María Aliójina, la mujer que Rusia ha añadido a la lista de personas buscadas por el Gobierno
La intengrante del grupo punk Pussy Riot estaba en arresto domiciliario hasta que la semana pasada un juez cambiara de decisión.
26 abril, 2022 12:31Noticias relacionadas
La guerra entre Rusia y Ucrania está afectando a todos los niveles, no hay ninguna duda. Caras conocidas del panorama musical ruso están sufriendo de primera mano las restricciones que este conflicto está causando. El nombre de María Aliójina, miembro del grupo punk Pussy Riot, ha sido uno de los últimos añadidos a la lista de personas buscadas por Rusia.
El Ministerio de Interior ruso ha publicado información de la artista en su base de datos de personas en busca y captura durante la última jornada. Esta noticia llega tras haber sido condenada la semana pasada a una pena de 21 días de cárcel sin que ella compareciera para ingresar en prisión por un tribunal de Moscú. Aliójina había violado los términos de su arresto domiciliario al quitarse la tobillera de control electrónico.
La integrante del grupo punk estaba condenada al arresto por ignorar las restricciones impuestas ante la pandemia de coronavirus al organizar una protesta a favor de la liberación del opositor Alexei Navalni. Pussy Riot es un grupo musical conocido por tener una ideología contraria a Vladímir Putin que ha organizado manifestaciones o perfomances reivindicativas para denunciar el régimen de líder ruso.
Debido a estas continuas declaraciones y actuaciones polémicas, María Aliójina ya fue condenada en 2012 a dos años de prisión por vandalismo después de protagonizar, junto a otras integrantes de Pussy Riot, la conocida como 'oración punk' en la catedral ortodoxa de Cristo Salvador de Moscú. Esta perfomance consistió en un espectáculo de protesta en el que corearon la frase: 'Madre de Dios, echa a Putin'.
La noticia de la pena impuesta a la artista causó varias protestas alrededor del mundo por seguidores del grupo y otras personas que estaban en contra de las duras medidas impuestas por el gobierno de Putin. En España, ciudades como Barcelona se sumaron a esta manifestación con el lema "Free Pussy Riot". Incluso muchos rusos que se sintieron ofendidos por su 'performance' en la catedral, admitían que el castigo contra las Pussy Riot había sido desmedido.
6 meses después de esta condena, las penas de la artista y su compañera de grupo, Nadezhda Tolokónnikova, fueron perdonadas por el Gobierno ruso, tres meses antes de que se cumpliera la totalidad de su condena. Tras ello, las activistas concedieron varias ruedas de prensa en las que continuaron con su rechazo al líder ruso.
"No nos liberó por humanidad, sino para mejorar la imagen de Rusia ante los Juegos de Sochi, que es su proyecto favorito", declararon. Como símbolos de la nueva oposición rusa en el momento, se atrevieron hasta a denunciar las condiciones de las cárceles: "en las penitenciarías hay muchas personas que viven al borde de la muerte".
Desde entonces, la miembro de Pussy Riot ha sido detenida en varias ocasiones. En septiembre de 2021, su libertad volvió a estar restringida al ser condenada a libertad vigilada. Esta sentencia le prohibía salir de casa entre las 22.00 horas y las 6.00 horas de la mañana del día siguiente, así como desplazarse fuera de Moscú, o participar en grandes eventos. A su vez, debía comunicar el estado de su situación dos veces al mes.