Plató y pantalla
Mucho más que el éxito de El orfanato
23 octubre, 2009 02:00Público en el Festival de Gijón.
Escenario de los inspirados trabajos de Bayona, Garci y Gonzalo Suárez, de series de TV y del Festival de Cine de Gijón, Asturias muestran su clara apuesta por el séptimo arte.
Pero más allá de Llanes, la Comunidad Autónoma es una de las más presentes en el cine español, un fenómeno que se ha acentuado especialmente en los últimos años. Títulos de prestigio recientes como Pudor, de los hermanos Ulloa, que transcurre en Gijón, o el éxito La torre de Suso, de Tom Fernández, suceden en Asturias, en parte impulsados por las ayudas que el Principado ha fomentado para multiplicar los rodajes.
Dos personalidades muy fuertes han marcado el contorno cinematográfico de Asturias, José Luis Garci y Gonzalo Suárez. Y ambos se han mantenido muy fieles a sus paisajes, por lo que sus tierras permanecen muy apegadas a las imágenes de filmes del primero como Volver a empezar, ganadora de un Oscar en 1982 y cuyo protagonista incluso era ex jugador del Sporting, Your are the One (2000) la reciente Luz de Domingo (2007) o la citada El abuelo. Si Garci significa la mirada canónica sobre el Principiado, Gonzalo Suárez aporta una visión libérrima y muy personal en filmes clásicos del cine español como la rompedora Aoom (1969), pasando por el gran éxito de Epílogo (1984), con Paco Rabal y Charo López, ambas con exteriores en Llanes, hasta la reciente Oviedo Express (2007). Muchos espectadores recordarán también la adaptación de La Regenta con Emma Penella, Agustín González o Adolfo Marsillach en 1974.
La vanguardia se ha colado en Asturias a través de otro foco fundamental, su muy asentado Festival de Cine de Gijón que el próximo 19 de noviembre alcanza su 47 edición. Dirigido por José Luis Cienfuegos, el certamen ha encontrado una marcada personalidad dentro del competitivo panorama de festivales nacionales gracias a su apuesta por el cine underground que se mueve en el territorio de la independencia más radical. Gijón ha querido ser el Festival "joven" de España, y lo ha conseguido gracias a su buen olfato para convertirse en el marco de presentación de directores que han alcanzado una gran influencia sobre las nuevas generaciones de cineastas como Lukas Moodyson, Tod Haynes, Claire Denis o Tsai Ming Liang. Esa apuesta por la juventud también se ve remarcada por la presencia de numerosos conciertos de grupos independientes de la escena española que ponen la banda sonora.
La 47 edición del Festival de Gijón ofrece este año una buena muestra de las virtudes de los talentos emergentes. Abre fuego Fatih Akin con Soul Kitchen, donde el director turco se pasa a la comedia, y hay ciclos dedicados a Harmony Korine, mito de la independencia neoyorquina, y Matthias Muller, autor casi desconocido en España cuyo trabajo ha podido verse en el Withney Museum de Manhattan. Finalmente, otra cita dentro de la oferta cinematográfica asturiana sería la interesante programación que puede verse en la Filmoteca de Asturias.