Pedro Sánchez, durante la organización de la cumbre de la Comunidad Política Europea en Granada

Pedro Sánchez, durante la organización de la cumbre de la Comunidad Política Europea en Granada Reuters

Europa

La cumbre de Granada fracasa en su intento de calmar las tensiones en Nagorno Karabaj y Kosovo

El premier británico, Rishi Sunak, contraprogramó una cumbre de formato restringido sobre migración junto con su homóloga italiana, Giorgia Meloni. 

6 octubre, 2023 02:45
Granada

La que se había presentado como la cumbre de la paz de la Comunidad Política Europea (CPE) en Granada -en la que Pedro Sánchez ha ejercido de anfitrión y organizador- ha concluido entre ausencias destacadas y sin resultados concretos. Además, el presidente del Gobierno en funciones ha anulado sin explicaciones la rueda de prensa final para dar cuenta de lo ocurrido en la reunión, provocando la sorpresa entre el resto de líderes y la indignación de la prensa internacional desplazada a España. 

En la conferencia de prensa tendrían que haber participado Sánchez, la presidenta de Moldavia, Maia Sandu, que acogió la anterior reunión de la CPE en junio; y el primer ministro británico, Rishi Sunak, que se ha ofrecido a organizar la siguiente cumbre en 2024. Sin embargo, las tres delegaciones han sido incapaces de ponerse de acuerdo sobre el formato de la comparecencia, en particular si debía incluir o no preguntas, según han explicado fuentes diplomáticas. 

En las dos anteriores reuniones de la CPE (la primera en Praga en octubre de 2022 y la segunda en Chisinau en junio de este año) sí hubo comparecencias de prensa al final. Desde Moncloa se echa la culpa a Sunak, que se quería marchar antes de la cena y no tenía tiempo para la rueda de prensa. El primer ministro británico tendría que haber anunciado la fecha de la próxima CPE, pero tampoco lo ha hecho.

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En todo caso, la decisión final sobre la rueda de prensa final era de Sánchez, que podría haber cambiado el formato. "Hemos decidido que esto (anularla) era lo más adecuado en este momento", se justifican fuentes gubernamentales. El presidente en funciones sí habló con la prensa al llegar a la reunión, pero sobre todo de temas nacionales como la amnistía a los líderes catalanes del 1-O o la celebración del Mundial de Fútbol 2030 en España, Portugal y Marruecos, que han eclipsado el debate europeo. Tampoco ha habido conclusiones escritas de la cumbre, aunque eso sí es lo habitual en estas reuniones.

Por si fuera poco, Sunak ha montado en Granada una contracumbre de formato restringido sobre migración junto con la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, a la que se ha sumado también el presidente francés Emmanuel Macron, y la presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen, así como los primeros ministros de Albania y Países Bajos. El primer ministro británico ha dicho en un comunicado que la situación en materia migratoria es "inmoral e insostenible" y ha reclamado soluciones europeas para reforzar las fronteras y hacer frente a los traficantes.

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Macron ha explicado que el objetivo de esta minicumbre paralela sin Sánchez era buscar "sinergias" entre la UE, Reino Unido y los países de los Balcanes (que son origen de flujos migratorios) son con el fin de romper las redes de traficantes de migrantes. El presidente francés asegura que este formato está abierto a otros países de la Comunidad Política Europea que quieran sumarse: ya se prepara un plan de acción de cinco puntos para la próxima reunión en Londres. 

La Comunidad Política Europea es precisamente un invento del presidente francés que reúne a un total de 47 países: los Estados miembros de la UE, los candidatos a la adhesión, los que no pretenden entrar y el que se ha marchado (Reino Unido). Su objetivo era escenificar la unidad de todo el continente contra la guerra de agresión de Rusia en Ucrania. Pero la falta de resultados y las crecientes divisiones internas ponen en duda la viabilidad y la supervivencia de este formato.

La presidencia española esperaba aprovechar la cumbre de Granada para apagar, o al menos enfriar, los dos nuevos incendios que han estallado en Europa en las últimas semanas. Por un lado, la 'guerra de un día' que Azerbaiyán lanzó en septiembre para hacerse con el control de la región separatista de Nagorno Karabaj, lo que ha provocado un éxodo masivo de la población de mayoría armenia. Por el otro, la escalada de tensión bélica entre Serbia y Kosovo, que se ha recrudecido tras el ataque contra la policía kosovar.

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En el primer caso, la reunión cara a cara que se había programado en Granada entre el primer ministro de Armenia, Nikol Pashinián, y el presidente de Azerbaiyán, Ilham Alíev, no ha tendio lugar. Alíev ha rechazado viajar a España debido a lo que ha tachado de "atmósfera antiazerbayana". Sus críticas se han centrado particularmente en la postura proarmenia de Francia, ya que Macron y el canciller Olaf Scholz iban a ejercer de mediadores. 

Tampoco ha acudido a Granada el presidente turco, Recep Tayipp Erdogan. "Es una pena que Azerbaiyán no esté aquí. Y es una pena que Turquía – que es el principal país que apoya a Azerbaiyán – tampoco esté aquí. Por lo tanto, no vamos a poder hablar aquí de algo tan grave como el hecho que más de 100.000 personas hayan tenido que abandonar, de prisa y corriendo, sus casas, huyendo de un acto de fuerza militar", se ha quejado el jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell.

El canciller Olaf Scholz; el primer ministro de Armenia, Nikol Pashinyán; el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel; y el presidente francés, Emmanuel Macron, durante su reunión de este jueves en Granada

El canciller Olaf Scholz; el primer ministro de Armenia, Nikol Pashinyán; el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel; y el presidente francés, Emmanuel Macron, durante su reunión de este jueves en Granada Unión Europea

Al final, la reunión se ha celebrado igualmente pero sin el presidente de Azerbaiyán. Scholz, Macron y el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, se han reunido únicamente con el primer ministro Nikol Pashinián. Al final del encuentro han publicado un comunicado conjunto de apoyo a la "independencia, soberanía, integridad territorial e inviolabilidad de las fronteras de Armenia", en el que piden además a Azerbaiyán que respete el derecho de los refugiados armenios a volver sin condiciones a Nagorno Karabaj. Michel ha invitado de nuevo a los dos presidentes para una reunión en Bruselas a finales de octubre.

En el caso del conflicto entre Kosovo y Serbia, el formato de la cumbre tampoco ayudaba. Kosovo ha estado representado por su presidenta, Vjosa Osmani, y no por su primer ministro, Alban Kurti, que es el responsable de negociar con Serbia. Osmani ha pedido a Sánchez que apoye en la UE sancionar a Serbia por el ataque contra la policía kosovar, con el que Belgrado asegura que no tiene nada que ver. "No hay motivos para que nos reunamos (con Serbia) hasta que no se adopten sanciones", ha dicho en Granada. España es uno de los cinco países europeos que no reconoce la independencia de Serbia.

Al final, el gran protagonista de la cumbre de Granada ha sido Volodímir Zelenski, que ha avisado a los allí presentes de que Rusia atacará a más países europeos si no sale derrotada en Ucrania. "Los datos de nuestra inteligencia son claros. Rusia está intentando congelar la situación y adaptarse. Está aprendiendo de sus errores y preparándose para avanzar", sostiene el presidente ucraniano. 

"Si se permite a Rusia adaptarse, para 2028 habrá restaurado su potencia militar que nosotros hemos destruido y será bastante fuerte para atacar a países en el foco de su expansión. Además de Ucrania, se trata sin duda de los Estados bálticos y de otros países donde están presentes contingentes rusos", ha dicho Zelenski.

Pedro Sánchez y Zelenski en Granada.

Pedro Sánchez y Zelenski en Granada. EFE

El presidente ucraniano ha pedido a los líderes europeos que preserven la unidad frente al Kremlin y les ha reclamado más apoyo militar para resistir al invierno, en particular defensas antiaéreas. En un encuentro bilateral, Sánchez le ha prometido a Zelenski seis lanzadores adicionales de misiles Hawk para protección frente a los bombardeos rusos contra objetivos civiles, infraestructuras críticas o el nuevo corredor marítimo de cereales. España mandará también sistemas de defensa antiaérea y antidrones, así como equipos de desminado.

Durante la cumbre de Granada, el presidente del Gobierno en funciones ha mantenido encuentros bilaterales con los primeros ministros de Finlandia, Petteri Orpo; Montenegro, Jakov Milatovic; y Macedonia del Norte, Dimitar Kovachevski; así como con la líder de la oposición de Bielorrusia Sviatlana Tsikhanouskaya.

Una vez finalizada la reunión de la Comunidad Política Europea, los jefes de Estado y de Gobierno de los Veintisiete celebran este viernes en Granada un Consejo Europeo informal, con la inmigración y las reformas internas que necesita la UE para absorber a Ucrania como principales puntos del orden del día.