Teatro

El extraordinario mundo de Daulte

El autor adapta "La metamorfosis" para La Fura

13 octubre, 2005 02:00

Daulte y Àlex Ollé han escrito una nueva obra a partir de la de Kafka

Transformar la palabra escrita de Franz Kafka en palabra teatral debe ser tan difícil como acostarse hombre y levantarse cucaracha. Menos para La Fura dels Baus y Javier Daulte, que han hecho eso precisamente con La metamorfosis, convertida en obra de teatro y que se presenta en España el 13 de octubre, dentro de la programación del Festival Temporada Alta de Gerona. La obra supone para el autor argentino la también rareza de que el montaje sea el cuarto suyo que llega a los escenarios españoles en lo que va de año. Con ello los espectadores tienen la posibilidad de conocer a uno de los principales autores del pujante teatro de su país que, ahora, se estrena con la compañía barcelonesa en algo así como el más difícil todavía. Daulte reconoce que "representar" La Metamorfosis es básicamente imposible. Para el argentino, Kafka "genera una metáfora literaria inigualable" al contar cómo un hombre se levanta por la mañana convertido en un monstruoso insecto que no podría funcionar de la misma manera sobre un escenario. Por eso, una de las primeras decisiones que tomó con La Fura fue la de suprimir todo lo que tuviera que ver con la conversión de Gregor Samsa en cucaracha, a pesar de los riesgos que comporta: "Es casi como eliminar el asesinato del rey en el comienzo de Hamlet", confiesa, pero defiende la decisión como "absolutamente necesaria" para hacer una obra de teatro cuya base es una obra literaria que sirve como "fuente de inspiración para la creación de una metáfora escénica nueva", algo diferente a montar "una representación de una obra literaria". Y que mantiene una "fidelidad al libro original mayor de lo que pueda pensarse".

Samsa, taquillero del metro
Una vez establecido el punto de partida, los creadores decidieron que la conversión de Samsa, un taquillero de la barcelonesa estación de Sants, consistiera en encerrarse en "su habitación, bajo amenaza de suicidio". De esta manera, el protagonista hace "un movimiento hacia dentro" que le excluye del mundo, conduciéndole a la deshumanización. El autor argentino piensa que ésta es una característica de la sociedad de ahora. Para Daulte, "en la clase media del mundo occidental la humanización es un proceso y no una condición de la existencia", idea que resume en un "no por existir (nacer humano) estamos humanizados". Al contrario, recuerda al francés Alain Badiou, todas las personas son "animales humanos/animales parlantes; pero depende de cada uno la posibilidad de constituirse en sujetos humanos".

La idea enlaza con otro de sus montajes representados estos días en Gerona. Automàtics, escenificada el día 12 en el mismo festival, es un ejercicio que creó con los alumnos de Cuarto curso de interpretación del Institut de Teatre de Terrasa, que se estrenó el pasado junio en la localidad catalana. El hecho de que el encargo fuera realizar un taller con un grupo de estudiantes le invitó a experimentar. Y Daulte escogió "el tema de la expresividad/inexpresividad en el actor", la oposición que existe entre una interpretación emocional, su preferida, y otra expresiva.

Seres humanos y máquinas
Para ello, Daulte partió de la suposición de que los seres humanos, a veces, no se diferencian mucho de las máquinas. Incluso, en ocasiones, son en realidad auténticas "máquinas parlantes" a las que cuesta diferenciar de los robots. Una vez establecido el punto de partida, el también director creó sobre la marcha una obra sobre "la indefensión del hombre" que presenta a "los actores encarnando, valga la paradoja, seres inanimados". Hasta que se produce un cambio, que su creador no explica para "no desvelar gran parte de la intriga del relato", pero que muta lo anterior, aunque, advierte, "sin obligar a ningún espectador a convertirse en teórico del teatro para poder disfrutar del espectáculo". De esto ya sabe el público de sus otras obras que ahora se representan en España. En Barcelona continúan las funciones de Ets ahí? (¿Estás ahí?), una divertida y dramática pieza que se representa en el Teatro Borrás, mientras que la sala Lagrada de Madrid ha decidido prorrogar las representaciones de Criminal. Ambas, como el resto de su producción, llevan a la escena las cosas extraordinarias que pasan en el mundo cotidiano. El autor asume este rasgo de su obra, aunque sin darle mucha importancia, ya que, considera que "es un procedimiento absolutamente clásico en la literatura dramática universal" que cuenta con ejemplos como la "aparición" de los dioses en el teatro griego o "los duendes, hadas y fantasmas en Shakespeare".

A lo que sí contribuye Daulte es a darnos una idea de la vitalidad del teatro argentino actual. él destaca la creatividad que hay en su país y la de su escena alternativa, "donde se produce el teatro más interesante" y la que "garantiza en cualquier cultura su renovación porque es donde realmente se arriesga y experimenta".