Noticias relacionadas
Al magnate ruso Oleg Tinkov, dueño del segundo mayor banco de Rusia, le ha salido cara su oposición a Putin y su invasión de Ucrania: hace unos días denunció que se ha visto forzado a vender "por un 3% de su valor" sus participaciones en el banco Tinkoff, que él fundó con sede en Moscú, y que se ha tenido que exiliar con su familia a un lugar secreto y con escolta para escapar de las "amenazas" del Kremlin.
Tras condenar la "masacre" de Ucrania y burlarse de Putin y el ejército ruso, Tinkov teme por su vida. Doblemente. Se está tratando de leucemia desde hace dos años, pero enfrentarse al presidente ruso suele conllevar más peligro de muerte que el cáncer de sangre, como demuestra el reguero de asesinatos de disidentes y empresarios caídos en desgracia tras los que se esconde el poder del autócrata.
En su escondite, Tinkov, de 54 años, aliviará sus penurias estos días gracias a su gran pasión, el ciclismo, montando en bicicleta y viendo por televisión (o in situ) el Giro de Italia. La ronda italiana, una de las tres grandes competiciones por etapas junto con la Vuelta española y el Tour de Francia, empezó el pasado viernes 6 de mayo y se prolongará hasta el domingo 29 de este mes.
Viendo las escapadas de la carrera, Tinkov se acordará de cuando era propietario del equipo ciclista Tinkoff (como su banco) y su vida estuvo en una parte unida, durante cuatro temporadas, con la del líder del grupo, Alberto Contador. El campeón de Pinto (Madrid) le dio al millonario ruso el triunfo en el Giro de 2015.
Contador, ya retirado del ciclismo profesional, es el español que mejor conoce a Tinkov, aunque no tenga ninguna gana de acordarse de él. Contactado por EL ESPAÑOL | Porfolio, excusa hacer declaraciones. Su relación ahora es de espectador aunque sigue muy activo en la formación de nuevas joyas del ciclismo: de hecho de su equipo, el Eolo-Kometa, salió el español que es nuevo líder del Giro, Juanpe López, ahora en las filas del Trek-segafredo, pero formado por la Fundación Contador.
Oleg Tinkov es hoy víctima de Vladímir Putin, pero entre finales de 2016 y gran parte de 2017 Contador fue la víctima verbal de Tinkov. El empresario no paró de hostigar públicamente al ciclista en mensajes en los que lo calificaba como "una mierda" y "un pato cojo" que "debía retirarse".
Las críticas e insultos del banquero fanático de la bicicleta sonaban a despecho. Parecía que no le perdonaba a Contador que abandonara las filas del Tinkoff al final de la temporada 2016 para fichar por el que acabaría siendo su último equipo, el Trek Segafredo.
El empresario ruso hostigó a su antiguo ciclista calificándolo de "pato cojo" que "debía retirarse"
La relación profesional entre los dos amantes de la bici, el patrón y el líder de equipo, comenzó en 2012. Contador acababa de cumplir sus seis meses de sanción (reducida desde los dos años iniciales) por el famoso caso de dopaje por clembuterol, del que el corredor de Pinto siempre se declaró inocente achacando su ínfima presencia a la contaminación accidental en un filete. Esa temporada se reintegró al Saxo Bank, al que se había unido como copropietario el Tinkoff Bank del ruso. El regreso de Alberto Contador tras la sanción fue triunfal: ganó la Vuelta a España en septiembre de 2012.
Contador, el único español que ha ganado las tres grandes vueltas por etapas (Tour, Giro, Vuelta a España), había perdido de forma retroactiva su Giro de 2011 como parte de su sanción, entre otros títulos; pero se desquitó volviendo a lo alto del podio y enfundándose de nuevo la maglia rossa en el Giro de 2015. Oleg Tinkov tocó la gloria a su lado y lo celebró pintándose el pelo de rosa. El banquero dio entonces por buenos los millones de euros que había invertido en el equipo ciclista (en 2016 dijo que su presupuesto anual era de 25 millones).
Pero el año siguiente, en 2016, la euforia de Tinkov se transformó en decepción ante la falta de éxitos. El Giro de 2015 fue la última gran victoria por etapas de Contador. En 2016, el deportista español se había fijado como objetivo ganar el Tour pero tuvo que abandonar. Y, a partir de entonces, su patrón, Tinkov, cargó públicamente contra él con mensajes insultantes y degradantes, haciéndole la vida imposible hasta el punto de que el de Pinto decidió dejarlo al final de esa temporada.
El patrón y el jefe de filas cortaron la relación al final de la temporada ciclista de 2016
En julio de 2016, su tono era crítico pero aún comedido, como cuando escribió en su blog: "Realmente admiro a Alberto, pero en mi humilde opinión él debería detener su carrera este año, porque ahora está en la cima y no puede ir a mejor". Poco después, su crítica se desmadró. En octubre de 2016, Tinkov escribía en su cuenta de Twitter (hoy inactiva) sobre su entonces patrocinado: "Contador, en estos días, es un corredor de mierda. Él lo que necesita es descansar, jubilarse y tener hijos finalmente. Pobre chico". A finales de 2016, Tinkov también se despidió de su equipo y acabó su patrocinio.
Pero el año siguiente, en 2017, continuó atacando a su antiguo líder de filas, asegurando que era "una estafa" los cuatro millones de euros al año que le pagaban. Escribió en marzo de 2017, en inglés, en un mensaje en Instagram: "Contador es un trozo de mierda española. Él nunca va a ganar nada más, es demasiado viejo y demasiado malo. La dieta le volvió loco y avaricioso".
El mes siguiente, en abril de 2017, lo fustigó con varios mensajes seguidos, que remató con este último en Twitter, escribiendo con todas las letras lo que omitimos aquí: "Contador nunca ganará una carrera, debería irse al Teide a perder peso por ahora, pero mejor que deje el ciclismo y empiece a f[.......] a su mujer :-), finalmente". Durante el Tour de Francia, en julio de 2017, seguía cebándose con él: "Vete a casa, estás cansado. Todas mis predicciones se están confirmando. Lo siento, odiadores [de Tinkov]. Parece un estúpido pato cojo. Necesita dejar de ser un perdedor".
Siete oligarcas rusos muertos.
Alexander Subbotin. El directivo de Lukoil murió el domingo 8 de mayo tras someterse a una sesión chamánica con veneno en Mytishchi (Rusia). Su cuerpo se encontró en el sótano de la casa de uno de los chamanes.
Sergey Protosenya. El alto ejecutivo de la empresa de gas Novatek también apareció ahorcado el 19 de abril en su villa alquilada en Lloret de Mar (Cataluña). Su mujer y su hijas fueron apuñaladas con un hacha.
Alexander Tulyakov. El directivo de Gazprom fue hallado ahorcado en su casa de campo en Rusia el 25 de febrero, en un aparente suicidio.
Vasily Melnikov. Trabajaba en la firma médica MedStom y el 24 de marzo apareció muerto a cuchilladas en su casa de Nizhny Novgorod (Rusia) junto a su mujer y sus dos hijos.
Vladislav Avayev. El exvicepresidente del banco Gazprombank fue asesinado de un disparo en su piso en Moscú y su mujer y su hija pequeña, acuchilladas. Su hija mayor encontró los cadáveres el pasado mes de abril.
Mickhail Watford. El oligarca ucraniano, multimillonario gracias a sus negocios de gas y en inmuebles, fue hallado ahorcado en el garaje de casa en Surrey (Reino Unido).
Leonid Shulman. El jefe de transporte de Gazprom apareció muerto en el baño de su casa en San Petersburgo con una nota de suicidio, un mes antes de que estallara el conflicto.
Alberto Contador tenía contrato con Trek Segafredo hasta 2018, pero al final de la Vuelta a España de 2017 hizo lo que, con gruesas palabras, le había aconsejado Tinkov: retirarse. Lo hizo a lo grande, tras ganar la mítica etapa de montaña del Angliru en la Vuelta.
Contador se retiró en 2017, como le aconsejaba con palabras gruesas Tinkov. Se fue a lo grande, ganando la Vuelta
El combativo Contador, que este próximo 6 de diciembre cumplirá 40 años, ponía así final a su carrera como ciclista profesional, camino de los 35. El año siguiente, en abril de 2018, nació su único hijo, Luca, que tuvo con la maestra Macarena Pescador, su novia desde la adolescencia. La pareja acabó divorciándose.
¿Qué ha sido del antiguo patrón y del líder de equipo, de Tinkov y de Contador, desde entonces? El ciclista español, a quien su antiguo y excéntrico jefe reprochaba que fuera "demasiado serio" y "triste", ha desarrollado una carrera estable en torno a la bicicleta y la acción social. Vive en una gran casa en su Pinto de siempre, su pueblo en el cinturón sur de Madrid. Se puede permitir ahora disfrutar más de la vida y trasnochar un poco, como cuando lo ven tomándose algo en el pub La 82 de su pueblo pasada la medianoche.
Con su Fundación Alberto Contador, realiza actividades de concienciación sobre el ictus, el infarto cerebral como el que él mismo sufrió en 2004 y del que se recuperó, y de promoción del uso saludable de la bicicleta. En la competición, fundó con su antiguo compañero italiano de filas Ivan Basso (también sancionado en su día por dopaje) el equipo profesional ciclista Eolo-Kometa, con base en Italia, que estos días disputa el Giro.
En el organigrama, junto a Contador, está como director general su hermano mayor, Fran Contador, un ingeniero que se convirtió pronto en el representante y manager de Alberto. Además, Alberto Contador trabaja como comentarista de ciclismo en Eurosport.
A pesar de la mala relación (sobre todo desde el lado de Tinkov) entre los dos hombres, con la perspectiva del tiempo se aprecia que les unían más cosas además de la devoción por la bici. Los dos practican un lado altruista vinculado a sus propios problemas de salud: Contador tiene la mencionada fundación sobre el ictus y Tinkov, con su propia fundación familiar, ha pagado atención médica para enfermos de leucemia sin recursos.
"He creado desde cero 4 negocios diferentes sin ningún apoyo del Gobierno [ruso]", se jacta el magnate
Los dos son también expertos en caerse y levantarse. Contador, con las caídas reales en la carretera, o la de su infarto cerebral, o con la metafórica de su sanción por dopaje, tras la que volvió con fuerza para redimirse. Y Tinkov, con sus empresas. El ruso, hijo de un minero siberiano, se presenta en Instagram como un "¡oligarca!", como se define despectivamente a los millonarios que han hecho fortuna en el entorno del poder ruso, pero él lo dice irónicamente y para desmentirlo, al asegurar a continuación: "He creado desde cero 4 negocios diferentes sin ningún apoyo del Gobierno". Antes de montar su banco, de joven ganó dinero vendiendo pantalones vaqueros en Moscú, ordenadores importados de Singapur, comida italiana y cerveza.
Antes de la venta, dice que forzada, de su banco al empresario cercano a Putin Vladímir Potanin, el mayor problema que tuvo Tinkov fue en Estados Unidos, por evasión fiscal. En octubre de 2021, pagó una multa de más de 500 millones de dólares para zanjar el pleito con el Departamento de Justicia estadounidense, evitar la extradición desde Londres y dejar en suspenso el año de cárcel de condena. El gobierno británico lo ha incluido en la lista de "oligarcas rusos" sujetos a sanciones y restricciones, aunque él haya condenado el ataque militar de su país a Ucrania.
No se sabe con certeza dónde está Tinkov. Podría ser Londres, donde lo trataron de su leucemia. O Italia, adonde viaja con frecuencia; precisamente, en uno de sus mensajes recientes en Instagram, dijo, en ruso: "Queremos ayudar directamente a los refugiados ucranianos en Italia y a los heridos rusos en Rusia". El 24 de febrero, justo el día que empezó la guerra, colgó un vídeo pedaleando en bicicleta de carretera y con la equipación amarillo-limón de su antiguo equipo: "Sigo con la rehablitación... Aún no es fácil. Por primera vez en dos años y medio, me senté en mi bicicleta favorita, mi día más feliz en muchos meses", escribió.
Ver esta publicación en Instagram
Tinkov, por lo menos, puede presumir de ser feliz con su familia. Una suerte muy distinta a la sufrida por otro poderoso banquero ruso, aliado de Putin, Vladislav Avayev, exvicepresidente del tercer mayor banco de Rusia, Gazprombank, y antiguo funcionario del Kremlin. El cadáver de Avayev apareció el mes pasado en su casa de Moscú junto a los de su esposa y su hija con disparos de bala. La investigación policial apunta a que fue él quien las mató antes de suicidarse.
¿Qué opina Contador sobre Tinkov, su antiguo patrón y denostador que hoy, según ha denunciado el magnate ruso, ha perdido su banco por enfrentarse a la guerra de Putin en Ucrania y tiene que esconderse mientras sigue su tratamiento contra la leucemia?
Preguntado por EL ESPAÑOL | Porfolio, el campeón ciclista responde a través de su equipo de prensa con el silencio: No "hay nada que aportar, decir o valorar sobre Oleg Tinkov".
Alberto Contador responde que no tiene "nada que aportar, decir o valorar sobre Oleg Tinkov"
Una fortuna de 9.400 millones
Oleg Tinkov no se muerde la lengua. El 19 de abril, se desmarcó de la "masacre" de Ucrania y del gobierno de Putin y dijo en su perfil de Instagram que "el ejército ruso es una mierda". El mismo calificativo que usó en el pasado con Contador. El poderoso banco digital que fundó en 2006 contestó enseguida alejándose de él, con un comunicado en el que recordaba que Tinkov "hace años" que no forma parte de sus órganos de decisión.
En su hasta ahora último mensaje, el 3 de mayo, el empresario informa, en ruso, de la venta de su participación. En tono elegíaco, cuenta: "Adiós Banco Tinkoff, Adiós Rusia. No me queda nada en Rusia. Y esto es malo para Rusia. ¡Fui uno de los pocos que logró, a pesar de y no gracias al régimen, construir cuatro negocios diferentes desde CERO!".
Se calcula que Tinkov, obligado por el entorno de Putin a vender su participación en el banco, ha recibido cerca de 300 millones de dólares. Él estima que esta cantidad equivale al 3% del valor real del banco Tinkoff.
Añade en su mensaje: "En mi apogeo, Forbes valoró mi fortuna en 9.400 millones de dólares. ¡Y estaba orgulloso, pero no de la cantidad, sino del hecho de que en la Rusia corrupta y arcaica, se puede construir un tipo de negocio HONESTO, libre y estadounidense!" [...]. Es una pena que mi país finalmente haya caído en el arcaísmo, el paternalismo y el servilismo".
"Y las amenazas para mí personalmente, una persona que está luchando contra el cáncer de sangre más grave, la leucemia, el deseo de castigar solo por una OPINIÓN, mi opinión honesta, habla de la deshumanización final del régimen", continúa el banquero y antiguo jefe ciclista de Contador.
Y concluye: "¡Ni un solo millón vale las lágrimas de un niño! Perdí todo, pero no perdí mi Alma. No puedo ganar dinero fácilmente en un país que está en guerra con un vecino, matando civiles y niños, ¡no necesito ninguna razón! [...]. Ucrania ganará porque el bien siempre vence al mal, ¡nos lo enseñaron en la escuela!".