Rima interna por Martín López-Vega

La educación física de Basarab Nicolescu

20 enero, 2014 12:11

Si uno busca información acerca de Basarab Nicolescu (Ploiesti, Rumanía, 1942) difícilmente encontrará alguna relacionada con la poesía. Nicolescu es físico cuántico, como, en el fondo, han sido siempre los grandes poetas sin saberlo. Fundador y presidente del Centro Internacional de Investigaciones y Estudios Transdisciplinarios, es una de esas pocas mentes que entiende que nada de lo humano es ajeno a nada de lo humano. Nicolescu defiende que no hay ciencia sin conciencia, algo que podríamos considerar similar a incorporar la autoironía al pensamiento científico: la ciencia siempre debe recordar que algo se le está escapando siempre.

Salto de Página edita ahora los Teoremas poéticos de Nicolescu. La idea de estos teoremas, como cuenta el autor en el prólogo, le sobrevino tras un encuentro con el escritor francés Michel Camus y el poeta argentino Roberto Juarroz y son, según él, un lugar de encuentro entre la física cuántica, la filosofía de la naturaleza y la experiencia interior y recurre para explicarlo al tercero secretamente incluido del que hablaba Camus, que tiene mucho que ver con el tercer espacio que Soja ha visto en las teorías de Henri Lefebvre. Estos teoremas los traduce Clara Janés, quien además de poeta esencial es probablemente la mayor maestra de curiosidad que ha tenido la poesía española de las últimas décadas. En un número de la revista Adamar en el que adelantaba su traducción de estos Teoremas explicaba Clara Janés cómo había llegado a ellos a través de un número de la revista Sources dedicado, precisamente, al encuentro entre física y poesía que acabaría siendo esencial para explicar un tramo importante de la poesía de la autora.

Los teoremas de Nicolescu tienen, en efecto, algo de teorema, algo de poema y algo de aforismo, y están en ese tercer espacio que los convierte más en manantial que en desembocadura, siendo todo ello a la vez. Algunos de ellos:

Prácticamente todos los filósofos de todas las épocas han dedicado su tiempo a negar los milagros. De este modo hemos llegado naturalmente a negar nuestra propia existencia que es el milagro de milagros. Elemental error de lógica.

Hay tres tipos de ciencias: las que predicen lo desconocido a partir de lo conocido, las que predicen lo desconocido a partir de lo desconocido y finalmente las que predicen lo desconocido a partir a la vez de lo conocido y lo desconocido. Lo desconocido contiene lo conocido, mientras que lo conocido no contiene lo desconocido.

Dar un sentido al sentido es insensato. Pues lo insensato del sentido es el sentido mismo.

El encuentro entre la poética y lo cuántico engendra el sentido.

La única voluntad política eficaz es la voluntad poética.

El conocimiento poético es el conocimiento cuántico del tercero secretamente incluido.

¿Hay barbarie peor que la de la no-contradicción?

La Naturaleza es un pre-texto. El libro de la Naturaleza no hay que leerlo, hay que escribirlo.

La lógica binaria es mortífera. Busca siempre el tercero secretamente incluido.

Merece la pena enredar unas horas entre los hilos sutiles de Basarab Nicolescu quien nos recuerda muchas cosas importantes, entre ellas, una que debería sorprender con las manos en la masa a tanto poeta modernillo de pacotilla: aplicar la física cuántica a la poesía no consiste en hablar de física cuántica en los poemas. La física cuántica y la poesía, como sabe cualquiera (cualquiera que lo sepa) son lo mismo desde el origen. El Mediterráneo está descubierto hace mucho. Nos queda renombrarlo: reinventarlo.

 

 

 

 

 

 

El costumbrismo fantástico de Chema García Ibarra

Anterior
Image: Alfaguara, diez lustros de fe en la literatura

Alfaguara, diez lustros de fe en la literatura

Siguiente