Beatriz Tajuelo 'aterriza' en la aviación: "El vuelo más extravagante fue con 7 gatos y 2 perros a bordo"
Del lujo más extravagante al uso médico o de seguridad, Welojets ofrece servicios de aviación privada en España.
9 agosto, 2022 00:58“Seis u ocho amigas”, es la escena que comienza describiendo Beatriz Tajuelo (Barcelona, 1979) y que recuerda a series como Inventing Anna o First Class de Netflix para explicar un programa denominado Fly&Shop, “un grupo pequeño de amigas llegando al aeropuerto de Madrid, pero solo con quince minutos de antelación y dirigiéndose directamente a la terminal ejecutiva en la que todo va muy rápido. Un simple aro de seguridad, pero sin esperas”.
Después del paso “por una salita habilitada en la que esperar cómodamente en el caso de que se haya llegado con más antelación”, normalmente sucede “un traslado en una furgoneta especialmente equipada hasta tu avión, donde esperan, en la pista, el comandante y primer oficial, si es que no han bajado a saludarte a la terminal”.
Como parte de la “experiencia” Fly&Shop -esta empresa de aviación privada también se ofrecen en su web otras como Fly&Golf, por ejemplo-, se ofrece el servicio de personal shoppers de eminente consideración con los que colaboran en sus destinos, “ya sea París, Milán o Nueva York”, con acceso a los templos de las marcas globales del lujo, pero también a los espacios de marcas no tan conocidas pero extremadamente suntuosas.
No se encuentran en la web de welojets, como confirma Tajuelo a MagasIN, las habituales imágenes de serios empresarios con maletín y copa de champán, sino que cada vez hay más perfiles variados de usuarios. “Nuestra propuesta de aviación privada no es solo para ese perfil, es una idea preconcebida que no es real”.
“Yo antes había sido azafata de vuelo”, explica Beatriz Tajuelo, pero después se trasladó a Madrid y finalmente, “tras una separación amorosa, volví a Barcelona”. A finales del pasado año Tajuelo estaba trabajando con “redes sociales, colaborando con marcas en temas de comunicación y marketing cuando ese momento surgió la posibilidad de dedicarme a ser bróker de aviación privada”.
¿Cómo llegó entonces a ser bróker de aviación privada?
Un conocido me habló de Alfredo Lisdero y Martin Baldoma, los CEOs de Welojets, queriendo expandir la compañía en España. Tuve una reunión con ellos en el camino de las colaboraciones, pero reunión a reunión, surgió la idea de formarme como broker de aviación privada. ‘Por tu forma de ser, por tu personalidad, el cuidado al detalle y el gusto por organizar’, me aconsejaron que lo hiciera. Y ahí me volvió a nacer el gusanillo de la aviación…
¿En qué consiste la actividad de la empresa Welojets?
Es una empresa de movilidad aérea que trabaja con cinco tipos de transporte [en este momento puntualiza que la aviación privada o ejecutiva es cualquier tipo de transporte que no sea aviación regular, es decir, ‘todo lo que se chartea o alquila’]. En primer lugar, jets privados, en segundo, aviones de pasajeros para grupos, tercero, aviones medicinales [que trasladan a personas enfermas de un sitio a otro, a menudo con personal médico], cuarto y quinto, aviones de carga [de un punto a otro] y helicópteros.
¿Cuál es primariamente su negocio principal?
A día de hoy las reservas de jets privados, eso es lo que gestionamos los bróker.
¿Cuál es el significado de bróker en aviación privada?
Trabajamos mucho con la confianza en el bróker. Normalmente nos llaman o escriben con una petición de día para el vuelo, horario, y en ocasiones peticiones especiales. A partir de esta información, contactamos con el departamento de operaciones y ellos buscan opciones que renegociamos con los clientes.
¿Ofrecen siempre diferentes opciones?
Normalmente damos tres opciones al pasajero, hay tantos modelos de avión privado y tan diferentes que es habitual que sea el pasajero el que decida. Aunque nos suelen pedir opinión, claro.
¿Todas esas opciones de dónde aparecen?
Existen empresas, pero también muchas personas que tienen su avión privado y cuando no lo vuelan lo subarrendan para aligerar sus costes de mantenimiento, pero es importante señalar que sólo pueden operarse aviones certificados para uso de alquiler en explotación de servicios aéreos.
¿Qué ocurre cuando el cliente elige?
Se pone la ‘maquinaria en marcha’ para activar ese vuelo, el contrato, el pago del vuelo… y el pasajero tendrá a partir de ese momento el vuelo listo.
¿Y al acceder al avión, cuál es el protocolo?
Uno saluda a la tripulación mínima de un avión, que son los dos pilotos, comandante y primer oficial y TCP en algún caso, que se solicita, normalmente cuando se trata de un vuelo más largo con servicio a bordo, suele estar atendido por un tripulante de cabina de pasajero.
¿Cómo es la interacción con los pilotos?
Ellos a menudo viajan con la puerta abierta, son muy amables en el despegue o el aterrizaje y explicarán por dónde vas pasando, es muy diferente al vuelo de una compañía comercial, muy relajado, tiene pantallas para visualizar...
¿Y el equipamiento interior?
Hay de todo, desde un dos plazas pequeño, hasta uno que hemos visto recientemente, un Boeing 737 configurado en versión ejecutiva como un hotel de lujo, con habitaciones, y capacidad como para 6 suites.
Entendemos que el tamaño se ajusta a las capacidades, por lógica…
Una cosa es la capacidad y otra es la gente que viaja [responde], en uno de 14 pasajeros pueden viajar cinco personas o incluso una solamente.
Si no son empresarios al uso, ¿cómo son tus clientes?
Hay de todo, los perfiles son mas diferentes de lo que la gente suele pensar. Claro que hay jugadores de fútbol, directivos de grandes empresas, incluso de startups que les está yendo bien, personas mayores por un tema de comodidad… Un ejecutivo de traje y maletín, claro que sí, pero también hace poco dos chicos de treinta años, uno le daba una sorpresa al otro yendo los dos en jet privado a París [explica que este vuelo costaría unos 7.000 euros por trayecto, en un espacio de 5 plazas].
¿Cuáles son las tarifas promedio?
Las tarifas somos muy abiertos a hablar de ellas y nos encanta que nos consulten porque varían mucho, dependiendo de si el avión va y vuelve, de si te espera… no hay unas tarifas fijas, depende del día, de la hora del día, del modelo de avión…
¿Podría al menos darnos alguna otra referencia?
Madrid-Ibiza, que es el vuelo más demandado en España, en un avión para 4 pasajeros puede costar unos 6000 euros. Si calculas un Madrid-Ibiza ida y vuelta para 12 plazas, que ronda unos 20.000 euros, empieza a ser interesante según la época del año…
¿Cómo responden a las críticas por el consumo excesivo?
Somos y apostamos por la movilidad aérea, nuestros dos CEOS están implicados en todas las búsquedas de nuevos tipos de combustibles y uso de los aparatos más optimizados, pero todas estas cuestiones dependen de muchos estamentos.
¿También atienden peticiones especiales?
Sí, ofrecemos ese servicio [en los barcos se denomina concierge] aunque no es nuestro negocio fundamental. Conseguir entradas para un espectáculo, habitaciones en ciertos hoteles, traslados, barcos… Son habituales las peticiones de pasteles de cumpleaños, decoraciones especial en el avión, caterings específicos, sushi o pizzas de tal o cual lugar, botellas de espumosos personalizadas con el nombre de la persona o el logo de la empresa, una frase bonita o un mensaje… ¡cualquier cosa que imagines!
¿Cuál ha sido la más extravagante de esas peticiones?
Ayer me decía una compañera que habíamos organizado un vuelo con 7 gatos y 2 perros, todos a bordo. Son habituales los traslados para ver partidos de fútbol o conciertos.
¿La principal ventaja de la aviación privada cuál sería entonces?
Una de las mayores ventajas es que tú escoges tu horario, tú decides tu horario. Piensa que desde Madrid tenemos muchas opciones, pero desde determinados destinos, en invierno, no hay posibilidad de despegar a lo mejor en días. No solo son los aeropuertos grandes conocidos a los que llegamos, puedes llegar a tu destino final, incluso a un aeródromo. También la privacidad, y la seguridad en términos de salud, es muy valorada en esta época.
Y el alquiler de helicópteros…
Sí, se usan para emergencias, pero sobre todo para hacer rutas de visita o turísticas, en los lugares donde existe el permiso y la posibilidad: muchas personas sobrevuelan Manhattan, el Cañón del Colorado… y lo describen como el mejor día de su vida. Existen muchas limitaciones, porque normalmente no pueden sobrevolarse las ciudades.
¿Y los aviones medicinales o de traslado?
Sirven por ejemplo, para hacer llegar transplantes, un órgano de un hospital a otro de un región. Hay traslados de alguien tras una operación no puede volar en avión comercial y en esos casos puede que el coste lo asuma la mutua.