Ensayo

No a las dos Españas. Memorias políticas

Miguel Primo de Rivera y Urquijo

22 mayo, 2002 02:00

Plaza & Janès. Barcelona, 2002. 328 páginas, 19’90 euros

Miguel Primo de Rivera (1934), sobrino del fundador de la Falange, nieto del primer dictador de la España del siglo XX, y descendiente de una familia en la que hubo varios militares con muy destacado protagonismo en la construcción de la España liberal, vivió los años del franquismo con la privilegiada -pero también complicada- situación de gozar del afecto del dictador y de ser amigo de la infancia del futuro rey Juan Carlos.

La protección de Franco le llevó a la alcaldía de Jerez y, en los años finales del régimen franquista, al Consejo del Reino, que era una institución clave para la designación del presidente de Gobierno y, como lógica consecuencia, para facilitar la transición desde el franquismo a la monarquía, en la persona del príncipe Juan Carlos.

Todas esas circunstancias habrían dado material más que sobrado para unas memorias apasionantes si, de entrada, se hubiesen elaborado con más cuidado y no se hubiese cedido, en demasiadas ocasiones, a la tentación de acumular materiales de valor muy desigual.

El autor ha puesto a sus memorias un título que hace referencia a la vieja imagen de "las dos Españas" que, mucho más allá de Ortega y de Joaquín Costa, hunde sus raíces en la cultura política occidental y se ha formulado en las más diversas latitudes. En el presente caso, las dos Españas son las enfrentadas por la guerra civil, y la vía de superación que proponían quienes, como él, se consideraban "cachorros del reformismo" fue la utilización de las instituciones franquistas para hacerlas desembocar en una Monarquía que, como efectivamente ocurrió, pudiera invocar el concurso de todos los españoles, sin distinción de opiniones ni antecedentes.

El volumen ilustra muchos aspectos de los intrincados caminos de los años finales de la política franquista y no dejará de interesar a los especialistas en el estudio de aquel periodo.