Los equipos de rescate cántabros intentando llegar al coche de los cuatro madrileños.
Vallecas llora a los cuatro jóvenes que murieron al despeñarse su coche en Cantabria: Ayuso, consternada
La alerta al 112 la envió de forma automática uno de los móviles de los chicos del vehículo siniestrado.
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Vallecas amaneció este domingo entre incredulidad y dolor. Nadie entendía qué había pasado con los cuatro jóvenes del barrio de Palomeras que habían perdido la vida en la ladera del Puerto de Lunada, en Cantabria. El accidente ocurrió el sábado por la noche cuando los dos chicos y dos chicas de entre 20 y 21 años perdieron el control del vehículo que cayó 300 metros abajo; se cree que por la nieve y el hielo. De hecho, la carretera no tenía quitamiedos y bordea un precipicio.
Los restos mortales de los cuatro jóvenes ya se han trasladado a Madrid después de que hayan concluido las autopsias para que puedan ser llorados y enterrados por sus amigos y familiares.
Así lo ha informado a Europa Press fuentes de la Delegación del Gobierno en Cantabria, que han precisado que las autopsias de las dos mujeres y dos hombres, un chico y una chica de 20 años, y otra pareja de 21, residentes en Madrid, han finalizado a primera hora de esta tarde en el Instituto de Medicina Legal de Cantabria, ubicado en Santander.
Los fallecidos pertenecían a la asociación Krecer e iban a varios centros educativos del barrio. Viajaban en un grupo de ocho que estaba pasando el fin de semana en el valle de Pas.
El Centro de Atención a Emergencias 112 del Gobierno de Cantabria recibió la llamada de aviso del accidente desde el teléfono móvil de uno de los ocupantes del vehículo siniestrado, que envió una alerta automática tras detectar el impacto, y en torno a la medianoche se localizó el vehículo.
Según ha informado el Ejecutivo, hasta el lugar de los hechos se desplazaron, en un primer momento, bomberos del parque de emergencias de Villacarriedo, personal de mantenimiento de carreteras, la Guardia Civil de Tráfico y el servicio de emergencias sanitarias 061.
Ante la gravedad del siniestro y la dificultad de acceso a la zona en la que se encontraba el vehículo, fue necesaria la participación de bomberos de Santander y técnicos de rescate del Gobierno de Cantabria para proceder al rescate de los cuerpos, que se produjo sobre la 1.25 horas, tras la autorización de la Guardia Civil, una vez certificada la muerte de sus cuatro ocupantes.
El rescate se prolongó hasta las 6.00 horas ante la dificultad de acceso. Ha sido un equipo de una decena de personas el que ha realizado las maniobras tanto de excarcelación como de reporte de los cuatro fallecidos.
El Gobierno también ha movilizado al lugar del siniestro al equipo de psicólogos para atender a los cuatro jóvenes que viajaban en un vehículo que acompañaba al siniestrado y que resultaron ilesos, quienes fueron trasladados a un alojamiento rural cercano al lugar del accidente. Los ocho venían a Cantabria a pasar el fin de semana.
Ayuso da el pésame a la familia
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha sido la primera de una larga lista de políticos y autoridades que han querido trasladar el pésame a los familiares de los cuatro jóvenes madrileños. Y ofrecer el apoyo del Gobierno regional "en todo lo que puedan necesitar".
"Ha sido una noticia triste, trágica y nos ha dejado consternados, puesto que son pérdidas de vidas de gente tan joven, de chavales que se han visto en una situación así, dejando a sus familias rotas, a todo su entorno personal o a sus amigos", ha afirmado.
El propio delegado del Gobierno, Francisco Martín, insistió ayer en dar "todo nuestro cariño y apoyo a los familiares y amigos de los 4 jóvenes madrileños fallecidos en el accidente de tráfico sucedido anoche en Cantabria. Una inmensa desgracia".
También ha querido mostrar su "agradecimiento" a la Guardia Civil y a los servicios de emergencia cántabros por "su extraordinaria labor de rescate".
