Mentiras de verdad
Andreu Martín
5 julio, 2000 02:00Treinta años más tarde él mismo recompone el recuerdo de aquellos quince "días trascendentales" en que un incidente imprevisto le presentó la ocasión de poner a prueba su rebeldía. De indagar en la "biografía de pareja" de sus padres, de jugar al compromiso político, de superar las inseguridades de su primer enredo sentimental... En definitiva, de ir constatando la cantidad de "mentiras de verdad" necesarias para llegar a las únicas verdades importantes para la vida.
Bajo el signo de esa paradójica frase transcurre este relato del inventor del detective Flanagan y de un largo listado de exitosos títulos. También éste, sin ser de los más logrados, contará con el beneplácito de muchos, pues a A. Martín le sobran recursos para ambientar una historia y escalonarla con sobresaltos que mantienen vivo el interés. A eso hay que añadir su habilidad para respaldar la trama de peripecias que en este caso protagoniza el joven engarzado en el relato expuesto desde la perspectiva del adulto, con la recreación de un contexto social y político rico en pinceladas que matizan la información sobre esa época. Esos materiales son los que imponen veracidad a esa historia, pero también la descompensan, pues en su composición parece haber volcado el autor más esfuerzo que en las peripecias que sustentan la ficción argumental. Conseguida, eso sí, en sus objetivos de formar e informar a lectores jóvenes, además de entretener.