Los datos indican que el alza continúa siendo la norma. El Índice de Precios de Consumo (IPC) subió al 4,1% en abril, ocho décimas en tasa interanual por el aumento de los carburantes. A pesar de que la subida del precio de los alimentos haya dado un respiro en abril (con un aumento del 0,3%), estos siguen siendo el grupo de gasto que más aumenta de precio en comparación con abril de 2022. Ante esta situación, los consumidores se han visto obligados a realizar ajustes en sus compras para poder llegar a fin de mes.

Lo hemos comprobado desde Capterra, donde nos propusimos comprender mejor cómo están enfrentando los españoles esta situación. Los resultados revelaron que más del 90% de los encuestados ha notado un aumento de precios en productos o servicios durante el último año.

De entre las personas que han percibido el incremento, el 85% ha modificado su comportamiento de gasto, mientras que solo el 15% afirma que sigue gastando como antes. Los cambios más comunes en los hábitos de consumo incluyen la compra de productos más baratos, la adquisición de marcas blancas, el retraso o la eliminación de compras grandes, el uso de transporte público y el aumento del ahorro personal.

Sin embargo, a pesar de los esfuerzos de los consumidores por adaptarse a la inflación, se evidencia una percepción de que las empresas no se están esforzando por ayudar a los clientes a gestionar la subida de precios. Casi la mitad de las personas que han notado un aumento en los precios cree que las compañías no están haciendo lo suficiente para ayudar a los consumidores.

Casi la mitad de las personas que han notado un aumento en los precios cree que las compañías no están haciendo lo suficiente para ayudar a los consumidores

Cuando los precios aumentan, las empresas se enfrentan al desafío de mantener a sus clientes leales y atraer nuevos, al tiempo que protegen sus márgenes de beneficio. Ante esta situación, existen varias estrategias que las marcas pueden implementar para enfrentar la subida de precios y satisfacer las necesidades de los consumidores.

Una de las estrategias más efectivas es ofrecer descuentos adicionales. Por ejemplo, muchas empresas ofrecen descuentos especiales a los suscriptores de sus boletines informativos. El 65% de los encuestados que han notado subidas de precios expresaron su deseo de que las marcas ofrezcan más descuentos como reacción a estos aumentos.

Otra opción es diversificar la oferta de productos o servicios, ofreciendo alternativas más asequibles. Esto permite a los consumidores mantenerse fieles a la marca sin comprometer su poder adquisitivo. A un 40% de los consumidores que percibieron aumento de precios les gustaría que las marcas ofrecieran más alternativas de productos o servicios.

Cuando los precios aumentan, las empresas se enfrentan al desafío de mantener a sus clientes leales y atraer nuevos

La transparencia también juega un papel fundamental en momentos de inestabilidad económica. Destacamos que un 37% de aquellos que admitieron haber notado cambios en los precios querrían que las marcas fueran más transparentes al hablar de estos cambios. Es esencial que las empresas sean transparentes al comunicar los cambios de precios a los consumidores para generar confianza.

Los programas de fidelización son otra estrategia efectiva para abordar la subida de precios, así como ofrecer gastos de transporte reducidos o gratuitos para disminuir el abandono de carritos de compra en eCommerce y aumentar el valor promedio de las transacciones.

Lo hemos comprobado: los consumidores están muy concienciados con sus gastos, por lo que necesitan que las marcas les ayuden a hacer frente a una situación económica turbulenta. Por otro lado, la subida de precios plantea desafíos para las empresas, pero también brinda oportunidades para adaptarse y satisfacer las necesidades de los consumidores. No se trata sólo de mantenerse competitivas, sino también de cultivar relaciones sólidas y duraderas con los consumidores.

*** Alejandra Aranda es Content Analyst en Capterra.