Cine

El verdugo, medio siglo después

6 septiembre, 2013 02:00

Hace 50 años, con gran revuelo, El verdugo llegó a los cines españoles. El eco de aquel rumor que se levantó entonces en torno a, quizás, la película más impactante de Berlanga, ha perdurado hasta nuestros días. Triunfo máximo entre las colaboraciones del director y del guionista Rafael Azcona, sus fotogramas se reproducen para siempre en la memoria de quien alguna vez la visionó.

La historia real de una envenenadora de Valencia, publicada por un periódico y que llegó a oídos de Berlanga, encendió la mecha de un guión que, luego, el genio de Azcona mutó: eligieron centrarse en el hombre que ajusticiaría al detenido para urdir un alegato contra la pena de muerte. El pobre verdugo, que había heredado el terrible cargo de su suegro, pensaba inocente que no tendría nunca que ejecutar a nadie por estar en desuso la pena de muerte, hasta que un día le llaman para que ejerza su profesión.

Berlanga ilustró la negrura de la situación -un hombre que se resite a matar- y la de un país medieval a golpes de planos secuencia, convencido como estaba de que "el camino era el esperpento". Pepe Isbert en el papel del suegro del verdugo pero también del perdedor, interpretando a un berlanguiano personaje entre la mezquindad y la supervivencia, terminó de trufar los aciertos que hacen que esta película de apabullante coro de actores (Manfredi, Penella, López Vázquez...) se vea hoy tan bien como hace medio siglo, cuando triunfó en la Mostra de Venecia, festival que se celebra estos días, donde ganó el premio de la crítica internacional

Para celebrar la efeméride, la Academia de Cine proyecta este viernes a las 19 horas la que es una de las producciones más significativas de nuestra cinematografía y una obra maestra del humor negro.