Ensayo

Siempre soñé con Africa

Kuki Gallman

10 octubre, 1999 02:00

Emecé. Barcelona, 1999 286 páginas, 2.100 pesetas

D e los hombres desalmados se dice que un día llegan a sentarse a la puerta de su casa a ver pasar los cadáveres de sus enemigos. Kuki Gallman decidió instalarse en Kenia para ver desfilar lentamente los cadáveres de sus seres queridos, y todo por hacer realidad un sueño de su infancia: vivir en áfrica. Pues hay un animal mucho más peligroso que un elefante herido o un búfalo cabreado: un humano que sueña.

Kuki Gallmann es una de tantas amantes de la naturaleza virgen y la vida primitiva que decidió cambiar los mosquitos de Venecia por los elefantes de Kenia. Esta "medium" supo reconstruirse a sí misma tras un grave accidente de tráfico en Italia para poder volver a caminar sin muletas y valerse en la selva, su destino, donde debería estar ágil para subirse a un árbol y esquivar a un búfalo en cuestión de segundos. Consigue realizar su sueño en 1972, cuando "ricos y famosos que ahora se han convertido en convencidos conservacionistas, cazaban elefantes como si tal cosa, sin que se arqueara una sola ceja". Tanta tenacidad es la que le facilitó desafiar su mala suerte y soportar durante el resto de su vida el escenario de la tragedia. Pierde a su marido Paolo en un accidente de coche y más tarde a su hijo Emanuele, mordido por una serpiente bufadora. La "medium" se olía cada trago amargo, pero ni se planteaba esquivarlo. Mueren otros seres queridos, pero las puestas de sol de áfrica, las acacias en las doradas mañanas la compensaban. Nos cuenta su melodrama sin acabar de conmovernos, con presunción de entereza. Es torpe la presentación y construcción de unos personajes que, siendo reales, deberían calar en el lector más fácilmente. Gallmann está más pendiente de demostrar su increíble sensibilidad. Aun así atisbamos el paraíso en el que llegó a vivir, mucho antes de encabezar la lucha antifurtivos que tuvo su hito en julio de 1989, con la incineración de toneladas de marfil en el Parque Nacional de Nairobi.