Rafael Chirbes

Un año más, la cosecha narrativa en castellano presenta pocas sorpresas: sólo Crematorio, de Chirbes, La muerte de Luciana B, de Guillermo Martínez, La ofensa de Menéndez Salmón y La última hora del último día, de Jordi Soler rompen la nómina casi monótona de autores seleccionados, año tras año, como los mejores. Sin embargo, una nueva generación (Mario Cuenca Sandoval, Vicente Luis Mora) pide paso.

1.- Crematorio
Rafael Chirbes
Anagrama. Barcelona, 2007. 427 páginas, 20 euros

Autor de culto, Rafael Chirbes (Tabernes, Valencia, 1949) prosigue en Crematorio su revisión crítica de la sociedad española con una novela "excelente, la mejor de Chirbes y una de las mejores de la literatura española en lo que va de siglo", en palabras de ángel Basanta, que en su reseña apuntó que se trata de "una novela necesaria en este tiempo de levedad, frivolidades y desmemoria. Porque su narración aborda con valentía y lucidez los turbios negocios perpetrados por el capitalismo desaforado en estos años y profundiza en las íntimas y dolientes paradojas y contradicciones del ser humano contemporáneo".
Todo comienza con la muerte de Matías Bertomeu, un hombre que vivió entregado a su compromiso con la revolución durante los últimos años del franquismo y la transición, que pactó con la izquierda que despreciaba por traicionar sus ideales, y que acabó retirándose a su pueblo natal, Misent, para reinventarse convertido en ecologista. Su repentina muerte remueve todos los recuerdos, todos los rencores de una familia enfrentada a muerte.
Ahí, en Misent, había quedado su hermano mayor, Rubén, un constructor sin escrúpulos que se soñó arquitecto solidario y acabó destrozando el litoral va-
lenciano con sus promociones urbanísticas, y que no dudó en coquetear con el tráfico de drogas para levantar su imperio. Queda también su sobrina Silvia, que hace compatible su izquierdismo con una vida de lujo que paga su odiado padre; queda su marido, Juan, un catedrático que prepara la biografía de Federico Brouard, escritor alcoholizado y viejo amigo de los Bertomeu. Quedan también todos aquellos a los que Rubén ha dejado en el camino. Con estos personajes, Chirbes monta un guiñol devastador a vueltas con el fin de los ideales, el fracaso de la familia, los desastres de la especulación inmobiliaria, o los espejismos del sexo. Tan terrible como fascinante.

2.. El corazón helado
Almudena Grandes
Tusquets. Barcelona, 2007. 936 páginas, 25 euros

"El corazón helado es una novela en el sentido más clásico del término. Es, de principio a fin, una obra de ficción, y sin embargo no quiero ni puedo advertir a los lectores que cualquier semejanza de su argumento o sus personajes con la realidad sea una mera coincidencia. Lo que ocurre es más bien lo contrario. Los episodios más novelescos, más dramáticos e inverosímiles de cuantos he narrado aquí, están inspirados en hechos reales" (pág. 924). Con esta declaración en la "Nota de la autora" presentaba Almudena Grandes esta novela, la más ambiciosa de las suyas y la mejor, tanto por la ingente articulación de historias, sentimientos, pasiones y emociones en su contenido, como por el artístico maridaje de tradición y modernidad en su estructura narrativa. Un relato colosal, desbordado, que, como destacó ángel Basanta al reseñar el libro, "combina con eficacia la narración, que mantiene su interés de cabo a rabo; la descripción matizada y el diálogo, como vehículo de desnudamiento de almas. Sin duda es una novela desmesurada, muy novelera. Una gran novela".

3.- El padre de Blancanieves
Belén Gopegui
Anagrama. Barcelona, 2007. 352 páginas, 19'50 euros

"Aun a riesgo de que se me malinterprete, me atrevo a decir que si Galdós viviera hoy, escribiría una novela como ésta de Belén Gopegui". Así de tajante comenzaba la reseña de Santos Sanz Villanueva sobre El padre de Blancanieves. Considerada por Umbral la mejor narradora de su generación, Belén Gopegui narra en esta novela lo que ocurre en una familia cuando la madre, profesora de instituto, provoca sin querer el despido de un ecuatoriano que trabaja en un supermercado y que se le presenta en su casa. Hasta que no le consiga un trabajo, dice, no se librará de él. A partir de esta anécdota, y del cataclismo que ocasiona en una familia convencional pero con mentalidad de izquierdas, la autora reflexiona sobre el amor, la lucha social, la ecología, las falsedades del sistema y los problemas de la familia actual. A fin de cuentas, se trata de un relato que " es una obra seria e importante que debe leerse porque, además de resultar amena por el interés de la trama que la alimenta, urge a reflexionar sobre la realidad".

4. La gloria de los niños
Luis Mateo Díez
Alfaguara. Madrid, 2007. 227 páginas, 18'50 euros

Un padre moribundo encarga a su hijo mayor, Pulgar, que encuentre a sus tres hermanos, en paradero desconocido tras el bombardeo de su ciudad durante la guerra civil. Como explicó en su momento Santos Sanz Villanueva, "este gustoso caudal de pequeñas aventuras demuestra que el escritor leonés se ha convertido en un poderoso y magistral narrador moral".

5.- Veneno y sombra y adiós
Javier Marías
Alfaguara. Madrid, 2007. 705 páginas, 22'50 euros

última entrega de la trilogía "Tu rostro mañana", Veneno, sombra y adiós ha sido considerada por la crítica como la mejor de las tres novelas por su riqueza especulativa y su densidad moral hasta alcanzar, en palabras de Santos Sanz, "la plenitud de la gran obra memorable. Es, creo, la mejor de Marías por el logro que aquí consigue: la plena fusión de lo intelectual, cordial y emocional".

6. La muerte lenta de luciana B
Guillermo Martínez
Destino. 2007. 232 pp., 19'50 e.

¿Qué haría si alguien de su pasado le pidiera ayuda porque es víctima de una conjura que acaba con todos los que ama? Guillermo Martínez juega con el lector en esta novela descrita por Senabre como "excelente".

7.- Hoy, Júpiter
Luis Landero
Tusquets. 2007. 400 pp., 20 e.

Dámaso y Tomás, dos vidas paralelas, se disputan el protagonismo de la última novela de Landero, una indagación tan nostálgica como despiadada sobre la ambición, el talento, la envidia, y las heridas del pasado.

8. La ofensa
Ricardo Menéndez Salmón
Seix. 2007. 142 pp., 17'50 e.

Esta breve novela sobre un soldado nazi a su pesar deslumbró a la crítica. Ricardo Senabre, que celebró sobre todo su uso de "una lengua llena de posibilidades expresivas" destacó las "innegables condiciones de escritor" de su autor.

9. La última hora del último día
Jordi Soler
RBA. Barcelona, 2007. 224 páginas, 18 euros

Jordi Soler regresa al territorio imaginario de su infancia en la selva mexicana para sorprender al lector con un relato que mantiene en todo momento "la sorpresa de la acción, la rareza psicológica de ciertos personajes a la par que la del lenguaje, de riquísimo vocabulario". Es, como subrayó Joaquín Marco, "una realidad literaria, no una promesa, el mejor ejemplo de la eficacia del mestizaje múltiple".

10. El lugar sin culpa
José María Merino
Alfaguara. Madrid, 2007. 167 páginas, 18 euros

Aunque este año también recopiló sus microrrelatos en La glorieta de los fugitivos, los críticos de El Cultural han elegido El lugar sin culpa como uno de los diez del año. En él, un grupo de personajes desarraigados coinciden en un islote al que han llegado huyendo de algo (del desamor, de la desgracia). Lo mejor, la ausencia de detalles irrelevantes y la esencialidad de lo narrado.