
La vicepresidenta Yolanda Díaz y el ministro Ernest Urtasun, este sábado en Barcelona en un acto titulado "Trabajar menos, vivir mejor". Efe
Yolanda Díaz presiona al PP para que apoye la reducción de jornada: Junts votará 'no' si ella rechaza sus enmiendas
La vicepresidenta apela directamente a los 137 diputados del PP y les pide que no hagan "sufrir" a los trabajadores tumbando el proyecto de ley.
Más información: El Gobierno da luz verde al anteproyecto de ley para rebajar la jornada laboral a 37,5 horas
El Gobierno teme sufrir otro revolcón en las votaciones del Congreso, en uno de sus proyectos estrella. La vicepresidenta Yolanda Díaz elevó este sábado la presión sobre el PP para que apoye la reducción de la jornada laboral a 37,5 horas semanales, ante el riesgo de que Junts tumbe la iniciativa en el Congreso de los Diputados.
Durante un acto celebrado en Barcelona, Díaz pidió al PP que no haga "sufrir" a los trabajadores y se sume esta reforma que va a "cambiarlo absolutamente todo" en el mundo laboral.
Casi a la misma hora, el secretario general de Junts, Jordi Turull, anunciaba desde Lérida que su grupo votará no al proyecto de ley aprobado por el Consejo de Ministros, si se mantiene "sin tocar una coma".
Porque el texto actual, señaló Turull, puede tener "efectos devastadores" para las pequeñas empresas que no puedan adaptarse o no tengan capacidad de ampliar su plantilla para mantener la actividad.
Por eso Jordi Turull reclamó a la vicepresidenta Yolanda Díaz que se "abra a negociar" algunas modificaciones del texto, si quiere el apoyo de su grupo para ratificarlo en las Cortes.
El secretario general de Junts también aconsejó al Ejecutivo que no haga públicas sus desavenencias sobre esta y otras cuestiones, como la tributación del Salario Mínimo Interprofesional (SMI), para "evitar ciertos espectáculos entre ministros y entre vicepresidentas".
Se trata de las dos banderas, la subida del SMI y la reducción de jornada, a las que se ha aferrado la vicepresidenta de Trabajo, para evitar que el papel de Sumar se difumine en el seno del Gobierno de coalición.
Debido a las presiones de Yolanda Díaz, el Consejo de Ministros aprobó el pasado día 4 el anteproyecto de ley, en medio de la crisis abierta con Junts, a sabiendas de que en estos momentos no tiene los apoyos necesarios para que salga adelante.
Y ahora el Ejecutivo se moviliza para evitar nueva derrota en las Cortes —como ocurrió con el primer decreto ómnibus que incluía la subida de las pensiones—, que evidenciaría de nuevo su debilidad parlamentaria.
Yolanda Díaz protagonizó este sábado un acto junto al ministro de Cultura, Ernest Urtasun en Viladecans (Barcelona) para promocionar su iniciativa, bajo el título Trabajar menos, vivir mejor.
Sin aludir en ningún momento a Junts, la vicepresidenta apeló directamente a los 137 diputados del PP en el Congreso para que no echen por tierra las ilusiones de los 12 millones de trabajadores a los podría beneficiar la reducción de jornada.
"¿Van a darle la espalda a uno de los procesos de mayor modernización de nuestro país? ¿Van a hacer sufrir a la gente trabajadora? La política no es esto", recalcó Yolanda Díaz.
Según argumentó, se trata de una iniciativa "democrática", "feminista" y "verde": "No pedimos grandes cosas, solo un poco de reparto e igualdad en el seno de las relaciones laborales", indicó en declaraciones recogidas por Efe.
La titular de Trabajo reconoció que el proyecto tiene "muchos adversarios", también en el seno del propio Gobierno, por lo que animó a los sindicatos a movilizarse para presionar a los partidos que tienen en su mano la aprobación de la medida.
De hecho, la vicepresidenta protagonizó hace pocas semanas una agria polémica con el ministro de Economía, Carlos Cuerpo, al que calificó de "mala persona" por poner reparos a la reducción de jornada, alineándose con las patronales.
Durante el acto celebrado este sábado en Barcelona, Yolanda Díaz aseguró que Cataluña ha sido pionera en este tipo de reformas y, también ahora, debe ponerse al frente de esta reivindicación.
A continuación, la portavoz de Comuns en el Congreso, Aina Vidal, vertió una catarata de insultos contra los responsables de la patronal catalana Foment del Treball, a los que calificó de "cínicos, machistas, racistas y autoritarios".
Vidal respondió así a las declaraciones del presidente de Foment del Treball, Josep Sánchez Llibre, quien había definido a Yolanda Díaz como "la hooligan del Gobierno", por la vehemencia con la que defiende sus iniciativas
Durante el acto organizado por Sumar, la portavoz de los Comunes acusó a las patronales de recurrir a "mentiras" e "insultos" para intentar frenar los avances sociales que impulsa el Gobierno.
Por su parte, el ministro Ernest Urtasun argumentó que la reducción de jornada también permitirá un mayor acceso de los trabajadores a la cultura: "No quiero que la cultura sea un lujo solo para quien tiene tiempo y no sea accesible para quien no lo tenga", señaló.