Ilustración de los modelos de Mini Me, la última colección de Miniland junto a Paz Rodríguez.

Ilustración de los modelos de Mini Me, la última colección de Miniland junto a Paz Rodríguez. Cedida

Historias

Mini Me, la nueva colección Marca España que visibiliza la diversidad e inclusión infantil a través de las muñecas

Las marcas españolas Miniland y Paz Rodríguez aunan fuerzas para lanzar un proyecto solidario en beneficio de la Fundación Asindown. 

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La incidencia estimada del síndrome de Down a nivel mundial, indican desde Naciones Unidas, se sitúa entre 1 de cada 1.000 y 1 de cada 1.100 recién nacidos. Se trata de una alteración causada por la existencia de material genético extra en el cromosoma 21 que se traduce en una discapacidad intelectual. Es decir, estas personas tienen 47 cromosomas en lugar de 46. 

Si hacemos zoom in a las cifras, dice la Fundación Síndrome de Down Galicia, se aprecia un notable descenso en los últimos años en España, a pesar de que la esperanza de vida del colectivo ha aumentado considerablemente. 

En concreto, se estima que en nuestro país el número de personas con síndrome de Down es de alrededor de 35.000. Un dato visiblemente menor si tenemos en cuenta que hace 40 años esta cifra se situaba en torno a los 300.000 casos.

Actualmente, continúa la entidad gallega, las personas con este síndrome alcanzan edades avanzadas manteniendo una buena calidad de vida. Mientras que en 1900 la esperanza de vida de esta parte de la población era de entre 9 y 11 años, hoy día supera —y con creces— los 60. 

Como esta son muchas las patologías que afectan a la sociedad española. Sin embargo, hasta hace no mucho tiempo los muñecos no lo representaban así. La tónica era siempre la misma: juguetes que imitaban a niños con rasgos occidentales, cuerpos normativos y sin aparentes diferencias.

Juego inclusivo

A partir del poder que tiene el juego para educar en valores y construir un mundo mejor, desde Miniland optaron hace 30 años por salirse de la norma. Lo hicieron fabricando muñecos, como ya hacían 30 años atrás, pero con un componente especial: eran inclusivos

Desde entonces, en su web se puede encontrar todo tipo de opciones entre las que se incluye tanto la diversidad funcional, como de origen o de género. Y es que para ellos, dice Almudena Richart, marketing manager de la compañía, tan solo hay un objetivo: que todos los niños y niñas se sientan representados desde que son pequeñitos y normalicen estas diferencias. Porque, dice, al final, "la belleza está en eso".

Y ahora, algún que otro año después desde que hicieron sus primeros pinitos en este sector, han decidido aunar fuerzas con la firma de moda gallega Paz Rodríguez. Juntos lanzan 'MiniMe' una colección cápsula de muñecas diseñadas para visibilizar la diversidad e inclusión infantil. 

Lo hacen en el marco del Día Mundial del Síndrome de Down, que tendrá lugar el próximo 21 de marzo. De ahí que haya dos los muñecos de la colección con esta patología. La finalidad es, como explica la propia Richart, ser "una inspiración para niños y niñas de todo el mundo". 

Unidos por la causa

En este proyecto el trabajo es en equipo. Miniland ofrece los muñecos y Paz Rodríguez los viste con prendas de la nueva temporada de primavera-verano 2025. Todo surgía, cuenta Richart, de una "forma espontánea a raíz de las redes sociales" y, más o menos un año después de aquel momento, sale a la luz esta iniciativa.

El secreto está en que, asegura la marketing manager de Miniland, ambas marcas comparten "la visión de la inclusividad" y juntas promueven ese valor que creen "esencial en el mundo". Pero esto no es todo; hay un tercer miembro en esta combinación con éxito asegurado. 

Se trata la Fundación Asindown, una entidad que, con sede en Valencia, se centra en incentivar programas de inclusión para las personas con esta patología. Su papel en la ecuación no será otro que ser beneficiarios de esta iniciativa, y es que por cada unidad vendida se destinará un euro a esta organización.

Aunque su papel no se queda ahí. También han querido aportar su granito de arena a la causa. Lo hacen a partir de un folleto que, incluido con la compra de las muñecas, ofrece información para, señala Richart, "desmentir mitos acerca del síndrome de Down y dar a conocer esta condición"

Porque aquí, concluye, la clave está en "concienciar a la sociedad de que hay niños y personas con síndrome de Down y son tan válidos como el resto"