Por qué en Soria hay el triple de muertes por COVID-19 que en el promedio de España

Cuando comienza su turno y Toño se coloca el mono, la mascarilla y las gafas de protección antes de subirse en la ambulancia, el destino hacia el que se dirija el vehículo es lo de menos. Porque este sabe que, salvo extrema rareza, será un soriano aquejado de covid-19. Y que, probablemente, por el desmantelamiento que sufre su provincia y que se ha visto agravado por toda la pandemia del coronavirus, tiene muchas más posibilidades de no tener un final feliz.

Sin embargo, a sus 41 años, a Toño es complicado quitarle las ganas de pelear por su tierra, por los suyos. Él es técnico de emergencias sanitarias en la única ambulancia medicalizada que hay en toda la provincia de Soria. “Es la otra UME: en vez de la Unidad Militar de Emergencias, esta es la Unidad Medicalizada”, sonríe en conversación con EL ESPAÑOL. 

Porque si Soria ya estaba asfixiándose poco a poco, ahora ha tenido que lanzar un SOS en toda regla. La situación es “límite”, en palabras de las autoridades. Y los datos hablan por sí mismos: los fallecidos por cada mil habitantes representan el 41,76% en la provincia castellanoleonesa, frente al 15,73% del conjunto de España.   

El ratio de contagio también se mueve en los mismos parámetros. Con datos del 30 de marzo [los últimos disponibles al cierre de este reportaje], en Soria se han registrado 550 casos de coronavirus. Aquí la media es de 0,62%. En Castilla y León, el 0,24%. Y en España, el 0,18%.

Esto es: Soria triplica la media nacional y más que duplica la regional. “Cuando empezó la covid-19, dijimos que no viniese la gente de Madrid, de Zaragoza… porque estamos muy limitados, no tenemos muchos recursos”, desliza, prudente, el sanitario.

UCI completa del único hospital

“En Soria, como en otras ciudades pequeñas, es donde más se puede agravar la crisis sanitaria. El problema que tenemos aquí es que los recursos están muy limitados”, explica Toño, que ejerce también como portavoz de la plataforma ciudadana Soria YA. “Ahora mismo, al estar las UVI y UCI saturadas, se están trasladando pacientes a otras provincias. Aquí no hay ni material ni sitio”, suspira.

El entramado sanitario en Soria es bastante parco: lo que para, a nivel administrativo, sólo cuenta como un único centro -el Complejo Asistencial Soria-, en realidad se divide en dos hospitales: el Santa Bárbara -principal- y el Virgen de Mirón. Antes de toda esta epidemia, narra Toño, “hubo muchísimos recortes en la provincia. Se proyectó un nuevo hospital que debía estar terminado para 2014 y acaban de empezar las obras de la segunda fase”, se lamenta. 

Así, “únicamente se cuentan con 270 camas en el hospital Santa Bárbara”. 270 para los 88.600 habitantes de la provincia soriana -según el INE- y para los 39.398 ciudadanos que residen en la capital. No hay otras clínicas privadas en las que se pueda apoyar la sanidad pública, no. Tampoco públicas. Sólo 270 camas. De ellas, “tenemos 10 camas UCI y 2 habitaciones de presión negativa”, detalla Toño. Por eso, y bajo las circunstancias actuales, se ha reconvertido todo lo posible y se han conseguido 11 puestos más en la UCI.

Toño en un momento de su jornada laboral. EL ESPAÑOL

Todas están completas ya. Todas. Y el promedio de la estancia es de unos veinte dias. Sin contar, claro, con el 10% de profesionales sanitarios contagiados o en cuarentena. El propio Toño salió de la suya hace apenas unos días. 

“Hay que ingeniárselas, la manera de trabajar ha cambiado muchísimo”, explica. “Antes tenías un trato directo con el paciente, estabas con él continuamente, con los tratamientos que les podías hacer. Ahora mismo es técnica de guerrilla: los avisos son más largos, las respuestas son más largas, los EPIs [equipos de protección individual] tardan… el trato con los pacientes es casi sin tocarles”.

Además, prácticamente sin protección. “Nosotros los EPIs los estamos desinfectando, lavando y esterilizando. Así andamos, sobre todo los monos. Una equipación que es de usar y tirar se está reutilizando, bastantes veces. Pierden el efecto que tienen que hacer”, comenta, preocupado.

Los ancianos, mayoría en Soria

Pero si hay un sector entre el que está cundiendo el temor ante el contagio de la covid-19 es el de los más mayores. Soria es una provincia muy envejecida. Tanto, que cuenta con 2.385 personas en residencias y 2.794 plazas. “Están asustados, como es normal en esta situación”.

“Todos los señores mayores están confinados en las residencias. El 22% de nuestros ancianos están aislados ahí”, ahonda Toño. Son estos centros donde más duramente está atacando el coronavirus al ser las personas mayores las más vulnerables. “Ves las cifras de Madrid y Barcelona y asustan, pero lo trasladas.. y la situación es negra. Y la limitación tanto de personal como de material que tenemos hace ver que irá a peor”.

La presión que se está viviendo en la provincia castellanoleonesa es tal que la Junta se ha visto obligada a trasladar pacientes a centros sanitarios de gran capacidad en otras provincias cercanas, principalmente Burgos o Valladolid, para poder liberar alguna cama para nuevas urgencias.

"Este SOS se tiene que escuchar en Madrid y en Valladolid para que gestionen esta situación en una de las provincias más afectadas", ruega en declaraciones a Europa Press el alcalde de Soria, el socialista Carlos Martínez. Entre las reclamaciones de los sorianos están la petición de un hospital de campaña, más medios materiales y humanos, un plan de Contigencia con camas en el Centro de Referencia Estatal y el traslado de pacientes.

Así, le ha pedido al Gobierno de Sánchez que pide al Gobierno que "a la hora de priorizar el desplazamiento de personal se tenga en cuenta las necesidades de una provincia como Soria. La realidad es mucho más cruda que los datos oficiales".

Tanto, que, según las cifras oficiales a 30 de marzo, los fallecidos tan sólo son 37, entre los 112 ingresados en planta y los 19 ingresados en UCI. Pero con los datos oficiosos -esto es, los muertos según el Registro Civil, la imagen cambia: en marzo de 2019 fenecieron 83 sorianos; este mes, 226.

Mientras, en Soria ya han lanzado el mayor SOS que se les recuerda a una provincia históricamente castigada por la despoblación y la falta de inversión pública. Lo único que esperan es que, ahora y gracias al coronavirus, sí se les escuche.