El Ayuntamiento ofrece 300 plazas en ocho talleres temáticos para mayores

El Ayuntamiento de Salamanca ofrece una nueva edición de talleres temáticos para personas mayores, con una variada programación, que se desarrollará durante el último trimestre del año.

El objetivo de esta actividad es ofrecer una programación para este colectivo que incluya materias y temas que no se tratan habitualmente en los talleres formativo-ocupacionales ya consolidados.

El Ayuntamiento ofrecerá 300 plazas distribuidas en ocho actividades diferentes que se desarrollarán en los centros municipales de mayores.

Cabe recordar que los talleres temáticos tienen una duración menor en número de horas y un contenido variado en torno a la cultura, la historia, el arte y los oficios, así como las prácticas saludables y habilidades sociales y auto cuidados.

El número de horas por taller oscilará entre un máximo de 48 horas y un mínimo de 20. En cuanto a la participación estará entre las 17 y 15 personas por taller, salvo en el de Cine-Fórum, que contará con un aforo de 88 personas, en el Centro Municipal Tierra Charra.

Como novedad este año se ofrece las propuestas “Con mi Mirada”, donde las personas mayores aprenderán a usar la cámara de su móvil para captar imágenes con las que transmitir lo que perciben de la sociedad. Posteriormente se realizará una exposición con las instantáneas captadas.

Otro de los talleres que se ofrecerá como novedad en la programación será el de Arte, Oficios y Tradiciones, con iniciación al crochet tradicional y con diseños actuales con esta técnica.

Asimismo, los mayores también podrán participar en un taller de Marcha Nórdica, una actividad aeróbica al aire libre.

Cabe destacar que esta programación se enmarca en las diferentes actuaciones que lleva a cabo el Ayuntamiento de Salamanca para fomentar en las personas mayores un envejecimiento activo a través de la ocupación del tiempo de ocio, transformando éste en un tiempo para el auto-cuidado, el aprendizaje, la creatividad y la cultura; y de forma paralela incentivar las relaciones personales y el desarrollo de la autoestima de los mayores.

Además, la participación de las personas mayores en este tipo de programas propicia la proyección de una imagen activa y positiva de este colectivo tanto en el ámbito familiar como social.