Juan de Austria. Novela de una ambición
Ángel Martínez Pons
29 abril, 2004 02:00La narración de Martínez Pons aligera la carga de la historia, adoptando la primera persona, a la manera de un diario íntimo de varios personajes fundamentales en la época. De esta forma se alternan las voces del propio Don Juan de Austria; de su madre, Bárbara Blomberg; del emperador Carlos, del joven príncipe de Asturias Felipe (hasta que la historia transcurre en el tiempo y ya es rey), de su secretario Antonio Escobedo, de Isabel de Valois, llegando en esta multiplicidad de narradores en primera persona a Miguel de Cervantes, que nos narra la batalla de Lepanto, con todos sus horrores. Esta alternancia narrativa da agilidad al relato, permite el cambio de escenario y de tiempo, y "soluciona" los pasajes que se alejan un tanto de la historia oficial, para introducirse en los recovecos de la imaginación del autor, para presentarnos elementos de naturaleza más emotiva, de intrahistoria ficticia, que ofrecen unas dosis de verosimilitud más que notables.
Martínez Pons nos ofrece una galería de personajes fascinantes en su diversidad, que discurren en uno de nuestros períodos históricos más llenos de claroscuros, brillante, duro y lleno gloria, habitado por seres de quienes tenemos todavía mucho que saber. Ambientada en una época difícil y necesaria en nuestra trayectoria como país, esta narración orbita en torno a un arquetipo de todas nuestras contradicciones de gloria y miseria, Don Juan de Austria, que hace que la lectura de estas páginas no sea un simple acto de entretenimiento.