
Macy's se encuentra en un proceso de reestructuración.
La icónica tienda de Estados Unidos que está cerrando sus locales y ahora ha puesto en remate su inventario
La histórica cadena de retail estadounidense enfrenta una drástica reestructuración tras la caída en sus ventas.
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Macy’s, el gigante del comercio minorista de Estados Unidos, ha tomado una decisión histórica que marcará un antes y un después en su trayectoria. La compañía ha anunciado el cierre de 150 de sus tiendas en todo el país en los próximos dos años como parte de su nueva estrategia, denominada “Un nuevo capítulo audaz”.
Esta medida, impulsada por una fuerte caída en las ventas y el cambio en las preferencias de los consumidores, ha dejado una profunda huella en la industria minorista. Las tiendas que cerrarán, muchas de ellas con una larga tradición, forman ahora parte de un proceso de reestructuración para adaptarse a la era digital.
La noticia ha causado gran revuelo, no solo por la magnitud del cierre, sino también porque muchos de estos locales, en especial los de áreas emblemáticas como Broadway Plaza en Los Ángeles, son considerados íconos del comercio estadounidense. Sin duda, este cierre marca un triste adiós a una era de compras tradicionales, ya que los consumidores, en su mayoría, ahora se sienten más atraídos por las compras en línea.
A medida que Macy’s liquida miles de productos, los descuentos masivos no solo han atraído multitudes en busca de gangas, sino que también han generado un aire de nostalgia por lo que representaban estas tiendas.
Macy’s remata su inventario: Ofertas imperdibles
Como parte de esta transición, Macy’s ha comenzado a realizar ventas de liquidación en las tiendas que cerrarán, ofreciendo descuentos de hasta un70 % en productos seleccionados, como ropa, muebles, cosméticos y más.
Estos remates no solo están atrayendo a miles de compradores en busca de gangas, sino que también marcan el fin de una era en la historia del comercio tradicional en Estados Unidos. Las rebajas, aunque tentadoras, también reflejan la melancolía de un capítulo que llega a su fin para Macy’s.
Aunque la compañía está tomando una decisión drástica con el cierre de tiendas, no está abandonando completamente su presencia física. De hecho, Macy’s tiene planes de fortalecer su enfoque en el comercio digital. Con el objetivo de adaptarse a la nueva era, la compañía apuesta por un crecimiento digital que podría ayudarla a recuperar terreno en el mercado, aunque enfrentará una competencia feroz de gigantes como Amazon y Walmart.
¿Qué tiendas de Macy’s están cerrando?
El cierre de tiendas de Macy’s afecta a varios locales clave, como la histórica tienda de Broadway Plaza en Los Ángeles, que durante años ha sido un símbolo de lujo y tradición para generaciones de compradores. Sin embargo, aunque la compañía aún no ha publicado una lista definitiva, se espera que muchas de las ubicaciones más representativas se vean afectadas por esta reestructuración.
La desaparición de estos puntos de venta es un reflejo de una tendencia más amplia en el sector minorista. Grandes cadenas como Sears y JCPenney ya han enfrentado desafíos similares, obligándolas a reestructurarse para poder sobrevivir en un mundo que ha cambiado drásticamente.
La popularidad de las compras en línea, sumada a la caída en las visitas a los centros comerciales, ha provocado un descenso en las ventas de las tiendas físicas tradicionales.
El impacto de las compras en línea
El declive de Macy’s está relacionado con una serie de factores que han impactado directamente en el modelo de negocio de las tiendas físicas. La volatilidad económica de los últimos años, los cambios en los hábitos de consumo y el impacto de la pandemia de COVID-19 han llevado a más consumidores a preferir el comercio electrónico. Durante los confinamientos, muchos descubrieron la comodidad de comprar desde casa y recibir productos directamente en sus hogares, lo que ha reducido significativamente el tráfico en las tiendas físicas.
De hecho, en 2023, Macy’s reportó una caída del 5.5 % en sus ventas netas, alcanzando los 23,100 millones de dólares. Esta pérdida refleja el enorme reto que enfrentan las grandes cadenas de almacenes para mantenerse competitivas, mientras las plataformas digitales dominan el mercado. La preferencia de los consumidores por la comodidad y las ofertas personalizadas en línea ha sido un factor decisivo en este proceso de reestructuración.