Ensayo

Sospechosos habituales

Ramón de España

10 enero, 1999 01:00

Anagrama. Barcelona, 1998 246 páginas, 1.950 pesetas.

U no ha criado cierta admiración hacia Ramón de España por sus desopilantes artículos y por novelas como "Nadie es inocente" (1997). Pocos escritores como él saben crear esa íntima atmósfera de complicidad para luego desplegar un estupendo sentido del humor que engolfa y adicciona.
Sin embargo, "Sospechosos habituales" deja fuera de juego a los lectores que no somos de Cataluña, porque es un libro dedicado a los catalanes incondicionales de España. En efecto, su origen fueron las viñetas que publicó en la edición catalana de un diario nacional, pintarrajeando así a un grupo de editores, artistas y escritores de la farándula barcelonesa. El género cuenta con una notable relación de antecedentes en nuestra literatura, desde los Retratos de Gómez de la Serna hasta las Siluetas de escritores de González Ruano. La diferencia radica en la vocación literaria que no hemos encontrado aquí.
Estamos ante un libro endogámico. Y si antes afirmé que en las obras de Ramón de España existía una atmósfera de complicidad, en "Sospechosos..." hay demasiada: todo transcurre en el interior de un círculo impenetrable para los no iniciados. Así, uno reconoce a las estrellas de la tele (Arús, Xavier Sardá y ángel Casas); a ciertos músicos ("Loquillo", Raimon, Gato Pérez...); a unos cuantos escritores (Gimferrer, Monzó, Barnes, Tomeo, Vázquez Montalbán, Marsé, Regás, Terenci Moix, Mendoza...); también a unos pocos artistas (Barceló, Bigas Luna, Mariscal y Bohigas) y a algunos editores (Lara, Herralde, Murillo y Beatriz de Moura). A los 51 restantes, ¡encantado de conocerles!
No es una obra destinada al gran público. En cambio, sí parece generosa y algo gamberra, pero es conmovedor que existan editores capaces de publicar libros de cenáculo como éste, que es una suerte de crónica de la Barceloneta poblada por los sobrevivientes del naufragio de la "gauche divine". Un libro de un amigo para sus amigos.