Imagen de uno de los dos menores extremeños detenidos por matar presuntamente a su educadora social.

Imagen de uno de los dos menores extremeños detenidos por matar presuntamente a su educadora social. E.E.

Reportajes

Los delitos de los asesinos de la educadora: uno cometió 37 en dos días y el otro le pegó y rompió la nariz a su padre

El juzgado los interna en régimen cerrado a petición de la Fiscalía de Menores de Badajoz tras presuntamente matar a Belén Cortés.

Más información: La Policía cree que los menores de 14 y 15 años asesinaron a la educadora de Badajoz y la chica sólo fue conductora en su huida

Publicada

Dos perfiles distintos. Uno, de 14 años, violento en el ámbito familiar. El otro, de 15, un delincuente en potencia, multirreincidente y también violento, especializado en hurtos y robos de vehículos.

Tras matar presuntamente a la educadora social Belén Cortés el pasado domingo, el Juzgado de Instrucción número 1 de Badajoz ha adoptado la medida cautelar de internamiento en régimen cerrado para los tres menores detenidos por la muerte de Belén Cortés, la auxiliar técnico educativa que pernoctaba con ellos en una vivienda de cumplimiento de medidas judiciales de la capital pacense. La tercera es la chica, también menor y con 17 años, sobre la que la Policía cree que los ayudó a escapar conduciendo el vehículo de Belén.

Las diligencias judiciales abiertas se siguen por los presuntos delitos de homicidio, robo con violencia y contra la seguridad vial, han informado fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Extremadura (TSJEx).

La medida cautelar de internamiento en régimen cerrado ha sido adoptada por el juzgado a petición de la Fiscalía de Menores de Badajoz, instructora de la causa, tras una vista celebrada en sede judicial.

La auxiliar técnico educativa fue asesinada en la noche del pasado domingo por tres menores residentes en la vivienda, donde ese día la educadora tenía el turno de noche.

De 35 años y natural de Castuera (Badajoz), la auxiliar fue agredida mortalmente por dos chicos de 14 y 15 años y una joven de 17, que fueron detenidos horas después por la Policía Nacional.

Según ha publicado el periódico El Mundo, el de 14 años responde a las iniciales de D. G. P. y era, fundamentalmente, agresivo en el entorno familiar. Agredió físicamente a su padre cuatro veces en mes y medio y le rompió la nariz.

El de 15 años, J.J.G. tenía un perfil diferente. Se trataba de un delincuente habitual que había sido perseguido varias veces por la Policía incluso en coche, pues su especialidad era el hurto y el robo de vehículos. En 48 horas de un mismo fin de semana había llegado a perpetrar la friolera de 37 delitos. Su familia denunciaba tanto sus desapariciones como sus huidas, a diferencia de la del otro menor de 14 años, hijo de padres divorciados y con sentencias firmes por violencia de género.

Los dos son españoles, uno nacido en Don Benito y el otro en Villafranca de los Barros. El de 15 años recaló en el chalé tutelado de Badajoz donde ocurrió el homicidio de Belén hace un mes. Venía de otra vivienda tutelada en Mérida, de donde había sido despachado tras protagonizar varios hechos delictivos, uno de ellos, pegarle a un jugador de balonmano, deporte que practicaba. Su periplo no comenzó ahí. También había estado en Villafranca de los Barros por amenazar físicamente a un profesor por ponerle un cero en un examen.

Se encontraban en régimen de semilibertad, de acuerdo a los criterios de reinserción. Por eso la administración extremeña los matriculaba en institutos de Secundaria.

Según las primeras pesquisas, la educadora pudo ser asfixiada con un cinturón. Tras la agresión mortal, los tres menores cogieron las llaves del coche de la víctima y condujeron en dirección a Mérida. Sin embargo, tuvieron un accidente de tráfico a la altura del municipio pacense de Lobón, a unos 30 kilómetros de la capital extremeña.

En el lugar del accidente fue detenida la joven, mientras que los dos chicos fueron localizados en Mérida. De hecho, la Policía sospecha que los asesinos de Belén Cortés podrían haber sido los dos menores de edad y no tres, como se dijo en un primer momento, según ha avanzado hoy este periódico.

Según fuentes de la investigación, los autores materiales podrían haber sido únicamente los dos varones de 14 y 15 años de edad, mientras que la adolescente de 17 habría actuado como conductora del vehículo que utilizaron para huir, un Renault Megane de color gris que robaron a la víctima.

En la vivienda, donde residían los menores, trabajan cinco auxiliares técnicos educativas, entre ellas la ahora fallecida, un coordinador y otro profesional, todos ellos con turnos rotatorios.