Las vicepresidentas María Jesús Montero y Yolanda Díaz, este miércoles en el Congreso de los Diputados.
PSOE y Sumar afrontan su "peor momento" en pleno idilio de Sánchez con Junts: guerra total en las votaciones del Congreso
Hacienda vetará la iniciativa de Sumar para eximir al SMI de pagar IRPF y los dos partidos votarán en sentido opuesto este jueves sobre el gasto militar.
Más información: María Jesús Montero usará su derecho a veto para tumbar la iniciativa de Yolanda Díaz de que el SMI no tribute el IRPF
Pedro Sánchez y Carles Puigdemont están desbloqueando "carpetas" pendientes -según terminología de Junts- y alcanzando acuerdos. Pero este idilio contrasta con el enfrentamiento con Sumar, su socio en el Ejecutivo.
PSOE y Sumar están en su "peor momento" desde la investidura, aseguran fuentes de la coalición de Gobierno. Las discrepancias se suceden en temas relevantes como el Salario Mínimo, el gasto en defensa o la cesión de las competencias migratorias, lo que hace que aflore la existencia de programas contradictorios en el seno del Ejecutivo.
Además, en la coalición que lidera Yolanda Díaz cunde el malestar porque todos esos desencuentros se acaban resolviendo a favor de los socialistas. Esa situación les complica la tarea de remontar en las encuestas, donde han perdido mucho terreno.
El enfrentamiento amenaza ya con una guerra de votaciones en el Congreso de los Diputados, lo que podría tener consecuencias difíciles de calcular. Esta semana está siendo un ejemplo.
Este miércoles, fuentes del Ministerio de Hacienda confirmaron que usarán su derecho a veto para tumbar la proposición de ley de Sumar para que el Salario Mínimo Interprofesional (SMI) no tribute IRPF. Será la primera vez que el Gobierno vete una iniciativa salida del propio Gobierno.
La crisis se desató en febrero, cuando Yolanda Díaz aseguró en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros que se acababa de enterar de que Hacienda no había elevado el mínimo exento de tributación y que los perceptores del SMI tendrían que pagar IRPF. Entonces, Sumar, Podemos y PP registraron varias proposiciones de ley para que sí quedaran exentos, en contra del criterio de Hacienda.
"Claro que lo vamos a vetar", confirman fuentes del entorno de María Jesús Montero. Moncloa estima que, de no recaudar ese IRPF las arcas públicas, se estarían dejando de ingresar en torno a 2.000 millones de euros. Dado que se verían afectados los ingresos de las cuentas en vigor, eso justifica un veto presupuestario.
El veto se tendrá que presentar estos días y se evaluará en la reunión de la Mesa del Congreso el próximo martes. Pero desde Sumar aseguran que intentarán levantar ese veto en la Mesa juntando sus votos a los del PP.
Entre ambos partidos suman una mayoría que dejaría al PSOE en minoría. También sería inédito que Sumar votara junto al PP para levantar un veto de Hacienda.
Defensa e inmigración
Otro de los asuntos en los que Sumar y PSOE están colisionando es el del aumento del gasto militar. Aunque el aumento en concreto no se votará en el Congreso (Sánchez no tiene intención de llevarlo pese a que sus socios y la oposición se lo piden), las posturas de PSOE y Sumar volverán a diferir en una votación que tendrá lugar este jueves.
El PP registró una proposición de ley sobre el apoyo a Ucrania y la portavoz de Sumar, Verónica Martínez, anunció que su formación votará en contra. En el PSOE, en cambio, se abren a apoyar toda la iniciativa del PP excepto el punto que exige, precisamente, que el aumento del gasto tenga que pasar por el Congreso.
Aunque Yolanda Díaz no es excesivamente beligerante con este asunto, sí lo son formaciones como Izquierda Unida o Compromís, integradas dentro de Sumar y que rechazan de plano ese aumento del gasto.
Izquierda Unida también se ha pronunciado en contra del pacto para ceder las competencias migratorias a Cataluña, firmado por el PSOE y Junts, al considerarlo "clasista, derechista y reaccionario", y el diputado de Compromís Alberto Ibáñez incluso ha anunciado que votará en contra cuando llegue al Congreso.
Aunque todavía no se sabe qué hará Izquierda Unida ni qué harán otros diputados de Compromís, todo apunta a que el Gobierno también votará dividido sobre este asunto.
La única victoria ante el PSOE de la que Díaz ha podido presumir ha sido la de la reducción de la jornada laboral. Ella y el ministro de Economía, Carlos Cuerpo, protagonizaron otro duro enfrentamiento (llegó a insinuar que Cuerpo era "mala persona") y finalmente la parte socialista le aceptó los tiempos y las formas que pedía.
Sin embargo, es una victoria a medias. Porque todavía no se ha aprobado en el Congreso y ahora Junts, que sí llega a acuerdos con el PSOE, está amenazando con tumbarla.
La formación de Puigdemont ya ha trasladado a Trabajo que no avala el anteproyecto de ley y, junto al rechazo previsible del PP, no darán los números para que se apruebe, por lo que podría quedarse en un brindis al sol.
