro optó por instalarse allí, y algunas especializadas en teatro para niños como Kamante. La más veterana,Teatro del Norte, la dirige Etelvino Vázquez, quien también preside la Asociación de Compañías de Teatro y Danza Profesional de Asturias. Otros grupos asturianos a destacar son Higiénico, Margen, Konjuro, La Tejedora de Sueños, La Vereda... Hay también Escuela Superior de Arte Dramático, con sede en la Ciudad de la Cultura de Gijón. Y hay tres teatros históricos, testimonio de la afición de los asturianos, que actúan como los principales canales de difusión del teatro nacional: los municipales Jovellanos de Gijón y Palacio Valdés de Avilés, y el Campoamor de Oviedo, dedicado a la lírica y a la danza.

Curiosamente, Avilés se ha convertido en punto de partida de muchas producciones teatrales nacionales. "Lo que empezó siendo un experimento se convirtió, gracias al boca a boca, en una práctica. Las dimensiones del teatro, que se ajustan muy bien a una producción de formato medio, y el excelente equipo técnico, lo hace muy atractivo para los profesionales. Al disponer del Auditorio podemos permitirnos cerrar el Valdés durante una semana y dejarlo a disposición de los actores para que ajusten sus obras", explica su director, Antonio Ripoll. De esta manera, los avilesinos disfrutan del mejor teatro y el Palacio Valdés de una afición fiel que en abonados supera los 400.

FETEN

FETEN es desde hace 19 años uno de los sucesos teatrales de Asturias. Se trata de la Feria Europea de Teatro para Niños que, a finales de febrero, reúne en Gijón a una cincuentena de grupos nacionales y extranjeros que atúan por numerosos espacios que se acondicionan en la ciudad. La Feria logra un gran volumen de contratación, ya que acuden unos 400 programadores de teatros, lo que es un atractivo para las compañías. Otro de sus acicates son los premios que al final de cada edición se otorgan a los mejores montajes.